martes, 18 de abril de 2017

LO TUYO Y TÚ: CRÍTICA DE CINE


           Lo tuyo y tú: La pérdida de la personalidad ocasionada por el amor deseado y no correspondido, o la búsqueda del compañero perfecto, para beber hasta emborracharse.

          En su estudio de pintor, Youngsoo (Kim Joo-hyuk) se confiesa a uno de sus amigos sobre los problemas con su novia, Minjung (Lee You-young), quien tiene motivos probados para demostrar que se ve con otros hombres y que aunque le había prometido no volver a beber, lo hace hasta emborracharse.
            Una noche mientras Youngsoo está durmiendo, ella llega tarde y al meterse en la cama, Youngsoo, le pregunta por qué sigue bebiendo, tras la promesa que se habían hecho. Discuten no solo por ese motivo, sino por el de verse con otros hombres. Minjung decide irse a su casa. A partir de ese instante, él deambulará en busca de ella y de ese amor que le tiene preso.

          El surcoreano, Hang Sang-soo (Ahora sí, antes no), nos somete a un ejercicio que además de las relaciones de pareja, nos ofrece  una obra  más teatral que cinematográfica, pues carece de todo ritmo y  prácticamente  se desarrolla en interiores, entre estudios de pintura, casa de los protagonistas, bares… En secuencias de planos de larga duración en cámara estática, donde solo el movimiento surgirá para buscar al interlocutor que habla en ese preciso momento durante las prolongadas conversaciones;  las cuales despertarán el interés en el espectador, al ir descubriendo la idiosincrasia de sus protagonistas, quienes navegan entre la falta de identidad, de confianza en uno mismo y del dejarse remolcar por las circunstancia. Situaciones que llevarán a sus personajes a lo absurdo o lo ambiguo, provocando en el espectador la incertidumbre de si el director pretende embriagarle como a la protagonista y así asumir una realidad, llena de contracciones. 

          A las interpretaciones no se les puede achacar nada, resultan soberbias. Youngsoo nos muestra a un joven en busca de la mujer que lo acaba de abandonar. En esa búsqueda va perdiendo  su individualidad al aceptar las debilidades de ella y las necesidades de tenerla junto a él. Minjung, por el contrario, nos ofrece a una mujer que ha perdido el norte, la voluntad bajo el deseo y la búsqueda de compañeros con quien compartir conversación y una copa o mejor varias; como ella misma dice en algunas ocasiones: “Beber hasta emborracharnos”. En esos encuentros, donde los hombres parecen reconocerla, ella provocará el engaño, la farsa y con ello, tanto sus compañeros de "batalla", como los espectadores, no saber realmente si ella es quien creemos que es o por el contrario…

          La iluminación en la fotografía de Park Hong-yeol, refleja con claridad,  cada momento de las situaciones que se están viviendo.

          Sin duda estamos ante una película no apta para todos aquellos que se acercan a una sala de cine comercial, para pasar un rato, pues esta cinta deja ese poso extraño con el que disfruto, por la perplejidad que ocasiona la historia relatada.

          Recomendable para cinéfilos exigentes y complacientes.

          Mi nota es: 8

          ESTRENO EN ESPAÑA: 12 de Abril

          REPARTO: Kim Joo-hyuk, Lee You-young, Kwon Hae-hyo, Yu Jun-sang, Kim Eui-sung

          PRODUCTORA: Jeonwonsa Film Company

          DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Good Films y La Aventura


lunes, 17 de abril de 2017

LOS BUITRES(o la muerte de los amantes): CRITICA DE TEATRO

        Los buitres (o la muerte de los amantes), donde el delirio se confunde con la cordura y la tragicomedia se pone al servicio del público.

        Una pareja cena en silencio frente a frente, imitando cada gesto que el otro hace, sin dejar de mirarse a los ojos, como un reflejo ante el espejo. Será el marido quien rompa el silencio dirigiéndose a su esposa: - Te odio. Ella esboza una sonrisa.

         A partir de ese instante las lenguas afiladas como puñales y ungidas por el más letal de los venenos dialecticos, les llevará a  un  combate de odios, rencores, celos, despechos…Y todo en la noche en que ambos celebran su 10 aniversario de casados.
         Pero comencemos por el principio. Al entrar en la sala del teatro, nos recibe aun lado de la puerta, una sirvienta inmóvil y silenciosa, como si de una estatua se tratara. La atmósfera creada en el interior nos hace presagiar que no estamos ante una obra al uso: Ligera oscuridad, cubierta por una neblina. Cortinajes blancos. Una mesa presidiendo el centro del escenario y preparada para dos comensales. Velas negras encendidas en extraños candelabros y una pareja sentada, frente a frente, cenando, mientras las ramas de los árboles estériles, se internan caprichosamente entre las paredes y el techo del salón. La decadencia les rodea.
          Si no fueran suficientes los latigazos verbales entre ellos durante la cena, esa noche la pareja recibirá la visita de alguien que ambos conocen bien. Una visita que provocará que las pasiones se desaten o repriman, la crueldad no tenga límites y la frialdad paralice el raciocinio. Los buitres atacarán sin compasión.

          La enajenación se apoderará de los personajes perdiendo el sentido del tiempo, confundiendo constantemente los años de los recuerdos y de los encuentros. Dejará de tener sentido la decencia y el respeto por ellos mismos. Se abandonarán al más absoluto surrealismo. La agresividad verbal y física, será la constante entre ellos. Las mentiras y manipulaciones, les hará perder la realidad. O es que la realidad no existe entre aquellas paredes, sino el dolor, el más cruel masoquismo y la pérdida de la identidad.
         Carmen Mayordomo, César Sánchez y Xabier Murúa están soberbios y creíbles en sus personajes. Actuaciones llevadas al límite donde la expresión corporal y la  entrega al ser que están dando vida les duele, en la piel y en el alma. El cuarteto se completa con  Josi Cortés, breve y correcta en su papel de criada

         Carles Harillo Magnet, escribe y dirige con acierto una obra donde se destila el miedo al fracaso, al fracaso por la ambición, a la ambición por el poder y el poder por el miedo. Un círculo vicioso en el cual el más fuerte  podrá ganar la batalla o por el contrario resignarse. Nada es real, todo está deformado. El odio, el desprecio, los engaños, la soledad, la codicia, la enfermedad, la muerte, las miserias humanas… campan a sus anchas y donde los buitres carroñeros esperarán la caída de la víctima a devorar, sin darse cuenta de que las víctimas... son ellos mismos.

          Mis felicitaciones a todo el equipo técnico, vestuario, escenografía y al personal del Teatro Lara.
 

 Reparto:                                    Carmen Mayordomo, César Sánchez,                                                            Xabier Murúa y Josí Cortés.

Dramaturgia y dirección:          Carles Harillo Magnet

Vestuario y Espacio Escénico:  Pier Paolo Alvaro

Espacio Sonoro:                        Boby Lauren

Diseño de Luces:                      Jesús Antón

Ayudante de Dirección:            Zoilo Carrillo

Jefe de Producción:                   Gabriel Sánchez

Ayudante de Distribución:        Pinar Bernudo

Producción Ejecutiva:               Manuel De

Comunicación:                          Josi Cortés Comunicación

Producción:                              Ojos de Sapo

Lugar:         TEATRO LARA

Fechas y horarios: Del 3 de abril al 29 de mayo.  

Todos los Lunes a las 22:15 horas.



viernes, 14 de abril de 2017

NI CON TRES VIDAS QUE TUVIERA: CRÍTICA TEATRAL


El pasado viernes 7 de abril  se estrenó en la Nave 73 Calle Palos de la Frontera 5, la obra “Ni con tres vidas que tuviera” de José Pascual Abellán.
En el escenario nos encontraremos con tres personajes: En la parte más a la  izquierda: dos sillas, una mesa en medio, una jarra de agua y dos vasos; sentado  en una de las sillas, un ex terrorista (Borja Maestre) y en la otra una periodista (Lucia Esteso). En la parte derecha, una víctima huérfana desde muy niña, por el atentado perpetrado por dicho ex terrorista y donde murieron sus padres (Esther Vega)
Ni con tres vidas que tuviera, tiene como foco central la entrevista realizada al ex etarra y donde al comienzo de cada acto, se acompaña con el relato del sufrimiento vivido por la victima huérfana, quien no comprende cómo se le puede dar cobertura a un asesino en un programa de televisión y luego entrevistarle en un periódico de tirada nacional, cuando donde debería seguir estando es entre rejas, aunque haya cumplido 22 años de condenada. Sus padres no volverán jamás y él…
La obra está inspirada en la entrevista que el periodista Jodi Évole realizó para el programa “Salvados” de La Sexta al ex etarra Iñaki Rekarte, y aunque nuestros protagonistas ni mencionan el país, ni la ciudad donde vive, ni incluso en las que ha llevado a cabo las masacres con sus atentados, sí reconoceremos el que se efectuó en Santander en 1992 y donde murieron 3 personas (un matrimonio y un joven), ocasionado por la explosión de un coche bomba.
Sergio Arróspide dirige esta obra dura, descarnada, con guion de José Pascual Abellán, quien logra provocar una lucha interna, desde la propia butaca en la que el espectador está sentado, a través de las palabras que escucha de boca del ex etarra y la víctima. Un claro conflicto sobre la vida y la muerte, el arrepentimiento, el pasar página, el olvidar,  la pérdida, el dolor, el amor, los errores de juventud. El intentar comprender hasta dónde se es consciente o no de los actos cometidos y la verdad del porqué.
Las emociones que fluyen de sus tres actores: Lucía, Borja y Esther, haciendo totalmente creíbles sus personajes, se filtran entre los asistentes a la representación. El silencio del patio de butacas, contrasta con las frases que se oyen en el escenario, causando en algunos espectadores el citar palabras en defensa de uno u otro, entre murmullos. Brindando el sí al perdón o negando con la cabeza, creyendo en el arrepentimiento o provocando el recelo; y todo ello conteniendo la respiración, soltando el aire de golpe y así volver a la disputa en nuestro interior, hasta llegar a “sentenciar” con un sí a pasar página o por el contrario, como la víctima dice en un momento determinado, su crimen debe pagarse en la cárcel, no estar en la calle tras 22 años de prisión. El desenlace, mejor lo ve el espectador en directo.
“Un hombre sin esperanza es un hombre perdido” comenta en un momento determinado la víctima o  la mencionada por el asesino: “A veces un hombre actúa pero no siempre sabe lo que ha hecho…” Y ante afirmaciones así y otras citadas en el texto, el espectador se pregunta: ¿Se puede de verdad perdonar al asesino de tus padres, de tus hijos, de tus hermanos, de tus amigos… de un ser humano? ¿Es suficiente escuchar de la boca de un asesino, que ni con tres vidas que tuviera, podría olvidar todo el dolor y la muerte que ha provocado y con ello su arrepentimiento total?
Además de la acertadísima dirección, guion y las excelentes interpretaciones, destacar la ambientación, el sonido y la iluminación, correctas para no perder en ningún momento el hilo de la representación.
Para terminar voy a citar las palabras del dramaturgo de la obra: José Pascual Abellán: “Y si la noche en que vi la entrevista un deseo incipiente de que al menos un solo espectador en teatro sintiera lo que yo había sentido viviendo aquel programa en televisión, la mañana que abrí el periódico y encontré aquel escrito de Silvia confirmé que allí había nacido mi nuevo trabajo teatral…”
Recomendable para amantes del teatro y temas sociales.
La obra se podrá ver todos los viernes del mes de abril a las 20h,
Lugar: Nave  73  Palos de la Frontera 5  (Metro Palos de la Frontera L3
Precio: 12 € anticipada   14 € en taquilla
DRAMATURGIA:        José Pascual Abellán
DIRECCIÓN:                Sergio Arróspide
REPARTO:                    Lucía Esteso, Borja Maestre y Esther Vega
FOTOGRAFIA:            Juan Luis González (Clickarte Fotografía)
DISEÑO DE CARTEL:          Joaquín Román.
PRENSA:                      Lucía Esteso

jueves, 13 de abril de 2017

ÚLTIMOS DÍAS EN LA HABANA: CRÍTICA DE CINE


          Últimos días en la Habana, está dirigida por Fernando Pérez (La pared de las palabras) compartiendo guion con Abel Rodríguez. Un drama donde el espectador será partícipe de la miseria en la que viven los protagonistas.

          En el corazón de La Habana, Miguel (Patricio Wood) y Diego (Jorge Martínez) viven juntos en un barrio marginal, donde la pobreza se respira en cada esquina. Miguel sueña con irse a New York y cada día pregunta a sus vecinos, al regreso de su trabajo como lavaplatos en un restaurante, si ha llegado el correo, pues espera con ansiedad recibir el visado. Diego solo aspira a vivir o deberíamos decir, sobrevivir, pues su existencia la pasa postrado en una cama con múltiples dolencias donde la enfermedad del sida, le consume día a día; pero a diferencia de Miguel que pasa prácticamente las horas en silencio, mirando un mapa y deambulando de un lado a otro, él busca ser feliz con pequeños momentos. Con las visitas de un chapero con novia, con quien disfruta de sus historias conversando y riendo. Con su sobrina Yusisleydi (Yailene Sierra), que no sabe filtrar lo que debe o no decir, o en la soledad, viendo la tele, aunque sea en contadas ocasiones. Diego y Miguel se conocen desde niños y desde hace unos años, viven juntos en una casa destartalada, sin apena muebles, en una especie de corralón, donde sus vecinos han creado  ese lazo que forma la verdadera familia.

          Una obra sobrecogedora. Un drama donde lo que no se dice duele más que lo que se pueda sentir, donde se refleja la cruda realidad de un país aletargado, que parece no despertar o no dejarlo despertar, aunque algunos se empeñan en decir que sí. Una sociedad resignada a sobrevivir como se puede, sin cuestionar o cuestionarse, o al menos no exteriorizarlo salvo en el personaje de la sobrina de Diego, Yusisleydi, que choca frente al resto de los personajes y que curiosamente ante lo que estamos viendo y experimentando “chirría” al oído, por sus largas parrafadas no exentas de verdades, por no callarse ni delante de la policia y no temer  ninguna represalia. Una rebelde con causa, en un lugar donde no hay sitio para serlo, pero a ella eso no le importa.

          Una dirección cuidada por parte de Fernando, donde sus actores exteriorizan todo lo humano, lo cercano, lo natural y donde Raúl Pérez Ureta, con su fotografía, nos expone sin tapujos, las miserias, la ruina, la falta de lo esencial, en la que una sociedad como la cubana, sigue viviendo en pleno siglo XXI.

  
        Me quedaré para finalizar con una frase que durante el discurso, mirando directamente a la cámara, cita Yusisleydi. “A mí no me da miedo morir, lo que de verdad me da miedo es que nada cambie”
          Recomendable para cinéfilos sociales.

          Mi nota es 7


ESTRENO EN ESPAÑA: 7 de Abril

          REPARTO: Jorge Martínez, Patricio Wood, Gabriela Ramos, Critian Jesús, Coralita Veloz, Ana Gloria Buduen, Yailene Sierra, Carmen Solar.

          PRODUCTORA: Coproducción Cuba-España; Besa Films; Instituto Cubano del Arte e Industrias Cinematográficos (ICAIC), Wanda Visión S.A.

          DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Wanda Visión S.A.

miércoles, 12 de abril de 2017

NEGACIÓN: CRÍTICA DE CINE

          Negación de, Mick Jackson (El guardián de la memoria). Una obra escrupulosamente correcta y magníficamente interpretada.

          En 1996 Deborah Lipstadt (Raquel Weisz) historiadora norteamericana, es denunciada por difamación por David Irving (Timothy Spall) historiador inglés, al llamarle mentiroso, negar  el exterminio de los  judíos en Auschwitz y atreverse a afirmar que Hitler era inocente de las acusaciones que ella difunde en su libro “La negación del Holocausto”.

          Deborah deberá enfrentarse a un juicio con unas normas judiciales muy diferentes a las norteamericana y donde el bufete de abogados la obligan a cumplir determinadas condiciones, si quiere que ellos la defiendan: Que el juicio no tenga jurado. Que ella no declare ni hable nada durante el transcurso del proceso, ocurra lo que ocurra, y que no se llamará al estrado a testigos de aquel genocidio; serán estos, algunos de los puntos más importantes, a los que deberá acceder. Deborah tras dudar, acepta y tras aceptar mientras transcurre la vista, volverá a dudar.   

          Negación se basa en hechos reales y en la obra antes mencionada de Deborah Lipstadt, historiadora norteamericana, escritora, judía y  especializada en el genocidio nazi, cuyo guion corre a cargo de: David Hare. Una obra que contiene importantes ingredientes: drama, tensión, dolor de un pasado, esperanza en un presente y todo bajo la bandera y la búsqueda de la verdad.

          Cuando uno lee la sinopsis, lo primero que puede pensar es: “otra película del holocausto”, y aunque en efecto, el holocausto es el eje central  que une toda la historia, esta cinta va mucho más allá. Un juicio sin jurado, donde astutamente Mick Jackson, en una comedida y acertada dirección, crea su propio jurado: Los espectadores.   

          Una obra donde queda claro que no busca la defensa de los personajes, de quién posee la verdad, si Deborah o David, sobre las acusaciones vertidas en un libro; sino que en juego está la credibilidad ante la sociedad, de si existió o no el holocausto.

          Rachel Weisz está simplemente magnífica, adorable y creíble en su papel de Deborah. Timothy Spall, interpretando a David, se nos presenta  como un ser despreciable, miserable, rencoroso y con unos ideales tan falsos, como su propia defensa. Se le odia.  Ejecuta una perfecta interpretación. Pero no es menor el trabajo del resto de los secundarios, destacando entre ellos a  Tom Wikinson, en el papel del abogado británico, Richard Rampton.

          El juego de planos en las escenas del juicio, las miradas, los gestos, los silencios y las palabras; la magnífica fotografía de Haris Zambarloukos, junto a la banda sonora de Howard Shore, crean un conjunto de atmósferas por momentos inquietantes, convirtiendo al espectador en ese miembro de un tribunal inexistente que dictaminará en su mente, su veredicto personal.

          Recomendable para amantes de la historia y del cine en general.

          Mi nota es: 7,5

          ESTRENO EN ESPAÑA: 12 de Abril

          REPARTO: Rachel Weisz, Tom Wikinson, Timothy Spall, Andrew Scott, Caren Pistorius, Alex Jennings, Jack Lowden, Will Attenborough, Michael Epp, Jack Gover, Sally Messham, Laura Evelyn, Ziggy Heath.

          PRODUCTORA: Coproducción GB-USA; Krasnoff/ Foster Entertainment/ Participant Media/ Shoebox Films.

          DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Entertainment One Films Spain

martes, 11 de abril de 2017

ÓRBITA 9: CRÍTICA DE CINE


          Hatem Khraiche debuta en la dirección en una coproducción entre España y Colombia, Órbita 9. Un thriller retro-futurista.

          Una nave espacial sufre un fallo en el sistema de oxígeno. El ordenador de abordo comunica a su única tripulante, Helena (Clara Lago) que en breve recibirá la visita de un técnico, el primer ser humano que conocerá en persona, pues ella ha nacido en la nave en la que viaja por el espacio. Helena rectifica al ordenador que será el tercero, pues los dos primeros fueron sus padres, que se sacrificaron para que ella pudiera sobrevivir con el oxígeno que quedaba en el interior de dicha nave, hasta poder repostar.

          Pero la verdad es otra muy diferente, un engaño que le mostrará Álex (Álex González) el técnico, tras enamorarse de ella. En realidad, Helena, como otros elegidos, forma parte de un proyecto científico. Un estudio para conocer el comportamiento humano fuera de nuestro planeta. La supuesta nave espacial, no es más que un habitáculo denominado, Órbita 9, situado en un lugar de la Tierra, controlado por el ejército y científicos. Las decisiones que tomen los dos protagonistas, desde ese momento, serán decisivas para el futuro de la humanidad, motivo que provocará al ejército, ir en su busca

          Hatem, con guion propio, dirige una historia romántica, en un mundo hostil. Un planeta, el nuestro, que se precipita al desastre medioambiental, por el trato que le estamos ofreciendo. Un film de denuncia social ante un futuro incierto que  busca la reflexión y hacernos preguntas como: ¿Qué ocurriría si llegara un día a suceder algo parecido?  ¿Podríamos sobrevivir fuera de nuestro planeta? ¿Reinaría el estado de excepción? ¿Hasta dónde el ser humano perdería su libertad? Preguntas y situaciones donde Khraiche, deja demasiados flecos sueltos y sin profundizar en ningún tema en concreto, pero curiosamente la cinta, funciona como entretenimiento.

          Las interpretaciones de la pareja formada por Clara Lago y Álex González están perfectamente ajustadas a sus personajes, personajes necesitados de afecto, deseando alejar la soledad que les rodea y buscando compartir juntos, cada instante.  Helena y Álex,  vivarán toda una aventura, para aferrarse al amor que ha surgido entre ellos.

         Un thriller  rodeado de una atmósfera absorbente, claustrofóbica, fría, desnaturalizada… bajo la mirada de Pau Esteve Birba con su magnífica fotografía. El diseño de producción de Íñigo Navarro, nos sumerge a través de sus decorados y escenarios naturales, en un mundo implacable y desolador, rodados en ciudades tan diferentes como: Bogotá, Medellín, Vitoria o San Sebastián. No podemos olvidar otro de los elementos importantes como es la banda sonora a cargo de, Federico Jusid.

Mi nota es 6

Interesante para amantes del género de Ciencia Ficción y Catástrofes.

ESTRENO EN ESPAÑA: 7 de Abril

REPARTO: Álex González, Clara Lago, Belén Rueda, Andrés Parra, Kristina Lilley, John Alex Castillo.

PRODUCTORA: Cactus Flower Producciones/ Mono Films/ Movistar+ / Dynamo/ Orbita9 Films AIE

DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Filmax.

lunes, 10 de abril de 2017

EL OTRO LADO DE LA ESPERANZA: CRÍTICA DE CINE


          El otro lado de la esperanza, es el nuevo trabajo de Aki Kaurismäki (Luces al atardecer), donde la esperanza no es lo último que se debe de perder, sino que para muchos es el salvavidas, para sobrevivir.

          Un Joven sirio, Khaled (Sherwan Haji) huye de la guerra en su país. Lo ha perdido prácticamente todo, salvo a su hermana, a la que está buscando sin descanso. Agotado decide esconderse en el interior de un barco para descansar, quedándose dormido; al despertarse se percata de que está rumbo a Finlandia.

          Es sorprendido por un trabajador del barco, quien le ayuda y para no ser descubierto de nuevo, le oculta entre el carbón. Khaled  llega a Helsinki y tras darse una ducha en unos baños púbicos, acude a la policía para pedir asilo en el país. Tras el juicio, rechazan su petición y de nuevo recibirá la ayuda de una asistente social, para no ser repatriado.

          Por otro lado Wikhström (Sakari Kuosmanen) abandona a su mujer buscando un cambio de vida, tras una noche jugando al  póker y ganar una gran suma de dinero, decide coger el traspaso de un restaurante, con unos personajes muy peculiares (El portero, el cocinero y la camarera). Khaled y Wikhström coincidirán cuando este último va a tirar la basura y lo encuentra entre los cubos, agazapado.

          Kaurismäki crea un drama templado, “invitándonos” a vivir junto a los personajes que ha creado en su nueva obra, entre la crueldad y el dolor de tener que abandonar el país natal, con la incertidumbre de como serán recibido en el nuevo. Y digo invitar, porque desde el instante que nos presenta a los  personajes, los "adoptamos" como nuestros compañeros de trabajo, vecinos o amigos.

          Una historia de hombres y mujeres resignados por el destino que les ha tocado vivir, pero con el convencimiento de no tirar nunca la toalla, pese lo que tenga que pasar, sorteando todas las trabas que se van a encontrar en el camino, luchando por aprender el nuevo idioma, evitando los enfrentamientos con quienes desean provocarles o echarles de la nueva tierra, a la que han llegado en son de paz. Todo esto convertiría a cualquier película en un dramón de salir de la sala a lágrima viva, pero Kaurismäki está muy lejos de crear una obra así; nos presenta unos personajes, que si bien en sus gestos, miradas y palabras, se observa todo lo dicho, él los carga de optimismo y conformismo, arrastrándoles a situaciones que raya en lo surrealista por momentos y con golpes de humor irónico, que despiertan sonrisas y alguna carcajada, a la vez que te conmueve por dentro.

          Cada personaje está tallado con sumo cariño, con suma delicadeza, causando en el espectador el deseo de saber más de ellos, de integrarte más en su mundo, de conocer más profundamente sus vidas e intentar sumarte a su lucha.

          La adversidad los ha unido y ellos se protegerán como si fueran miembros de una misma familia, mostrándonos esa superación en la convivencia, buscando la solución cuando surge un problema, creando un fuerte lazo de amistad y dejando que todo fluya, sin preocuparse más de lo necesario. Unos personajes demasiado vivos, que te duele pensar que alrededor nuestro, muchos están viviendo de la misma manera o en  situaciones peores.

          Destacar, además de todo lo dicho,  la maravillosa banda sonora, que más que nunca se convierte en personaje secundario, pues no es solo la compañera en el desarrollo de cada escena, sino que vemos a los músicos e intérpretes integrados en la acción de la obra, con sus instrumentos, algunos autóctonos, tocando en la calle, en los bares, en los refugios.

          Una obra inteligente, que nos hará pensar sin ponernos entre las cuerdas. Una obra sincera, que nos despertará sonrisas y meditar a partes iguales, una obra simplemente, necesaria.

          Mi nota es un 8,5

          Muy recomendable para el público en general

            ESTRENO EN ESPAÑA: 7 de Abril

          REPARTO: Sherwan Haji, Sakari Kuosmanen, IIkka Koivula, Nuppu Koivu, Janne Hyytiäinen, Simon Al-Bazoon, Tommi Korpela, Kati Outinen, Kaija Pakarinen.

          PRODUCTORA: Sputnik

          DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Golem Distribución.