Infierno
bajo el agua cuenta con guion de Michael Rasmussen y Shawn Rasmussen dirigida por Alexandre Aja.
Haley Keller (Kaya Scodelario) es una joven nadadora, cuya fuerza, dedicación y energía, se las debe a su padre, Dave Keller (Barry Pepper) quien siempre ha estado pendiente de ella, desde muy niña, enseñándole a creer en sí misma. Un día, al salir de sus clases de natación, comprueba que el tiempo ha cambiado y a través de la radio de su furgoneta, escucha que hay un huracán sobre Florida.
Al llegar a casa se percata de que su padre no está y llama a su hermana Beth Keller (Morfydd Clark), quien le comenta que
pensaba ir a la casa que tienen en venta. Haley se dirige en busca de su padre,
pasando por una propiedad donde se crían caimanes.
Como es tradicional en
estas fechas veraniegas, las películas que se acercan a nuestras pantallas o
bien están relacionadas con las vacaciones, las comedias de
situación, aventuras o la de animales depredadores, como es el caso que nos ocupa.
El francés, Alexandre Aja, es director, guionista y
productor de cine. Comenzó delante de
las cámaras en películas de su padre, el actor y director Alexandre Arcady: “La
Expiación” 1982 y “Le Gran Carnaval” 1983. Con tan solo 18 años, dirigió su
primer cortometraje “Over The Rainbow” 1997 y en 1999, su ópera prima en el
largometraje “Furia”, al que le siguieron “Break Of Dawn” 2002 y “Alta tensión”
2003, un gran éxito internacional que obtuvo los premios de Mejor director y
mejor actriz, Cécile de France, en el Festival de Cine Fantástico de Sitges.
Wes Craven, que había visto la película, le pidió hacer un remake de su filme
de 1977 “La colinas tienen ojos” 2006, continuando con otros títulos de terror
como “Reflejos” 2008, “Piraña 3D” 2010,
“Cuernos” 2013 y “La resurrección de Louis Drax” 2016. En 2017 realiza el
cortometraje “Campfire Creepers: The Skull of Sam” y llegamos al largometraje
que nos ocupa, “Infierno bajo el agua” una película veraniega con caimanes
muy hambrientos. Para finalizar os comentaré que es miembro del llamado “Splat
Pack” un termino con el que denominó el historiador Alan Jones, en la revista
Total Film, a la nueva ola de directores de terror con alta violencia.
El cine siempre se ha
nutrido de nuestras queridas bestias y cuando no eran lo suficientemente
salvajes, se les aumentaba de tamaño, ejemplos King King y Godzilla y
solucionado. Lo que está claro, que al llegar el verano, desde que al
genio de Steven Spielberg se le ocurrió soltar a un Tiburón en aquel año 1975,
provocando que mucha gente mojara poco
más que los pies al entrar en el agua, es tradición el ser visitados por más tiburones, algunos cayendo del cielo o de tamaño que no
podrían ni moverse bajo el agua, ballenas, pulpos, pirañas, anacondas, arañas,
hormiga gigantes y todo lo que a los guionistas y directores se le ha ocurrido. Entre
ese recital de fieras terrestres y acuáticas, tenemos a los cocodrilos
o caimanes, que ambos hacen lo mismo, comerse a la gente, cuando tienen hambre
y los que nos trae Alexandre, tiene mucha hambre, pero demasiada, os lo
aseguro.
Es evidente, que quienes estamos ya curtidos en este tipo de filmes, exigimos más que los que
ven estas obras por primera vez y tengo que reconocer, que salvo en algún instante, la película me mantuvo entretenido e incluso expectante ante cual
sería el próximo movimiento de nuestros personajes. Ese padre y esa hija que
son más duros que la piel del animal en cuestión. Alexandre no les deja
respirar ni un segundo, proporcionando al filme, de un gran ritmo.
Las interpretaciones de
los dos actores principales, convencen y hasta te dan ganas de ir a buscarles,
porque los pobres no saben ya cómo salir de esa casa infernal, que parece
aumentar de tamaño y crecer en número de habitaciones, a media que se eleva la
tensión. No hay hueco de la casa que el director de fotografía Maxime Alexandre, deje sin filmar con una cámara en constante movimiento, desde el sótano, a las
habitaciones, pasando por la cocina, el cuarto de baño, el jardín y el tejado,
sin olvidar los exteriores, cuando lo requieren. Un ejercicio de fotografía muy
importante, debido al medio al que se tiene que enfrentar: el agua. Agua y viento por
todos lados. La sensación de angustia, está
servida. Destacar el impecable sonido, imprescindible en este género de
películas, a cargo de Novica Jankov, Joe
Barnett y Paul Hackner, cada
ruido por insignificante que pueda parecer, se escucha de forma nítida, al igual que las conversaciones, y por supuesto la banda sonora, transmitiendo ansiedad y suspense, en la
batuta de Max Aruj y Steffen Thum.
Por todo lo dicho,
estamos ante una buena película veraniega, para estar fresquitos en la sala de
cine, con palomitas y refresco en abundancia. Mantiene la tensión, aunque sea previsible. Se disfruta, aunque creamos haber visto películas similares, porque Alexandre Aja, ha conseguido darle un enfoque más
moderno, más dinámico y sobre todo, más emocional, en todos los sentidos.
Mi nota es: 7,5
ESTRENO en ESPAÑA: 23
de Agosto
REPARTO: Kaya Scodelario, Anson Boon, Barry Pepper, Ross Anderson, George Somner, Ami Metcalf, Morfydd Clark, Annamaria Serda y Colin McFarlane
PRODUCTORA: Ghost House Pictures// Paramount Pictures
DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Paramount Pictures Spain