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jueves, 27 de mayo de 2021

CRUELLA: CRÍTICA DE CINE

Cruella, está dirigida por Craig Gillespie con guion de Aline Brosh McKenna, Jez Butterworth, Kelly Marcel, Steve Zissis, Dana Fox y Tony McNamara. “Soy una mujer, escúchenme rugir”

El largo prólogo nos presenta a una niña rebelde de nombre Estrella (Tipper Seifert-Cleveland), que lleva el pelo mitad blanco y mitad negro. La única que parece comprenderla es su madre, Catherine (Emily Beecham), quien siempre le da buenos consejos: “No intentes destacar, intenta encajar”. Un día la lleva a una gran mansión en cuyo interior la baronesa y diseñadora (Emma Thompson), celebra un gran desfile para la alta sociedad. Allí Estrella vivirá dos acontecimientos que la marcarán, descubrir el maravilloso mundo de la moda y  desgraciadamente, perder a su madre, que cae por un acantilado.

Estrella pronto adoptará el nombre de Cruella, uniéndose a dos niños vagabundos y ladronzuelos, Jasper y Horacio. A medida que crecen, sus robos se vuelven más sofisticados. Cruella (Emma Stone) diseñará cada uno de los trajes para los nuevos atracos, mientras que Horacio (Paul Walter Hauser) y Jasper (Joel Fry), preparan los golpes. Todo va perfecto hasta que Cruella decide recuperar una joya que pertenecía a su madre y que se encuentra en poder de la baronesa. Y hasta aquí os puedo contar, pues esta nueva película de Cruella, es un gran espectáculo, digno de disfrutar. Un filme Disney, para adultos.

Cruella de Vil, es el personaje malvado del gran clásico de Disney, los 101 dálmatas (1961) dirigida por Wolfgang Reitherman, Clyde Geronimi y Hamilton Luske, cuya obsesión era hacerse un abrigo con la piel de los dálmatas, en ella también aparecían los dos ladronzuelos Jasper y Horacio, un tanto bobalicones. La versión de acción real de dicho clásico, se estrenará, simultáneamente en Cines y Disney+ (con costo adicional).

Craig Gillespie, con 19 años se fue a vivir a Nueva York para estudiar Ilustración, diseño gráfico y publicidad en la Escuela de Artes Visuales de Manhattan. Trabajó durante 15 años como director comercial para varias agencias publicitarias. Obtuvo diversos premios del sindicato de Actores, el León de Oro en Cannes en 2005 y dos de sus spots forman parte de la colección permanente del Museo de Arte Moderno de Manhattan; todos ellos como es de entender, en la categoría de anuncios publicitarios. En 2007  salta a la gran pantalla con su largometraje “Cuestión de pelotas” y “Lars y una chica de verdad” a las que han seguido “Miedo de Noche” 2011, “”El chico del millón de dólares” 2014, “La hora decisiva” 2016, “Yo, Tonya” 2017 y en este 2021 estrena “Cruella”. Atrás quedan series como “United States of Tara” 2009, “My Generation” 2010 y “Physical” 2021; sin olvidarnos del video clip que dirigió en 2011 “Kid Cudi: No One Believes Me”.

“No intentes destacar, intenta encajar”, le dice la madre a la entonces joven Estrella, pero Estrella de niña ya lo tenía claro y cuando se bautiza como Cruella, aún más. Ella no ha nacido para ser una más, porque desde el principio, ella no veía el mundo como los demás. Esta es la historia, verdadera o ficticia de la malvada Cruella desde sus inicios, hasta que toma el apellido De Vil; que el nuevo Disney y digo bien, Nuevo, porque Disney con este filme  da un salto de gigante en su filmografía, no deja indiferente a nadie, sorprendiéndonos muy gratamente. Dos horas y cuarto disfrutables por los cuatro costados, con guiños a filmes como: “Terminator” 1984 de James Cameron, “Cat Woman” 2004 de Pitof, “El diablo se viste de Prada” 2006 de David Frankel, “Los juegos del hambre: En llamas” 2013 de Francis Lawrence o el detalle de la aguja que nos recuerda a “La bella durmiente” 1959 de Clyde Geronimi, por poner algunos ejemplos, pero sé que tú insaciable cinéfilo, vas a descubrir muchos más. Dicho esto, comencemos por el principio, pues en el principio estaban ellas. Las malas, que tanto gustan.

Antes de que se me olvide, quién busque en este filme, una versión de la película de animación de 1961, que vaya cambiando de idea, los cinco guionistas han creado una historia excepcional, entretenida e irónica, en la cual no se han olvidado de los elementos claves de la original, pero en esta ocasión, los protagonistas no serán los dálmatas que Cruella perseguía para diseñarse un abrigo de pieles, la protagonista principal es ella, la reina, la villana quien se deberá enfrentar con la cruel, egocéntrica y despiadada baronesa von Hellman, en un gran duelo de poder, de reinas oscuras, aunque Cruella desprenda, cierta luz. ¿Quién puede dar más? Disney, siempre Disney; pues para encarnar a ambas, ha contado con dos grandes estrellas del firmamento cinematográfico, dos mujeres que con su sola presencia, llenan la pantalla, dos damas que ya cuentan con la estatuilla dorada, ellas son Emma Stone y Emma Thompson. Un duelo de titanas, de diosas que hechizan y enamoran al espectador, con la fuerza escénica sobrenatural, con la que dotan a sus personajes. A destacar también los dos grandes secundarios interpretados por Paul Walter Hauser y Joel Fry y el inolvidable y maravilloso perrito de nombre Winks, que nos roba el corazón; aunque hay que reconocer la gran labor, no solo de dirección general que nos ofrece Craig Gillespie, sino en la actoral. Cuidando al milímetro cada detalle, cada gesto, cada movimiento, en coreografías perfectas.

Toca hablar del Leitmotiv de la película, el vestuario, pues la historia gira en torno a la moda y al diseño, que corre por las venas de estas dos villanas. Ha sido creado por una de las grandes referentes del diseño de vestuario en el cine, ganadora de dos premios Óscar: “Una habitación con vistas” 1985 de James Ivory y  la más reciente “Mad Max: Furia en la Carretera” de George Miller. Estoy hablando de Jenny Beavan, atreviéndome a afirmar, que posiblemente este sea su mejor trabajo: elegancia, originalidad, vistosidad, vanguardismo y clasicismo; conjugando en perfecta armonía. 

Un vestuario que retrata épocas pasadas, principalmente los 70 en Londres, lugar donde se desarrolla la acción, en plena revolución punk rock, mirando hacia el futuro y la innovación. Sin olvidar los maravillosos completos que se utilizan para resaltar los modelos y las fiestas, que se celebran. Una gran apoteosis y homenaje al mundo de la moda. Simplemente espectacular y es que en esta película todo es así de grandilocuente, como la impresionante dirección artística de Darren Tubby y Martin Foley, los suntuosos decorados de Fiona Crombie o el esmerado montaje de Tatiana S. Riegel, envueltos en la soberbia fotografía de Nicolas Karakatsanis, fascinante, llena de luz y color, retozando con la felicidad, en contraste con esos ligeros claroscuros,  cuando el drama y el mal se asoman. ¿Se puede dar más? Pues sí, porque es imposible olvidarse de la sublime banda sonora, en la cual nos encontramos con grandes estrellas de los 60,70 y 80, a la que se suma, la parte original compuesta por Nicholas Britell.

Por todo lo dicho y por lo que no he contado, que es mucho, pero prefiero que lo descubráis y lo disfrutéis vosotros, la nueva estrella de Disney se llama… ¡Cruella! Cruella De Vil.

Mi nota es: 10

ESTRENO en ESPAÑA: 28 de Mayo en Cines y en Disney+

REPARTO: Emma Stone, Emma Thompson, Paul Walter Hauser, Joel Fry, Emily Beecham, Gianni Calchetti, Kirby Howell-Baptiste, Mark Strong y Kate Margo.

PRODUCTORA: Walt Disney Pictures// Gunn Films// Marc Platt Productions.

DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Walt Disney Studios Motion Picture Spain.

BANDA SONORA

“Call Me Cruella” de Florence+The Machine, “Bloody Well Right” de Supertramp, “Whisper, Whisper” de Bee Gees, “Five to One” de The Doors, “Feeling Good” de Nina Simone, “Livin´Thing” de Electric Light Orchestra, “Whole Lotta Love”  y “Como Together” ambas de Tina Turner, “Fire” de Ohio Players, “Stone Cold Crazy” de Queen, “Should I Stay or Should I Go” de The Clash, “I Love Paris” de Georgina Gibbs, “Love is Like a Violin” Ken Dodd, “I Wanna Be Your Dog” de John McCrea, “One Way or Another” de Blondie. Si se me olvida algún tema, mis disculpas.