Hoy
es uno de esos días que al despertarme me he acordado de ti, de los momentos
vividos, de los lugares en que nos hemos encontrado o visitado, de los sueños que hemos compartido,
de las risas que hemos lanzado al espacio y de las lágrimas contenidas y vertidas.
Hoy
al despertarme me he acordado de ti, de las tertulias junto al humeante café,
de las conversaciones donde en muchas ocasiones no estábamos de acuerdo, pero
jamás nos enfadamos, porque sabíamos que era nuestra forma personal de pensar.
Hoy
al despertarme me he acordado de ti, de la complicidad de nuestros actos, de
nuestros amoríos, de nuestros aciertos, fallos o decepciones.
Hoy
al despertarme me he acordado de ti, descubriendo que en el pensamiento la lejanía no existe, pues
los sentimientos y la energía nos acercan.
Hoy
al despertarme me he acordado de ti, de tu aroma, de tu mirada, de tu sonrisa,
de tus movimientos, de esos gestos que te hacen único.
Hoy al despertarme me he acordado de ti. Sí, siempre me recuerdo de ti, aunque no sea con tal intensidad como me sucede hoy, y hoy más que nunca me gustaría sentirte cerca de mi, para
abrazarte y decirte: Que eres muy especial en mi vida.
Hoy
al despertarme, me he acordado de ti, sí, de todos y cada uno de los amigos que
forman parte de mi existencia, y de la familia cuya sangre corre por mis venas; estado siempre de una forma u otra presentes y atentos a esos momentos
precisos que todos necesitamos.
Gracias
por estar ahí, por existir y formar parte de mi vida. Hoy y siempre, me acordaré de ti.
Javier Sedano
Javier Sedano