IRATI,
está escrita y dirigida por Paul Urkijo
Alijo. “Todo lo que tiene nombre, existe”
Nos encontramos en el
año 778 D.C. en los Pirineos Occidentales y mientras el cristianismo se
extiende por Europa, las creencias paganas desaparecen. Carlomagno avanza con
su ejército por los Pirineos y el líder
de un valle, Eneko Ximenez (Iñigo
Aranburu), padre de Eneko (Unax
Hayden), hace un pacto de sangre con la diosa Mari (Itziar Ituño), su vida a cambio de salvar a los suyos. Antes de
entrar en batalla, el valiente guerrero pide a su hijo Eneko prometerle, que
cuando él no esté, cuidará del valle y de sus gentes.
Pasa el tiempo y Eneko
(Eneko Sagardoy), que se ha educado
en la religión cristiana, regresa al valle y visita la tumba de su padre, con
la sorpresa de que en ella no se encuentra su cuerpo. Eneko no solo buscará la
manera de cumplir la promesa que le hizo a su padre, sino el recuperar su
cuerpo que ha sido robado y llevado a la cueva donde supuestamente vive la
diosa Mari, rodeada del tesoro de Carlomagno. Irati (Edurne Azkarate) será la encargada de guiarle por el bosque. Irati
es una joven huérfana que vive junto a su abuela, Luxa (Elena Uriz), una anciana que mantiene vivas las leyendas de sus
antepasados.
El guionista, productor
y director, Paul Urkijo Alijo,
siendo muy joven se apasionó por el cine, la literatura y los cómics,
preferentemente de género fantástico. En el año 2008 se licenció en Bellas
Artes y se inició con los cortometrajes “Jugando con la muerte” 2010 “Monsters
Do Not Exist” y “Bajo la cama” todos en 2012 y “El bosque negro” 2014 para
debutar en el largometraje con “Errementari (El herrero y el diablo)” 2017.
Tras el corto “Dar-Dar” 2020 nos llega ahora “Irati” 2022.
Para su nueva película,
Paul Urkijo, se ha inspirado en personajes de la novela gráfica “El ciclo de
Irati” de J.L. Landa y J. Muñoz”, algunas de las fábulas vascas y en la batalla
que tuvo lugar el 15 de agosto de 778, en las proximidades del desfiladero de
Roncesvalles en el Pirineo navarro. En dicho lugar, el ejército de vascones,
emboscaron a una parte del ejército de
Carlomagno. Una narración claramente centrada en cuatro puntos importantes, el
primero de ellos nos lleva al lado histórico, en segundo lugar a la naturaleza
y la mitología con raíces firmes en la tierra, a través de seres como la diosa
de fuego Mari, el gigantesco Sugaar, las Lamias o el Basajuan; el tercer punto
se enfocará en el choque entre lo pagano y la
religión cristiana, no olvidemos que el cristianismo bebió y se adueñó
de las tradiciones paganas, pues solo falta recordar que muchas de las fiestas
paganas fueron sustituidas por las cristianas, y finalizo con la historia de amor que la
narración destaca entre sus dos protagonistas principales, Irati y Eneko o lo
que es lo mismo, los actores que los encarnan, Edurne Azkarate y Eneko
Sagardoy. Personajes que se conocerán en su tierna infancia y que lucharán
juntos, pasados los años, por la supervivencia del valle.
Parte de ese sello de identidad del nuevo cine vasco, al menos cuando se tocan temas de otros tiempos, entre la mitología o la historia, es la esmerada ambientación y las atmósferas que logran crear con los decorados, los escenarios naturales y la siempre cuidada fotografía. En esta ocasión, los escenarios que ofrece la madre naturaleza, tan vitales para el desarrollo de la historia, los localizamos en territorios de Álava, Guipuzcoa, Bizkaia, Huesca o Navarra; encontrándonos con el castillo de Loarre (Huesca) y su entorno, los paisajes que rodean al municipio alavés de Asparrena, en diversas cuevas como la de la Leze en la Sierra de Altzania (entre Gipuzkoa y Araba), las cuevas de Arrikutz en Oñati (Gipuzkoa) o la de Pozalaguna (Bizkaia), el Valle de Ata (Navarra) y la Selva de IRATI (Navarra); y en cuanto a la fotografía, el magnífico trabajo llevado a cabo por Gorka Gómez Andreu, con el extraordinario uso de la luz natural durante el día y en la oscuridad con el fuego, tal y como se vivía en aquel siglo VIII de la Edad Medía. A todo ello, hay que añadir los acertados y vistosos efectos visuales, el fabuloso diseño de vestuario a cargo de Nerea Torrijos y la épica banda sonora de Maite Arroitajauregui y Aranzazu Calleja.
Para concluir, solo me
queda decir que el filme cuenta con unas correctas interpretaciones, destacando
a sus dos protagonistas principales, Edurne
Azkarate y Eneko Sagardoy; que
el director no nos da tregua a relajarnos, aunque se tome sus tiempos, pues
constantemente nos cambia de escenarios y situaciones, manteniendo al
espectador atento hasta el final. En definitiva, nos ofrece una dirección
elegante, atractiva, épica en su conjunto y disfrutable como filme de aventuras,
a través de la historia que nos narra.
Mi nota es: 8
ESTRENO EN ESPAÑA: 24
de febrero.