La coproducción entre
Irlanda, Reino Unido y Estados Unidos, Kinds
of Kindness está dirigida por Yorgos
Lanthimos compartiendo guion con Efthymis
Filippou.
Un filme dividido en
tres capítulos. El primero de ellos titulado “La muerte de RMF”, en el que se
nos presenta a Robert (Jesse Plemons)
controlado por su jefe Raymond (Willen
Dafoe) y padeciendo la venganza de este, al negarse a ejecutar una orden.
En el segundo segmento, titulado “RMF está volando”, veremos a un joven
policía, Daniel (Jesse Plemons),
abatido por la desaparición de su mujer Liz (Emma Stone), en el mar; cuando esta reaparece en casa, él comienza
a dudar de que sea su verdadera esposa y termina con “RMF se come un sándwich”,
relato en el que se nos muestra a Emily (Emma
Stone) junto a su compañero Andrew (Jesse
Plemons), quienes buscan cumplir una profecía, la de una mujer con el don
de resucitar a los muertos y así poder regresar al extraño grupo del que ella
fue expulsada. Tres intrigantes historias como el propio significado de las
iniciales “RMF” ¿Un Macguffin?, quizás.
El director de teatro y
cine, Yorgos Lanthimos, estudió
dirección de cine y televisión en la Escuela de Cine de Atenas. Debutó en la
dirección con el cortometraje “O viasmos tis Hlois” 1995 y en el largometraje
con “My Best Friend” 2001, “Kinetta” 2005, “Canino” 2009, “Alps” 2011,
“Langosta” 2015, “El sacrificio de un ciervo sagrado” 2017, “La favorita” 2018,
“Pobres criaturas” 2023 y este año estrena “Kinds of Kindness” 2024. En el
cortometraje encontramos piezas como “Uranisco Disco” 2002,
“Necktie” 2013, “Nimic” 2019, “Gucci Of Course a Horse” 2020 y el mediometraje
“Vlihi” 2022. También ha dirigido un importante número de videoclips.
Si Lanthimos pretendía
regresar a sus orígenes con un filme desagradable, provocador y con cierto
toque gore, sin duda lo ha logrado y de paso confundir, aunque con Yorgos
siempre creemos y debemos estar preparados, al espectador al que estaba
acostumbrando a películas menos rocambolescas como “La Favorita” o la reciente
“Pobres criaturas”. Dos obras vistas por el gran público, muy premiadas en
festivales y esta última, ganadora del Oscar, entre otros apartados, a mejor
actriz para una impresionante Emma Stone, que aquí, tal vez por tener las
expectativas muy altas, me ha defraudado un poco.
Estamos ante una obra
que me provocó mil sensaciones cuando la estaba visionando. Tras finalizar y
mientras se encendían las luces de la sala, comencé a echar humo hasta por las
orejas y una vez reposada en mi mente unos días, me he reconciliado en parte
con el director. ¡En parte!. No cabe duda que se ha extralimitado con sus
fobias, posibles traumas, fantasmas que le persiguen por algún motivo que al
menos yo desconozco y con una duración que nos lleva a la extenuación.
La nueva propuesta de
Yorgos se divide en tres historias interpretadas por los mismos actores en
personajes y contextos diferentes. Estrellas que defienden con dignidad el
trabajo encomendado, aunque en esta ocasión a Emma Stone la he visto un poco perdida
entre las páginas de ese insólito guion y la retorcida mente del director; los
motivos son sencillos, no me ha convencido, me resulta extremadamente
sobreactuada aunque sea exigencia del guion y lo peor de todo, es que por
instantes nos recuerda a su maravillosa Bella Baxter de Pobre Criaturas. No
diré nunca que su interpretación no esa buena, pues Emma es de esas actrices
que devoran la pantalla con su magnetismo innato, pero en mi modesta opinión,
debería dar un nuevo paso, pues ya sabemos de lo que es capaz y por eso se la
premió.
Lanthimos, en cada uno
de sus filmes, manifiesta que el poder de su perversión y extenso imaginario,
no tienen límites. Su cerebro, al menos cuando escribe sus historias y luego
las lleva a la gran pantalla, parece sufrir de un singular cortocircuito que
vomita toda su maestría, su genialidad, el surrealismo de que es capaz y por el
que se le admira y odia a la vez.
Este singular tríptico incide
de nuevo en temas como la identidad del ser, el sometimiento de la persona, los
miedos ante lo desconocido, el poder de control de las sectas, el dolor físico
y mental basculando en la fina línea del sadomasoquismo, el dominio de las
situaciones, la sensualidad y sexualidad más explícitas, sin olvidar el egoísmo
y el ego; todo ello aderezado de drama, crueldad, vida, pérdida y muerte; humor
negro y dosis de tensión emocional. Repito, con Yorgos, siempre hay que estar
preparados y dejar nuestra humanidad más humana, fuera de la sala de cine,
porque él es capaz de arrebatárnosla.
No quiero extenderme
más, porque los amantes de este director estarán deseando disfrutar de su nueva
obra y los que no lo son o nunca han visto una película de Lanthimos, que se
acerquen, es bueno perder la virginidad con película a las que uno no está
acostumbrado e incluso piensan que no existen. Yo lo hice hace unos años y
el viaje sigue siendo brutal. Reconozco que me tiene enganchado en su compleja
visión del ser humano.
Finalizo mencionando la
extraordinaria fotografía Robbie Ryan
quien dispensa a la obra de una atmósfera turbadora entre la variedad de planos
que juegan con el blanco y negro y el color, retratando y diferenciando los
sueños de la realidad real o la distorsionada, en donde cada uno de los
encuadres nos brinda su propia lectura. La desconcertante partitura de Jerskin Fendrix al piano con sus
acordes disonantes y coros que evocan lo sobrenatural y concluyo con cuidado
montaje de Yorgos Mavropsaridis.
Mi nota es: 7
ESTRENO EN ESPAÑA: 28
de junio
REPARTO: Emma Stone, Jesse Plemons, Willem Dafoe,
Margaret Qualley, Hong Chau, Joe Alwyn, Mamoudou Athie, Hunter Schafer, Susan
Elle, Merah Benoit, Elton LeBlanc, Cynthia LeBlanc, Rose Bianca Grue, Krystal
Alayne Chambers, Jess Weiss, Victoria Harris, Ja`Quan Monroe-Henderson, Timothy
Hinrichs, Nathan Mulligan, Tessa, Bourgeois,
Julianne Binard, Tremayne Cole y Christian M. Letellier.
PRODUCTORA: Element Pictures// Film4 Productions// Fox
Searchlight
DISTRIBUIDORA EN
ESPAÑA: Fox Searchlight // Twentieth Century Studios España.