El verso se hizo presente en la voz de Guillermo Arróniz
López, que ataviado a la vieja usanza de aquel Siglo de Oro español, llenó uno
de los salones del Museo Cerralbo para asistir a la presentación del poemario “De Verso en Greco”
Su última obra.
Como dice Guillermo en la contraportada del libro
“Sólo hay un motivo para este libro: la pasión. El Greco sigue
despertando las más escondidas opiniones, las más vivas emociones…” Y así
nos lo hace ver con su vestimenta, en réplica del traje del famoso Cuadro de
Doménikos Theotokópoulos “El caballero
de la mano en el pecho”. Así se
presenta, con la mano en el pecho. Así le escuchamos, con aquel castellano ya
en desuso y los versos que él mismo ha creado para seguir homenajeando a
personajes que no pueden dejar de existir en su mente, ya sea el Greco o la
familia de Los Borgia.
Para presentar su última obra no se ha rodeado de personajes de carne y hueso que hablen, alaben
y citen con palabras las maravillas que esconde el libro, se ha dejado llevar
por la imaginación y como un narrador de otros tiempos, nos relatará como el
caballero de la mano en el pecho, contactará con el Greco y tras conocer parte
de su obra y quedarse prendado con ella, le solicita ser retratado.
Una presentación original, como son todas las suyas. Una
escenografía en esta ocasión sencilla, pero no exenta de gusto y regusto del
pasado al que nos traslada. Una puesta en escena que no deja indiferente a
nadie, pero sí mudos a todos, pues durante toda la presentación no se
escuchaban, ni las respiraciones.
Para los amantes de la poesía y si os interesa conocer lo
que esconde esta magnífica obra, os podéis poner en contacto con el autor en: www.facebook.com/DeVersoEnGreco