Llevaba
tiempo queriendo ver “El cavernícola” con Nancho Novo y cada vez que pasaba por
El Teatro Fígaro, decía: "tengo que venir a verla", y ha sido este viernes, con
motivo del día de los teatros en Madrid, cuando un buen amigo, Diego Ferro, me
sorprende con la invitación.
El
cavernícola es el monólogo de mayor éxito internacional que inició su despegue
en Broadway y se ha representado en más de 30 países, incluso su autor Rob
Becker, encarnó al personaje.
Se
trata de una obra divertida, con la única pretensión de intentar hacer
comprender al espectador, por las experiencias vividas, sufridas y vistas por
el personaje, de las diferencias existentes entre hombres y mujeres. Entre
cazadores y recolectoras.
Los hombres en el principio de los tiempos tenían la misión de alimentar a la familia y ese era su único y claro objetivo; mientras que las mujeres, debían criar a sus hijos, cuidar del marido, preparar la comida, mantener el hogar fuera de los peligros existentes… por lo tanto, su punto de mira era más amplio, más diverso y eso… Eso continua arraigado en la mente y el comportamiento del hombre frente la mujer, o de la mujer frente al hombre de hoy.
Los hombres en el principio de los tiempos tenían la misión de alimentar a la familia y ese era su único y claro objetivo; mientras que las mujeres, debían criar a sus hijos, cuidar del marido, preparar la comida, mantener el hogar fuera de los peligros existentes… por lo tanto, su punto de mira era más amplio, más diverso y eso… Eso continua arraigado en la mente y el comportamiento del hombre frente la mujer, o de la mujer frente al hombre de hoy.
Nancho
comenta que la adaptación de la obra al castellano ha sido ligeramente retocada,
pues el original presentaba un toque rancio de machismo, por el contrario en
esta versión, se le ha dado más importancia al papel de la mujer. También se
escucha, en algunos momentos determinados, frases de rabiosa actualidad.
Nancho
borda el papel y se siente cómodo en su cueva, en ese decorado presidido por
dos grandes murales. A la izquierda emulando un cazador junto a un bisonte y en
el de la derecha la silueta de una mujer de aquellos tiempos, decorado en el
que también veremos un sofá y una televisión, al puro estilo de los Picapiedras.
Y en este decorado nos va sumergiendo en
su mundo, que no deja de ser el nuestro propio. Visualizaremos a través de su
voz escenas y situaciones por las que ya hemos pasado y tal vez algunas estén
por llegar. Interactuará con el público, para saber su opinión. Todo ello con
el ingenio, la maestría, la sutileza y la profesionalidad que se pierde en esa
cueva, para comprobar que aunque existen diferencias notables entre los sexos,
entre esa mal llamada guerra de los sexos, nos necesitamos, somos
complementarios.
Una
obra delirantemente divertida, con puntos de nostalgia, con verdades como puños
y con un final emotivo, cargado de razones.
Os
dejo con la información de horarios y días en que podéis ver la obra http://www.gruposmedia.com/cartelera/el-cavernicola-con-nancho-novo/
VÍDEO DEL CAVERNÍCOLA: NO, AUNQUE LO PAREZCA, NO ESTÁN LAS IMAGENES DEL FINAL :-)