domingo, 20 de enero de 2013

20 AÑOS SIN: AUDREY HEPBURN


AUDREY HEPBURN: MUCHO MÁS QUE UNA GRAN ACTRIZ.
Audrey Hepburn nace el 4 de mayo de 1929  en Ixelles/Elsene, un municipio de Bruselas, Bélgica y muere en 1993, en Suiza. Actriz británico-belga, fue hija única del inglés Joseph Víctor Anthony Ruston y de su segunda esposa, la baronesa Ella Van Heemstra, una aristócrata holandesa, que tenía dos hijos, fruto de su primer enlace matrimonial.

El padre de Hepburn trabajó con una compañía de seguros en Gran Bretaña, lo que provocó el viajar a menudo entre Bruselas, Inglaterra y los Países Bajos.

Entre 1935 y 1938, Hepburn estudió en una academia privada y femenina en Kent, Inglaterra.

En 1935 sus padres se divorcian. Sus progenitores fueron miembros de la unión británica de fascistas a mediados de los años treinta, según Unity Mitford. Audrey confesó, años más tarde sobre este hecho: “Fue el momento más traumático de mi vida”

Años más tarde, localizó a su padre en Dublín a través de la Cruz Roja y hasta la muerte de éste, permaneció a su lado apoyándolo y financiándolo.

En 1939 se traslada junto con su madre y sus hermanastros a la casa de su abuelo en Arnhem, Países Bajos, pensando que sería un lugar seguro para evitar al ejército nazi.  Fue en esos años cuando Audrey acudió al conservatorio de Arnhem entre 1939 y 1945, donde estudió piano y ballet clásico, los cuales compaginaba con sus estudios escolares.

Bajo la Segunda Guerra Mundial, la joven Audrey era llamada por su madre: Edda Van Heemstra, para ocultar sus orígenes ingleses y la obligó a hablar holandés. Audrey dominaba perfectamente: Inglés, francés, holandés e italiano, incluso se defendía en alemán y español.

Sus deseos fueron siempre los de ser bailarina, pero la guerra la obligó a elegir otra profesión, la de actriz.

En 1944 ya era una buena bailarina y sería durante esa época, cuando lo hacía secretamente, para donar luego el dinero recaudado a la resistencia holandesa. Sobre esta época dijo: “Fue el mejor público que he tenido, no emitían ni un solo sónido tras terminar mi actuación”.

El desembarco de las tropas aliadas en Normandía el día D, empeoró las cosas en Holanda. Los alemanes confiscaron los alimentos y combustibles. La ciudad de Arnhem fue devastada durante dicho bombardeo aliado. Se vio obligada, como otros tantos a elaborar harina a partir de tulipanes con la que podían cocinar galletas y tartas. Audrey sufrió anemia y problemas respiratorios. En 1991 comentó: “Tengo recuerdos. Recuerdo estar en la estación de tren viendo como se llevaban a los judíos, y recuerdo en particular a un niño con sus padres, muy pálido, muy rubio, usando un abrigo que le quedaba muy grande, entrando en el tren. Yo era una niña observando a un niño”.

Audrey también percibió semejanzas entre ella y Ana Frank: “Tenía exactamente la misma edad que Ana Frank. Ambas 10 años cuando empezó la guerra y 15 cuando acabó. Un amigo me dio el libro de Ana en holandés en 1947. Lo leí y me destruyó. El libro tiene ese efecto sobre muchos lectores, pero yo no lo veía así, no solo como páginas impresas; era mi vida. No sabía lo que iba a leer. No he vuelto a ser la misma, me afectó profundamente”. Otro comentario respecto a la guerra y el paralelismo con Ana Frank fue: “El espíritu  de supervivencia es muy fuerte en las palabra de Ana. En un momento dice: Estoy deprimida. Y al siguiente te habla de que quiere montar en bici. Ella es la muestra de una infancia en terribles circunstancias”.

Todo el sufrimiento que vivió durante la guerra fue que siempre contribuyera y estuviera al lado de UNICEF hasta su muerte.

En 1945 y tras finalizar la guerra, Audrey se muda a Ámsterdam y tomará clases de ballet con Sonia Gaskell. En el 48 se traslada a Londres continuando con sus estudios, esta vez bajo la reconocida Marie Rambert, profesora de Vaslav Nijinsky, uno de los mejores bailarines de la historia de la danza.

Su primera película fue: Siete lecciones, un film educativo holandés.

Actuaría en producciones musicales como: High Button Shoes y Sauce Piquante.

Tras varios papeles cortos en diversas películas y durante el rodaje de Monte Carlo Baby fue elegida para protagonizar el musical de Broadway: Gigi, estrenado el 24 de noviembre de 1951.  La reportera Sidonie – Gabrielle Colette dijo sobre ella: “¡Voilà! ¡Ésta es nuestra Gigi! Ganaría el premio Theatre World Award por su debut. Continuaría con dicho musical durante 6 años de gran éxito.

Su primer papel importante fue en el film Secret People, en el cual representaba a una bailarina de prestigio. Todas las escenas de baile las ejecutó ella misma, pero su momento cumbre llegaría de la mano de William Wyler en el film: Vacaciones en roma junto a Gregory Peck y cuya interpretación la valió el Oscar, el Globo de Oro y el premio Bafta, a la mejor actriz.

Luego llegaría: Dos en la carretera (1967), Cómo robar un millón (1966), Una cara con ángel (1957)  Breakfast at Tiffany`s (1961) y el famosísimo musical, llevado a la pantalla y multipremiada, Mi Fair Lady (1964) considerado el papel de su carrera.

Pero para la actriz, el mejor papel, sin duda, resultó el de la hermana Lucas en Historia de una monja (1959) (Premio a la mejor actriz en el Festival de San Sebastián y el premio Bafta), aunque la gran mayoría de las personas la ven como el icono de moda por su papel como Holly, en desayuno con diamantes.

En 1963, al igual que un año antes hiciera Marilyn Monroe, cantaría el cumpleaños feliz al presidente Kennedy.

Desde 1967, y tras 15 años de éxitos sobresalientes en el cine, comenzó a participar en películas únicamente de forma ocasional. A destacar: Sola en la oscuridad (1967), Robin y Marian (1976) y su último papel en Always (1988) donde encarnaba a un ángel. Muchos han querido ver en ese papel la evocación que se tenía de ella en muchos ambientes.

En se mismo año, se la nombra embajadora especial de UNICEF.

Audrey vivió una vida mucha más reservada y humilde que la mayoría de las estrellas de Hollywood. Nunca vivió en una mansión y disfrutaba cultivando su propio huerto. Además de su dedicación a UNICEF y sus múltiples viajes a África.

Estuvo casada dos veces. La primera de ellas con el actor Mel Ferrer, con el que tuvo a su hijo, Sean, que actualmente gestiona la fundación: Audrey Hepburn Childhood, y en segundas nupcias con Andrea Dotti, un médico italiano, con quien tuvo a su segundo hijo: Luca. La actriz confesaría años más tarde, que el fracaso de sus matrimonios, la afectó mucho.

En los últimos años estuvo unida a Robert, un holandés con el que compartían labores humanitarias y su gusto por las cosas sencillas.

Falleció de cáncer de colon en su casa de Toloxhenaz (Suiza) el 20 de enero de 1993 a los 63 años de edad. La gran actriz Elizabeth Taylor dijo: Dios estará contento de tener a un ángel como Audrey

Icono, mujer comprometida con los más desfavorecidos y sobre todo con los niños y querida por todos sus compañeros, recibiendo un Globo de Oro, como la actriz favorita del mundo, nos abandonó hace ya 20 años, pero su personalidad, su belleza, su magnetismo personal, nunca nos abandonará.

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