El documental “El amigo de todos” está dirigida por José Antonio Quirós compartiendo guion
con Elena Giménez Blaya. “La vida es
la continuación de la guerra, pero con otras armas”
“En el confinamiento
comenzaron las incursiones en el baúl de los recuerdos, sobraba tiempo para
detenerse en bondades y desgracias de familiares conocidos y hasta
desconocidos. El que para todos era Hauke el alemán, para mí era el extranjero”
Así comienza el documental de José Antonio Quirós, entre imágenes de archivo
del pasado y del presente.
El guionista y
director, José Antonio Quirós, se
licenció en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense y
Diplomado en Historia del Cine en la Universidad de Valladolid. Trabajo en
películas de Summers como meritorio y en la Filmoteca Española recuperando
material fílmico inédito de la historia del cine español. En 1991 crea su
propia productora “El Nacedón Films” y comenzó en la dirección con los cortometrajes
“Solo quiero disfrutar contigo” 1990, “Comamos y bebamos todos de Él” 1992,
“Que me hagan lo que quieran” 1994 y “Chasco” 1995. En el largometraje debutó
con el documental “Solas en la tierra” 1997. Continuó con el largometraje de
ficción “Pídele cuentas al rey” 1999, “Cenizas del cielo” 2008, “Todo el tiempo
del mundo” 2015 y “Los desorientados” 2018. Entre otros documentales
encontramos “Gran Casal, me como el mundo”
2004, “Objetivo Braila” 2010, “Desde Rusia con dolor” 2011, “Despoblados”
2012 y “Lámpara Oscura” 2020; para televisión ha dirigido “Aquí El Paraíso”
2013, “Aquí Mi Paraíso” 2014 y “Aquí SIN Paraíso” 2017.
A la vez que visionaba
este documental, en mi mente surgían algunas preguntas, por una parte sobre lo
que la obra me estaba ofreciendo y de otra en relación a las vidas reales de
las personas que nos encontramos en el día a día, pues cuando se vive en una
pequeña ciudad, todos o casi todos se conocen o creen conocerse, pero en las
grandes ciudades, es mucho más difícil. “El amigo de todos”, es un documental
sobre uno de esos “vecinos”, de esas personas anónimas que un día llega a la
ciudad sobre su motocicleta y cuyo
comportamiento resulta ejemplar pero… en su interior guarda un secreto
demasiado doloroso para compartir y más, el tener que asumirlo.
Ese recién llegado fue
Hauke Pattist, un nazi de nacionalidad holandesa, que formó parte de las Waffen
SS. Tras la II Guerra Mundial, muchos fueron los nazis que huyeron y entre
ellos Hauke, quien tomó como escondite España, en los años 50, concretamente en
Oviedo. En Asturias, se sintió protegido por el régimen franquista y montó su
propia academia de idiomas, a la vez que trabajaba como traductor jurado para
el Gobierno. Un personaje que falleció
en 2001 sin pagar por sus crímenes de guerra, siendo uno de los más buscados
por el Gobierno holandés y los cazanazis. Entre sus delitos contaba con haber
deportado a miles de judíos y de miembros de la resistencia holandesa a Auschwitz.
La obra se apoya en los
relatos de quienes le conocieron: Peter Besas (Escritor), José Ramón Patterson
(Periodista), Lorenzo Cordero (Periodista), Alberto Menéndez (Periodista),
Carlos Fuente (Periodista), Enrique Pavón (Ex Inspector jefe de policía),
Albert Metselaar (Investigador), Simon Wiesenthal (Investigador y cazanazis),
Javier Cuartas (Periodista), Tácito Suárez (Doctor), Denis Soria (Guía Oficial
“Oviedo Oculto”); la participación de algunos alumnos que tuvo en la academia y
cuyos nombres no se mencionan y por supuesto, las intervenciones del propio Auske
B. Pattist, entre ellas, se nos ofrece un fragmento de una entrevista realizada
en 1994 o la que nos brindó José María Iñigo en el programa TV2 Estudio
Abierto. La primera pregunta de Iñigo fue directa “¿De qué se le acusa?” a lo
que respondió “De traición, colaboración y malos tratos”.
Las imágenes se van
deteniendo en determinados escenarios reales, como el Parque de San Francisco
(Oviedo), lugar en el que encontramos una escultura con una estrella de David
sobre piedra, el campo de tránsito de Westerbork, el Nationaal Archief en Den
Haag Centraal en el que el investigador y traductor, Jon Veen, realizó una
importante investigación sobre el personaje. Las visitas guiadas por “El Madrid
de los espías”, afirmándose que Madrid fue la capital del espionaje durante la
II Guerra Mundial y por el “Oviedo oculto”. Del año 1944 nos ofrece el
documento rodado en Hollandscheveld (Países Bajos), pues en medio de la guerra,
una unidad de las SS holandesa se instaló en dicho pueblo, sembrando el terror.
La película cuenta con
la fotografía de Josep F. Marín y la música de Alberto García y Ana Vázquez
Silva. Un documental que Quirós dirige con habilidad y que recomiendo, pues
recordar algunos pasajes de la historia nunca está de más.
“Holanda es el único país del mundo donde me
recibían tirándome flores…pero con las macetas y todo. (Auske B. Pattist)
DISTRIBUIDORA EN
ESPAÑA: Surtsey Films.