John Wick 4 está dirigida por Chad Stahelski con guion de Michael Finch y Shay Hatten. “¿Un hombre debe de estar impecable cuando llega la hora de casarse o de ser enterrado”
John Wick (Keanu Reeves) se ha mantenido oculto, bajo la protección de Bowery King (Laurence Fishburne) quien ofreciéndole un traje le invita a salir de su encierro y luchar por su libertad. Por otra parte nos enteraremos que la Alta Mesa da carta blanca al Marqués de Gramont (Bill Skarsgård) para matar a John Wick. Para el Marqués una de sus prioridades además de Wick es desmantelar los hoteles Continental que se encuentran repartidos por el mundo. Cuando Winston (Ian McShane) se ve privado de la gerencia del Continental de Nueva York y presencia la muerte del conserje y gran amigo Charon (Lance Reddick), propone a Wick que rete en un duelo al Marqués para recuperar su honor, privilegios y libertad.
El Marqués pondrá un alto precio a su cabeza, para que Wick no consiga su objetivo. John no estará solo en esta empresa, pues se verá apoyado por Winston y Bowery King entrando en el juego Caine (Donnie Yen) un asesino ciego y amigo de Wick, junto a otros que prefiero vayáis descubriendo vosotros.
Chad Stahelski, es un importante especialista de actores, entre otros dobló a su amigo Brandon Lee en “El cuervo” 1994 de Alex Proyas, tras su muerte, pudiendo finalizar el proyecto y de Keanu Reeves en la saga “Matrix”. Fundó la Productora 87Eleven y más tarde la Compañía Smashcut con otros compañeros. En 2014 junto a David Leitch dirige “John Wick: otro día para matar” 2014, película que en nuestro país no se estrenó en salas comerciales, pasando directamente a televisión. Tres años más tarde, en 2017 se hizo cargo, en solitario, de la continuación: John Wick: Pacto de Sangre, obteniendo un gran éxito de taquilla, lo que le animó a continuar con la saga con John Wick: Capítulo 3 – Parabellim 2019 y ahora ofrecernos “John Wick: Capítulo 4” 2023. El próximo año estrenará “Ghost of Tsushima” 2024.
Llega a los cines el cuarto capítulo de una franquicia que en cada una de sus entregas se ha ido superando así misma en espectáculo, emoción y acción, en puesta en escena, coreografías y número de disparos y muertos por minuto. La primera de sus entregas llegó en el año 2014 “John Wick (Otro día para matar)” dirigida por Chad Stahelski con guion de Dereck Kolstad y protagonizada por un impresionante Keanu Reeves, quien ha seguido dando leña con el estilo y la clase que le caracteriza, terminado siempre mal parado. Sí, aquella primera entrega convenció a crítica y público, y las demás nos han dejado siempre con ganas de más y más. Aún recuerdo cuando asistí al pase de John Wick 3 Parabellum que tras finalizar me levanté y comenté, quiero ver la cuarta entrega ya, no nos podéis dejar así un año entero, el problema es que hemos tenido que esperar cuatro, en gran parte por esa maldita pandemia que hemos sufrido, pero ya está aquí y – pausa de suspense – preparaos que lo vais a flipar en colores.
El nuevo capítulo de John Wick, tiene más de todo. Un guion más sólido que nos llevará a conocer en profundidad a Wick y todo el universo que rodea a la Alta Mesa. Coreografías más largas y originales en peleas sin cuartel. Más personajes y sobre ellos nada os desvelaré, para no descubrir acontecimientos y más ciudades para visitar y en donde desarrollar la acción. Entre esas ciudades está París que nos ofrece un buen número de escenarios (La emblemática Torre Eiffel, los jardines de Luxemburgo, el Museo del Louvre en el que contemplaremos algunos cuadros no solo famosos sino con cierto simbolismo para la trama como “La libertad guiando al pueblo” de Eugène Delacroix, la iglesia de Saint-Eustache o El Arco del Triunfo con una espectacular escena entre coches, motos y todo lo que se cruza por delante; por poner algunos ejemplos). La ciudad portuaria de Osaka, dándonos la bienvenida a otro de los famosos hoteles Continental, en el cual se llevarán a cabo, entre el lujo y la exquisita ambientación y decoración al más puro estilo japonés, escenas de alto voltaje con ese sello tan característico de la franquicia y que nos trae recuerdos de entregas anteriores. El desierto de Jordania en ese inicio con persecución a caballo y una línea de meta, un tanto peculiar. Ese tour turístico tendrá paradas en Alemania, España y por supuesto la gran ciudad de Nueva York, donde el bueno de Winston, se sentirá contrariado y para terminar, también es más larga de metraje. Ya veis, más de todo para el gozo de los fans a la franquicia.
John Wick 4, ofrece lo que el fan espera, una gran orgía de tiros, golpes, muertes, coreografías algunas casi imposibles de concebir, intrigas y por supuesto las artes marciales, que no pueden faltar, pues no cabe duda que este filme es un caramelo para el mercado asiático, como queda claro en sus filmaciones en la mencionada Osaka y también en Tokio.
Una cuarta entrega que aunque nos deslumbra, no sorprende tanto como las anteriores, pues sus predecesoras dejaron el listón muy alto, demasiado diría yo, preguntándonos siempre si podrían ser superadas y lo lograban, pero ahora ya es complicado, por lo que creo que han tomado la decisión más acertada, cerrar una etapa, con claros homenajes, véase por ejemplo la imagen del lapicero clavado en una mano, las piruetas con el coche sin puerta o las constantes alusiones en los diálogos y a la vez, abre una nueva puerta o al menos eso parece, pues con las franquicias nunca uno está seguro por donde van a ir los tiros. Por cierto, hay escena post-crédito.
En el equipo técnico nos encontramos con algunos de los habituales, como Tyler Bates y Joel J. Richard con la partitura de una nueva y trepidante banda sonora y por tercera vez consecutiva el director de fotografía Dan Lautsen atrapándonos entre su característico uso del color e iluminación, como otro de los sellos indiscutibles de la franquicia en medio de paneles, biombos y otros elementos. Como novedad destacar que el montaje corre a cargo de Nathan Orloff reemplazando a Evan Schiff y es que los montadores de estas películas, tienen que terminar exhaustos.
Toca hablar de él, John Wick o debería decir Keanu Reeves, un actor que no deja indiferente a nadie, un actor que encarna con pasión a un personaje que buscando la redención y el descanso debe hacerlo luchando sin tregua, alentando al espectador a que lo siga en ese peregrinaje a través de otra de sus aventuras llevadas al límite, aunque tantos desafíos con la Alta Mesa, le empiezan a pasar factura. En cuanto al resto del elenco actoral, cumplen sobradamente con sus personajes, destacando a ese malo malísimo interpretado por Bill Skarsgård y los habituales Ian McShane como Winston y Laurence Fishburne como el gran Bowery King. He dejado para el final, a un actor que nos ha abandonado recientemente, Lance Reddick, como el inolvidable conserje Charon. Estoy convencido que San Pedro le hará un hueco en la puerta, para junto a él, cuidar de quien entra, como lo hacía en el Hotel Continental.
Mi nota es: 8,5
ESTRENO EN ESPAÑA: 24 de marzo.
REPARTO: Keanu Reeves, Rina Sawayama, Bill Skarsgård, Donnie Yen, Laurence Fishburne, Ian McShane, Natalia Tena, Shamier Anderson, Marko Zaror, Scott Adkins, Lance Reddck y Hiroyuki Sanada.
PRODUCTORA: Lionsgate// Thunder Road Pictures// Summit Entertainment.
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Diamond Films España.