La coproducción entre
Francia y Bélgica, #AQUÍ ESTOY, está
dirigida por Eric Lartigau
compartiendo guion con Thomas Bidegain.
Stéphane Lucas (Alain Chabat) es un chef de prestigio, dueño
de su propio restaurante, separado y con dos hijos: David (Ilian Bergala) y Ludo (Jules
Sagot). En las instalaciones del restaurante celebrarán la boda de Ludo, donde descubrirá algunas cosas que ignora de la familia. Stéphane tiene un secreto, una relación por Instagram con
una joven pintora coreana, Soo (Doona Bae).
Las conversaciones que mantiene con Soo van desde la cotidianidad del día a
día, pasando por la pintura o la naturaleza. Sobre esta última, Soo le envía
fotos de los cerezos en flor, en todo su esplendor, tal y como se encuentran en
ese momento. Sin pensárselo dos veces Stéphane decide viajar a Seúl para
conocer a Soo y se lo comunica justo en el instante en que va a despegar el
avión. Cuando llega al aeropuerto de Seúl ella no está, pero él decide
esperarla.
El filme tiene dos
partes diferenciadas, por un lado, más de la mitad se desarrolla en el interior del aeropuerto, recordándonos a la
“Terminal” 2004 de Steven Spielberg con Tom Hanks, con la diferencia de que
el personaje de Hanks no podía salir y el de Alain Chabat
sí, pero está convencido de que Soo llegará en cualquier momento y allí se pasará
los días esperándola ; y la segunda parte nos llevará por las calles de Seúl, en busca de
esa chica misteriosa y su encuentro con ella.
Sobre Eric
Lartigau. A través de la historia del cine, hemos conocido
las diferentes maneras de llegar a ejercer un trabajo dentro del Séptimo Arte y
muchas de ellas, provocadas al estar en el momento justo y en el lugar
indicado, así podríamos decir que se formó Eric, pues antes de relacionarse con
el cine, trabajaba en una casa de subastas. Un día fue contratado como chófer
por el director Pascal Thomas y eso le abrió la posibilidad a descubrir otro mundo.
Trabajaría como asistente de directores como Diane Kurys, Edouard Molinaro o
Emir Kusturica. También trabajo en el mundo de la publicidad, en Canal+ donde
entre otras funciones dirigió secuencias del programa “Guignols”; como
productor de las series televisiva “H” o “La Famille Guérin” en algunos
episodios. Es actor, no solo en algunas de sus películas sino con otros directores
como Katia Lewkowicz, en su filme “Pourquoi tu Pleures? 2011. En la dirección
debutó con “¿Mais qui a tué Pamela Rose?” 2003, continuando con: “Un Ticket
pour l´espace” 2006, “Prête-moi ta main” 2006, “L´homme qui voulait vivre sa
vie” 2010, “Los infieles” 2012, “La familia Bélier” 2014 y este año nos
presenta “#Aquí estoy” 2019
Una obra sencilla en su
argumento, encerrando una clara crítica a las redes sociales y a las verdades o
mentiras que se esconden tras un nombre o un nick. Todos en mayor o menor
medida, conocemos de casos de personas que se han dejado embaucar bajo el
escudo del anonimato, de muy diversas formas y una de ellas, sin la menor duda,
es el amor. Los flechazos que surgen cuando una persona determinada está
pasando por un instante de cambios y encuentra una salida en alguien a quien no
conoce, y corre en su búsqueda. Pero una cosa es ir a la ciudad de al lado y
otra muy diferente el viajar hasta Seul, donde por lo visto, la realidad supera
a la ficción, pues en esos aeropuertos es más frecuente de lo que uno pueda
imaginar, que algo así suceda. El número de repatriaciones de personas, que les ha ocurrido lo mismo que
a Stéphane Lucas, es muy elevado. Una auténtica locura, que filmada resulta entre estresante
por las situaciones emocionales que tiene que vivir el personaje y divertida, desde
ese punto de vista surrealista.
Una fábula que deja un
buen sabor de boca, pues aunque
Stéphane, está completamente olvidado y “perdido” en un país del cual no
conoce ni el idioma, no le vemos sufrir, sino sacar de la adversidad, las
mejores situaciones, hasta el punto de ayudar,
más que pedir ayuda. De escuchar, más que solicitar ser escuchado. De
compartir lo que tiene, sin buscar nada a cambio. No hay drama, hay un exceso de naturalidad incomprendida.
Eric y Thomas han
creado un guion elemental con un personaje lleno de matices, que va atrapando al
espectador por su singularidad. Un gran chef amante de la cocina, a la que
parece prestar la atención mínima. Tiene dos hijos y una ex mujer, a los que
sin la menor duda quiere, pero cuando le hablan no les escucha, incluso
tratándose de temas serios. Vaga por las estancias del restaurante y sus alrededores
sumido en su nuevo entretenimiento: Instagram y lo que cree que ha descubierto
en dicha red social, la ilusión por vivir un nuevo amor.
Lo que más llama la atención de esta película, es que la
novatada que paga el personaje, no se convierte en drama sino en divertimento,
en naturalidad para él y desconcierto para el público. La chispa de la esperanza flota en el ambiente, pues
en su corazón aun se refugia la ternura de una inocencia que no ha perdido con
su madurez. Un Peter Pan de carne y hueso,
enamorado de la vida por la que se deja llevar, de forma impulsiva. Un soñador
romántico, maravillosamente interpretado por Alain Chabat, que dota al personaje
de una gran expresividad y naturalidad. Una deliciosa comedia magníficamente
fotografiada por Laurent Tangy, entre
los elegantes encuadres de los espacios del aeropuerto y los contrastes entre
la ciudad y el campo.
Mi nota es: 7,5
ESTRENO en ESPAÑA: 1 de Julio (Plataformas digitales)
REPARTO: Alain
Chabat, Doona bae, Vincent Nemeth y John
Sehil
PRODUCTORA:
Belga Productions// France 2 Cinéma// Gaumont Production// Keystone Films//
Rectangle Productions
DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Vértigo Films España.