Hola a todos, estéis en el punto del planeta que viváis.
El sábado el blog cumplió 5 años. Sí, el 16 de mayo de
2010 publicaba mi primera entrada. Un post que se titulaba “Los sueños están en las estrellas, atrápalos”
y como era corta, lo público de nuevo:
“Siempre he tenido la certeza de que ahí fuera existen
fuerzas que nos ayudan a conseguir nuestros: sueños, objetivos y propósitos. Y
aunque al despertarnos muchas mañanas, no tengamos ganas de hacerlo, el nuevo
día nos puede sorprender.
No
dejemos por tanto pasar el tren de nuestra vida, porque sólo pasa una vez.
Estate ojo avizor como: el águila en el espacio, el zorro en la tierra o el delfín en el mar y déjate guiar por tus ojos, la intuición y el poder de la mente.
Estate ojo avizor como: el águila en el espacio, el zorro en la tierra o el delfín en el mar y déjate guiar por tus ojos, la intuición y el poder de la mente.
Abre
tus miras y traspasa las montañas. Escucha alrededor y quédate con la esencia.
Sonríe ante la adversidad y confía en el mañana. Lo que hoy son lágrimas,
mañana serán sonrisas”
Me doy cuenta que el texto sigue tan en vigor como hace cinco años y es que
aunque muchas cosas han pasado desde aquel mes de mayo, donde tanto el blog
como yo hemos caminado y madurado entre senderos culturales, políticos y
sociales, como muy seguramente vosotros también habéis hecho, creo que el tiempo para lo verdaderamente importante está detenido en
un espacio temporal donde muchos sentimientos parece que están secuestrados por los miserables. Porque
muchos objetivos, muchos sueños y muchos propósitos es como si quisieran que no
se cumplieran, y es que los indigno que ven la vida desde el prisma del egoísmo,
los engaños y las ínfulas del egocentrismo de querer estar por encima de los
demás, sin detenerse ante el espejo de sus vidas y darse cuenta que son unos
pobres diablos, unos miserables que nunca alcanzarán la felicidad, porque sus
propósitos están destinados para otros y se niegan a reconocerlo.
Esa
rabia les carcome y como no tienen el valor de rectificar buscando su
propio destino, prefieren que los demás tampoco lo logren y amargan o intentan
amargar al resto de la humanidad desde
sus sillones, desde sus posiciones, desde ese grado que todos les hemos
otorgado y que si queremos, entre todos podemos arrojarles del sillón y desnudarles
de la investidura que les otorgamos erróneamente.
Recordad amigos lectores que nuestros sueños están en las estrellas,
pero que también los podemos bajar a la Tierra y gozar de algunos de ellos junto a los nuestros. Que
nadie ponga una red a tus ilusiones y deseos. Que nadie instale una trampa para mermar las fuerzas necesarias y así acometer tus
proyectos. Que nadie se atreva jamás a decirte lo que debes o no hacer, cuando
ellos no han cumplido con su trabajo, y han quebrado no solo su dignidad como
seres humanos, sino que pretenden hacerlo con nosotros.
Han pasado cinco años desde aquel 16 de mayo, cinco años donde muchos me
habéis ido conociendo por mis escritos y yo a algunos de vosotros por los mensajes y comentarios que me habéis dejado, además de en este blog, en las redes sociales donde
publicito las entradas.
Reseñas políticas, religiosas y sociales. Críticas culturales,
entrevistas a nuevas promesas, pensamientos surgidos en un momento determinado,
historias de certámenes y algunas propias… Siempre desde las puertas de mi corazón con la mayor
sinceridad e integridad. En cada línea he sido yo mismo y así os lo he querido
ofrecer, con mi verdad, porque vosotros, los lectores de este blog se merecen
el máximo de los respetos y admiración.
Gracias a cada uno de los que han leído alguna de las reseñas. Gracias a
quienes habéis colaborado en algunos de los proyectos ya publicados. Gracias a
quienes me habéis dispensado palabras de elogio y algunas críticas siempre
constructivas. Gracias por el respeto que habéis tenido hacia este espacio que
nació para vosotros y del cual me siento tan orgulloso pasados estos cinco
años.
Más de 170.000 visitas y prácticamente 1.000 entradas entre algunas que aún
no se han publicado. Tal vez a algunos les parezcan pocas reseñas, para mí son más que suficientes, pues está publicado lo que he deseado publicar y no con el afán de rellenar espacios y en cuanto a las visitas, no he buscado nunca un número, sino que quienes se acercaran al blog, disfrutaran de lo escrito.
Espero y deseo que podamos estar otros cinco años juntos y que
cuando se cumpla el 10º aniversario, me contéis como esos sueños que albergaban
las estrellas de vuestro espacio celeste, se han cumplido.
Un fuerte abrazo.
Javier Sedano.