Los
Vigilantes cuenta con guion adaptado y dirección de Ishana Shyamalan, basándose en la
novela de A.M. Shine.
El prólogo nos presenta
a un joven internándose en un bosque, se encuentra frente al punto sin retorno
108, atraviesa el cerco y emprende una larga carrera, debe atravesar el bosque
antes de que se ponga el sol; cuando la noche cae llega de nuevo al punto sin
retorno. Vemos una bandada de pájaros atravesar el espacio, se escuchan ruidos
entre la niebla y la tierra tiembla. El joven intenta esconderse, pero algo lo
atrapa.
Tras el fundido nos
encontramos con Mina (Dakota Fanning),
que trabaja en una tienda de mascotas. La jefa le encarga que lleve a unos
clientes un magnífico ejemplar de cotorra dorada. Durante el viaje en coche, se
interna en un bosque y en un momento determinado el vehículo y el móvil, dejan
de funcionar, sale al exterior con la cotorra en la jaula y camina entre los
árboles. La noche cae, comienzan a escucharse extraños ruidos, las aves vuelan
en una misma dirección y la tierra tiembla. Mina se encuentra con Madeline (Olwen Fouéré), Ciara (Georgina Campbell) y Daniel (Oliver Finnegan) que viven en una
extraña cabaña. No he desvelado nada, esta sinopsis está sacada del inicio.
La guionista y
directora, Ishana Shyamalan, se
graduó en la Escuela de Artes Tisch de la Universidad de Nueva York. Ha
dirigido 6 episodios de “Servidor” 2021/23 y los videoclips “Saleka: Mr.
Incredible” y “Saleka: Clarity” ambos en 2020. Este año debuta en el
largometraje con “Los vigilantes” 2024.
El guionista, productor
y director M. Night Shyamalan conocido por obras como la trilogía formada por:
El protegido 2000, Múltiple 2016 y Glass (Cristal) 2019 o la impactante “El
sexto sentido” 1999, produce el primer filme de su hija Ishana, que sin duda,
visto el resultado, no puede negar que sigue los pasos de su padre,
ofreciéndonos una película de suspense y terror con un sello muy característico.
La información se nos ofrece en pequeñas pinceladas y cuando llega a ese final,
algo se queda en el tintero, que no aclara lo suficiente, así todo, con sus
defectos, que tiene unos cuantos, el filme resulta de lo más inquietante
gracias en parte a su banda sonora y a unas dramáticas e intensas
interpretaciones.
En ese inicio, en los
primeros minutos que conforman el prólogo, intuimos que algo extraño se esconde
en el frondoso bosque y en el instante en que la protagonista se interna en él,
conduciendo su coche, las alertas se disparan en nuestra mente, ante los
posibles peligros que puedan acecharla, a la vez que respiramos aliviados pues
consideramos que el interior del auto y la velocidad que puede alcanzar, la
protegerán de cualquier mal; pero la narración desea complicarlo un poco más y
el auto se detiene bruscamente, negándose a arrancar y obligando a Mina a salir
al exterior con la jaula y el hermoso pájaro parlante. Desde ese instante, todo
cobra una nueva dimensión ante la mirada atenta del espectador, percibiendo
como la atmósfera enrarecida que flota en el ambiente, le oprime.
Cuanto vemos, creemos
ver o escuchamos, nos sumerge en un mar de dudas e intranquilidad, incluso
cuando la joven es rescatada, pues la directora no desea que nos relajemos y
aun con los altibajos que sufre el guion, lo logra con astucia y determinación.
Cada plano, cada ángulo, cada mirada o palabra que los personajes nos brindan,
nos hacen sospechar. ¿Quién es quién?, ¿Qué hacen en medio del bosque? ¿Quiénes
son los extraños que les vigilan? Lo que sí se nos comunica, de entrada, que
existen normas que hay que cumplir, de lo contrario, morirán
Estamos ante un cuento
gótico de suspense psicológico y desconcertante que bebe del folklore irlandés,
de sus hadas y seres mitológicos y que ha sido rodado íntegramente en dicho
país. La obra se desarrolla en dos escenarios principales, por un lado el
inquietante bosque y del otro, el refugio cuyo interior diáfano lo integran
tres paredes ausentes de adornos y una cuarta que actúa de gran ventanal, visto
desde el exterior y de espejo en el interior, de esta manera, desde fuera se
observa todo lo que sucede en la cabaña, mientras que los de dentro, se ven a
sí mismos. Nos recuerda al reality Show de “El gran hermano”. Un escenario en
medio de la naturaleza, que sirve de entretenimiento u observatorio a los seres que habitan el
bosque. Entre los cuatro personajes de esa especie de sombrío reality, destaca
la interpretación de Dakota Fanning,
quien da vida a Mina, una joven atormentada por un pasado trágico.
Resumiendo, porque nada
más quiero descubrir, los vigilantes, nos ofrece una turbadora narración,
porque no hay nada que produzca más pavor que lo conocido desconocido y lo
desconocido que alcanzamos a escuchar pero no llegar a ver. El filme cuenta con
la extraordinaria fotografía de Eli
Arenson y Job ter Burg en donde
el color, las luces y las sombras cobran gran protagonismo, así como la
selección de planos y por supuesto, la potente banda sonora de Abel Korzeniowski, entre coros y sonidos que
nos recuerdan la música tradicional irlandesa, potenciando el drama. Finalizo
con el magnífico sonido y en el lado negativo, que peca de los vicios de su
padre, que ya sabéis cuales son.
Mi nota es: 7
ESTRENO EN ESPAÑA: 7 de
junio.
REPARTO: Dakota Fanning, Georgina Campbell, Olwen
Fouéré, Siobhan Hewlett, Alistair Brammer, Oliver Finnegan, Hannah Howland,
Charles Camrose, Ann Marie Horan, Diarmuid de Faoite, Zarima McDermott, Seán T.
Ó Mellaigh, Shane O´Regan, Anthony Morris, Michelle Hlongwane,
PRODUCTORA: Warner Bros.// Blinding Edge Pictures//
Inimitable Pictures// New Line Cinema.
DISTRIBUIDORA EN
ESPAÑA: Warner Bros. Pictures España.