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MEN, está escrita y dirigida por Alex
Garland “Una película tan terrorífica como desconcertante”
Hasper (Jessie Buckley) deambula
por la casa en completo silencio, se acerca a la terraza y desde el ventanal ve
como cae un hombre. Sus miradas parecen encontrarse.
Hasper llega a un pueblo en coche y aparca
frente a un caserón que ha alquilado a Geoffrey (Rory Kinnear) por un
periodo de dos semanas, con la intención de relajarse e intentar olvidar el
impacto sufrido a causa del suicidio de su marido, que es el hombre que vemos
caer en el prólogo. Pero Hasper no va a tener mucha suerte, ya que entre todos
los destinos a elegir, ha dado con el peor, pues en él experimentará un
auténtico infierno del que surgirán todos sus demonios.
El escritor, guionista, productor y
director, Alex Garland, estudió en la Universidad de Mánchester
diplomándose en 1992. Sus dos primeras novelas “The Beach” y “The Tesseract”
fueron llevadas al cine. Trabajó como guionista para cine y televisión y debutó
con el largometraje “Ex Machina” 2014 para continuar con “Aniquilación” 2018 y
este año 2022 ofrecernos “Men”. El próximo año tiene previsto estrenar “Civil
War”. También ha dirigido algunos episodios de la mini serie “Dews” 2020.
La productora A24, en su afán de
sorprender a los espectadores con films poco convencionales, sea cual sea la
temática a tratar, como se puede ver en su amplio catálogo, trae a nuestras
pantallas una nueva obra de lo fantástico y del terror, películas en las que
busca impresionar con las historias más retorcidas, viscerales, surrealistas,
gore e impactantes, que impiden pestañear y moverte de la butaca, hasta llegar
al final. Los giros inesperados, son una de sus bazas fuertes.
A24 entre los filmes más recientes, en el
género de terror, cuenta con: “Lo que esconde Silver Lake” 2018 de David Robert
Mitchell, “Hereditary” 2018 y “Midsommar” 2019 ambas de Ari Aster,
“El faro” 2019 de Robert Eggers, “Saint Maud” de Rose Glass y “Lamb”
de Valdimar Jóhannsson, ambas en 2021; la reciente “X” 2022 de Ti West y ahora
nos sumerge en otro título del autor de “Ex Machina” 2015 de Alex Garland. Me
atrevería a afirmar que “Men”, se convertirá en el título más brutal,
demoledor, desconcertante, inexplicable y… Hasta la fecha estrenado.
Empecemos por las magníficas
interpretaciones de la pareja protagonista. Jessie Buckley, encarnando a esa mujer traumatizada a la cual el
maltrato y el odio parecen perseguirla como una terrible sombra, y cuando hablo
de maltrato, me refiero tanto al psicológico como al físico, que nunca sabemos
cuál de los dos es peor. Un comportamiento violento, que desgraciadamente aún
perdura en nuestra sociedad. Rory
Kinnear, camaleónico en esta historia, pues le veremos interpretar al menos
a cuatro personajes y no puedo corroborar si son más, pues el filme nos ofrece
un magnífico trabajo de caracterización, con el que sin duda nos lleva a la
confusión. Esos múltiples personajes, bien podrían representar al machismo en
toda la amplia extensión de la palabra y los diferentes aspectos bajo los que
se esconde. Ambos están brillantes, a la vez que componen una feroz crítica a
la violencia que se ejerce sobre las mujeres, los chantajes emocionales, el
acoso, la culpa, la manipulación y en definitiva la toxicidad más depravada que
puede llevar a cabo el hombre contra la mujer.
El filme, al que podemos dividir en dos
partes, una primera en la cual el terror resulta más accesible a nuestras mentes,
en medio de esos parajes rurales que tantas veces han servido de
escenario al género de terror como en la reciente y ya mencionada “X”; entre
pueblos prácticamente despoblados, como sucede aquí, en los cuales los pocos
habitantes, que parecen llevar la silueta del mal pegada a ellos, se reparten
entre el bar, la iglesia o las extrañas visitas, no deseadas, a la casona,
jugando con esa sucesión de imágenes perturbadoras frente y alrededor de la
vivienda, que como es lógico, llevarán de cabeza a la protagonista. No
faltarán, para suavizar la tensión, los momentos bucólicos mostrando la belleza
de la naturaleza viva que les rodea y los simbólicos, como la caída de las
manzanas del árbol. La segunda parte, más oscura, fantástica, incómoda, irreal
e incomprensible en gran medida, sobre todo en el último tramo. Hay instantes
que me dejaron, creo que a todos por los comentarios al salir, sin saber muy
bien lo que nos había querido mostrar, aunque ya sentado frente al
ordenador y tras intentar analizar lo visto, bien podría estar personificando
los distintos comportamientos y las múltiples caras que el hombre puede revelar,
además de la facilidad con la que es capaz de mutar; pero eso os lo dejo a
vosotros, a vosotros amantes del terror y la ficción con ese punto insólito y
que al igual que a mí, nos gusta exprimir de vez en cuando en nuestros
cerebros. No dudo por un segundo en aseguraros que ésta es una de esas
ocasiones, pues el filme tiene claro que no desea dejar indiferente y tranquilo
a nadie y que bajo tantas capas de terror, también se vislumbra ese humor
negro, que libera tensiones.
Finalizo, haciendo mención, además
de las dos magníficas interpretaciones de Buckley y Kinnear, la correcta
dirección de Alex Garland, aunque hay algunos saltos de
raccord de principiante, como ejemplo: la escena en la que Hasper está por
entrar o no en el túnel, jugando con el eco. Destaco también la fotografía
de Rob Hardy, quien aunque podría haber arriesgado un poco más, lo
que desean mostrar, se ve con nitidez y eso se agradece y por supuesto los
efectos visuales, algunos de ellos muy impactantes.
Mi nota es: 7,5
ESTRENO EN ESPAÑA: 22 de julio.
REPARTO: Jessie Buckley, Rory Kinnear,
Paapa Essiedu, Gayle Rankin, Zak Rothera-Oxley y Sonoya Mizuno.
PRODUCTORA: A24
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Vértice Cine.
