Sieranevada
con guion y dirección de Cristi Puiu, nos ofrece la visión de una familia no exenta
de problemas sociales y donde la política, está muy presente.
Lary (Mimi Branescu) tiene 40 años, es médico y está invitado a pasar el
sábado, junto al resto de la familia, en la casa de sus padres. Una reunión en
memoria de su padre fallecido hace 40 días y con ello brindarle el tributo
correspondiente. Lo que aparentemente debería ser un encuentro familiar sin más, se
complicará, más aun cuando Lary descubra el secreto que ha ocultado a la
familia.
Cristi
Puiu (Ponts de Sarajevo) nos invita a entrar por
la puerta de la casa familiar para ser un invitado de excepción, eso sí, sin
voz pero con total libertad para observar cada uno de los movimientos y ser oyente de las
palabras que allí vayan sucediendo a lo largo de unas horas, de un sábado
especial y rodada prácticamente en tiempo real.
Sieranevada cabalga a lomos de la
política y la sociedad. Por un lado se
habla de los tiempos del comunismo en el país, de los atentados más recientes como el perpetrado contra las torres
gemelas el 11S en EE.UU, el sucedido en Madrid el 11M o contra el semanario
satírico francés Charlie Hebdo, y poniendo en duda lo que se nos ha contado con
respecto a ellos. Y de otro lado, los diversos temas sociales y familiares, que
convierten a esta cinta en muchas pequeñas historias dentro de una misma, con
lecturas diversas y alguna excesiva. Cada personaje carga con su propia mochila
y cada pariente intentará involucrarse lo mínimo posible, en los problemas de
los demás.
Puiu dota a la historia que nos desea
relatar de un humor negro, punzante e
incluso hiriente, con diálogos envueltos en verdades que duelen. Una obra que
huele a personal entre el presente y sobre todo el miedo a un pasado, que se
desea mantener olvidado por parte de algunos miembros de la familia. En ocasiones,
la elección de evocar el pasado, no es lo más conveniente.
Un filme rodado en largos planos secuencia,
tomando como centro o eje, el pasillo que nos adentrará en tres de los espacios
principales: La habitación de la madre, la cocina y el salón en el cual las
palabras se vuelven afiladas dagas para algunos e indiferentes para otros, bajo
la fotografía de Barbu Balasoiu. Una
fotografía austera con una iluminación prácticamente natural, confiriendo
realismo y credibilidad a cada escena por vivir y escuchar.
Cada uno de los personajes tiene algo
que contarnos, algo que defender y algo por lo que ser amonestado, bajo un soberbio
elenco coral de actores sobre los que destacan además de Mimi como Lary, Dana Dogaru en el personaje de Madame
Mirica y Sorin Medeleni,
interpretando a Tony.
Recomendable para amantes del cine social
y político.
Mi nota es: 7,5
ESTRENO en ESPAÑA: 21de JULIO
REPARTO: Mimi Branescu, Bogdan
Dumitrache, Catalina Moga, Dana Dogaru, Petra Kurtela, Sorin Medeleni, Tatiana
Lekel, Marian Ralea, Simona Ghita, Andi Vasluianu, Judith State, Lulian Puiu,
Silvia Nastase, Rolando Matsangos, Loana Craciunescu.
PRODUCTORA: ARTE France Cinéma/
Alcatraz Films/ Mandragora; Rumanía-Francia-Bosnia y
Herzegovina-Croacia-Macedonia.
DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: Golem
Distribución.