Unplanned cuenta con dirección
y guion de Chuck Konzelman y Cary Solomon.
Abby Johnson (Ashley Bratcher) vive feliz con su
marido e hija pequeña. Trabaja en la clínica Planned Parenthood. Un día es
solicitada para ayudar a un aborto y a través de la pantalla del ecógrafo
experimenta como un feto de algo más de tres meses, es expulsado del vientre de
una joven. Esta experiencia la marcará profundamente. La historia nos llevará a su vida 8 años atrás.
Abby tuvo dos abortos,
uno como estudiante y otro con su primer marido, al quedar embarazada mientras
tramitaba el divorcio, tras descubrir que era infiel. La familia de Abby no
está conforme con el trabajo que tiene en la clínica, al igual que su nuevo marido, pero
Abby cree que es un buen trabajo en el que puede ayudar y además ascender.
Enfrentarse a esta
película es complicado y más si se es hombre. Sí, porque estoy seguro de que
verla con los ojos, la mente y el corazón de una mujer, es muy diferente. Voy a
intentar ser lo más parcial posible, aunque quienes me conocéis sabéis que amo
la vida por encima de todo y matizo: La Vida. Así que esta reseña la realizaré
desde el lado emocional y cinematográfico por igual.
El guion y la
dirección de Chuck y Cary, resultan provocativos y agresivos a partes iguales
logrando, desde las primeras imágenes, su objetivo principal: intentar
concienciar a la ciudadanía en general de que el aborto es el asesinato de un
ser indefenso, que se está gestando en el vientre de una mujer. No tienen en
cuenta la opinión de la comunidad científica de los países desarrollados, con
lo cual no dan pie al debate, pues en todo momento se omiten otras opiniones
relevantes, algo ilógico en un tema tan sangrante como el que exponen a través de imágenes
impactantes y diálogos sentenciadores frente a la sociedad, desde
prácticamente el primer fotograma.
La película cuenta con
unas correctas interpretaciones, para representar esta historia real, que
sucedió en 2013 y que Abby vivió en sus propias carnes pasando de ser la
directora del centro de planificación, a convertirse en una activista pro-vida.
No me voy a cuestionar si su vida fue realmente así o está maquillada; pues realmente la narración de la historia se ve marcada por la demoledora
fotografía, en la mirada de Drew Marw.
Una fotografía excesivamente explícita e intencionada, buscando remover no solo
las conciencias, sino también los estómagos, sin ningún pudor y con ello
provocar, un absoluto desagrado y rechazo, hasta tal punto que te sacan de la
historia. El momento del aborto en el baño, como manipulan un supuesto feto de
tres meses o la hemorragia tras uno de los abortos, resultan bastante repulsivos, algo que considero innecesario, pues el
tema ya es suficientemente duro, como para ir más allá, más cuando las mujeres, las auténticas protagonistas, las dadoras de vida y quienes deberían tener voz propia, en la historia; pasan ante la pantalla como meros objetos, como personajes secundarios, sin mostrarnos el motivo real que las ha llevado a tal decisión, dejando en el aire demasiadas preguntas sin contestar, pues ni siquiera se cuestionan si existe o no peligro para la futura madre, por poner un ejemplo, cuando la madre, no lo olvidemos, ya es un ser vivo y la única dueña de su cuerpo.
Por otra parte, el
estar poniendo el nombre de Dios, constantemente en boca de los personajes, me
resulta un tanto ofensivo. Soy creyente y creo en un Dios universal, que no pertenece a nadie
y lo que me parece repulsivo es que determinadas personas, organismos o entidades, se parapeten bajo la figura de Dios, cuando no pueden justificar algunos actos o pensamientos. Quiero
recordar que Dios nos creó y nos dio libertad de acción y pensamiento. Lo que
no me vale es escuchar, entre otras muchas frases, tirando balones fuera para intentar justificar lo injustificable: “Voy a rezar para saber si
debo aceptar el puesto. Si Dios no quiere, no me lo darán” Dios jamás
intervendría en tal decisión, pues debemos recordar que Dios nos dejó a nuestro
libre albedrío, como reza en la Biblia. Dios nos puede aconsejar, pero nunca
obligar.
Como dije al
principio, enfrentarse a esta película es complicado, porque desgraciadamente
solo está desarrollada desde un punto de vista, girando sobre sí mismo. Estoy
convencido de que esta reseña no será del agrado de algunas personas, pero ante
todo, cuando escribo algo, intento ser honesto conmigo mismo y la manipulación,
es algo que siempre he detestado.
ESTRENO en ESPAÑA: 3 de
Julio
REPARTO: Ashley
Bratcher, Brooks Ryan, Robia LaMorte, Jared Lotz, Emma Elle Roberts, Robin
DeMarco, Robert Thomason, Tina Toner, Sarah Hernandez, Maura Corsini, Lezl
Gonzales, Kaiser Johnson, Andee Grace
Burton, Alexander Kane, Stacey Bradshaw, Connor Scott Frank, Fabiano Altamura,
Todd Terry, Sheila Cavalette, Bryan Whorton, Gina Scoles, Bailey Beede y Nellie
Sciutto.
PRODUCTORA: Pure Flix
Entertainment
DISTRIBUIDORA en ESPAÑA: European Dreams Factory