Tras la entrevista la pasada semana a G.Campanella, hoy toca la reseña a su novela. Espero que sea de vuestro agrado.
Enfrentarte a Heliópolis, el bues del hada azul, es descubrir una obra sin duda singular.
Primero por sus personajes
extraídos de la literatura infantil, o no tan infantil como son los cuentos de
hadas, y segundo por el tratamiento dado a éstos envueltos entre temas tan
importantes como son: lo social, político y religioso.
¿Quién al releer alguno de los
cuentos que nos narraban nuestras madres o leíamos por nosotros mismos, cuando
lo hemos vuelto a hacer pasado ya el tiempo, bien por placer o por seguir con
la tradición con los infantes que hemos tenido a nuestro alrededor, no ha
detectado una doble lectura en dichas historias?
Pero G. Campanella se atreve a
mucho más, dota a su novela de decenas de detalles que nos recordarán a
aquellas historias y envuelve a sus personajes en una atmósfera muy de nuestra
época. Como ejemplos sirvan que: La bella durmiente es adicta a los somníferos consumiendo
un producto (Z) para evadir su depresión. Que Hansel y Gretel padecen
trastornos alimentarios provocados por la falta de afecto, que la cenicienta
sea una emigrante ilegal. Y así iremos descubriendo a cada uno de los
personajes en un mundo nuevo llamado Heliópolis. Una ciudad a donde se traslada
el/la protagonista de la novela: El hada azul, un niño que desde niño deseó
ser hada.
En un mundo donde la monarquía
tiene controlados bajo su poder a todos los ciudadanos con una religión que es
la astrología y donde cada ciudadano al nacer recibe su carta astral
mostrándole que es lo que será de mayor, es entonces, cuando muchos de ellos,
en la ciudad, se han refugiado en la travesía del arco iris para no ser
perseguidos, pues son declarados insurrectos e ilegales.
Como en todo cuento, habrá un
príncipe azul y lo de azul no será por el color atribuido en su día a la
imaginación del autor original, sino a una causa, que no descubriré, pues a mí mismo me
hizo sonreír. Un príncipe muy alejado de la “realidad” de los cuentos
tradicionales.
G. Campanella nos sumerge en una
sociedad que identificamos claramente en nuestro presente. La manipulación
política para que los más poderosos vivan a sus anchas mientras el pueblo es
sometido a su antojo. Donde la religión inculca una doctrina falsa y mentirosa,
pues hasta las cartas astrales han sido manipuladas según la necesidad del
momento, y una sociedad con ganas de libertad pero que obedece en silencio las
normas, pues es lo único que conocen y no se atreven a más, hasta que como
siempre, valientes, gente con mentes liberadas y luchadores por actuar según el
imperativo necesario de su ser, intentarán
cambiar el sistema.
El supremo autor está siempre
presente y es que para los heliopolitanos todo está escrito en las estrellas y
las estrellas y sus constelaciones fueron creadas por el supremo autor, por
tanto, se le debe obediencia absoluta, pero es que hasta el supremo autor, como
también ha sucedido en nuestra historia con las múltiples religiones, ha sido
manipulado por hombres ambiciosos de poder y control.
G. Campanella es un amante de la
buena lectura y no sólo homenajea a los creadores de los cuentos de nuestra
infancia, pues llamará al colegio: Grimm y al hospital: Perrault sino a otros
personajes de la literatura y escritores ya universales.
Es una novela en apariencia
sencilla e inocente, pero muy lejos de esas dos palabras, pues en ella cada
lector, según la lectura que de al escrito, influenciado por su carácter y
pensamientos, descubrirá una lectura apasionante y adictiva.
La próxima semana tocará a un músico que seguramente os sorprenderá su historia y lo que muchos aún desconocen de él.
Feliz fin de semana para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario