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lunes, 20 de abril de 2015

EL LEÓN COME GAMBAS QUE "HUMILLÓ" A SU CREADOR.


LEÓN COME GAMBAS
 MasterChef se ha convertido sin ningún tipo de duda en uno de los programas estrellas de  TV1 y el motivo ha sido su formato. Directo, atractivo y donde los cocinitas, entre los que me considero, podemos aprender algunos trucos, aunque cada vez sean menos, pues estos se los van reservando para el gran  Merchandising que se han montado, que no es poco.

La primera edición podríamos decir, que tras lo visto hasta ahora de esta tercera edición y la segunda ya emitida, resultó muy light, pero a mi gusto la mejor de todas. Era un programa fresco, sin pretensiones más allá de captar al espectador y mostrar que hombres y mujeres estaban interesados cada día más en “invadir” las cocinas y enfrentarse a un horno o una vitrocerámica. Dejar el ya tan socorrido microondas. Atreverse a invitar a amigos y familiares a comer o cenar y desplegar sus artes culinarias, o simplemente para el deleite de uno mismo.

En la segunda edición ya apuntaban maneras de que el programa, además de todo lo que había ofrecido, debía provocar otros estímulos en los espectadores para copar el índice de audiencia, e incluyeron a un “actor” como fue Gonzalo y como muchos luego decían cada vez que pasaba un programa. “Otra nueva gonzalada”  Me quedé con la intriga y la sospecha que ese personaje, que se hizo odioso por el trato que dispensaba a sus compañeros e incluso al jurado, no era ni más ni menos que un Topo. Sí, porque está claro que estos programas tienen un proceso de selección muy exigente, en todos los sentidos y no sólo en el de saber más o menos de cocina.

Al finalizar la segunda edición felicité a todo el equipo de este programa en este mismo blog, pues cada semana me tenía enganchado a la televisión, hasta el punto que también he visto las ediciones Junior.
LAS COCINAS DE MASTERCHEF 2015

Reconozco que he aprendido algunos trucos y más que me gustaría aprender, pero sospecho que en esta edición va a ser más espectáculo que aprendizaje. Ya lo dejan claro "Si quieres saber más de…” compra el libro, apúntate a las clases On-Line etc, etc, etc.

Los tres Master a mi juicio, han pasado de ser maestros cocineros a convertirse, también, en estrellas mediáticas de la televisión y el problema es que se lo han creído, en mayor o menor medida, cada uno de ellos. Algunas de sus palabras han pasado de ser consejos, para convertirse en humillaciones al más puro latigazo medieval.

La semana pasada una vez más todos los aspirantes lucharon por conseguir continuar en el programa y un día alzarse con el gran trofeo. Entre esos aspirantes se vislumbran algunos que van a dar mucho “espectáculo” por su forma de ser y no precisamente ante los fogones, como lo ha dado el  joven Alberto, que me irritó hasta el máximo y estaba claro que ese era el cometido del guionista del programa, para llegar al desenlace que todos vimos y donde una gran mayoría sentimos vergüenza ajena. Pero esa vergüenza no sólo la provocó él, sino también alguno de sus maestros.
ALBERTO, SAMANTHA, PEPE Y JORDI

En esta ocasión el problema no radicaba en Alberto, pues si él estaba en esta edición es porque pasó todas las duras pruebas, la criba con la que estos castings “castigan” a quienes quieren hacerse merecedores de formar parte de un reality sea de las características que sea. Estaba claro desde el primer momento que Alberto no era un buen candidato y los Chef lo sabían, pero el espectáculo estaba servido y lógicamente en ese show debía existir un "malo" y esta vez no fue, a diferencia de lo que muchos pensaban, Jordi, que también le dio caña, sino Pepe, y creo que se pasó mucho “Esto es un insulto a mi inteligencia”Fuera se han quedado 15.000 personas” Con todo mi respeto y admiración por tu saber hacer, y porque siempre me has caído muy bien, pienso sinceramente que te has pasado un poco y que la modestia es un don, que te faltó esa noche. Con respecto a la segunda frase, completamente de acuerdo. A él nunca le debisteis dejar participar.

Vosotros que habláis y abogáis siempre porque un Chef debe de ser modesto, en ocasiones se os olvida que vosotros sois Masterchef y no me vengáis con que es una forma de aprendizaje, el ser duros, que estoy de acuerdo con la disciplina, pero no de esa  manera. La agresividad en las palabras, los latigazos verbales, nunca han sido buenos consejeros para nada y menos para humillar a un concursante ante millones de telespectadores. Recordad que vosotros SOIS EL EJEMPLO, EN EL QUE EL ALUMNO DESEA UN DÍA VERSE REFLEJADO, COMO PROFESIONAL. SOIS SUS MAESTROS. Mal vamos, mal.

LAS LÁGRIMAS DE ALBERTO
Alberto nunca debió pisar el programa, eso está claro, pero la culpa de que estuviera ahí, entre otros, se la debe a vosotros. Sí, lo habéis conseguido  “El león come gambas” pasará a la historia de la televisión y romperéis índices de audiencia. Tal vez se repita el programa y en las redes sociales se hablará de Masterchef más que nunca ¿Pero ha merecido la pena tanta mala baba? Ni siquiera tras dichas palabras cumplisteis con el protocolo de hacer que deliberabais y eliminarle. No. La humillación precisaba de una crucifixión total para que las redes sociales saltaran por las nubes.

Daré una nueva oportunidad al programa, lo seguiré viendo y espero que no se repitan escenas tan grotescas como la vivida durante ese programa. Es un programa de cocina y los amantes a la cocina, aunque seamos unos aprendices entre nuestros fogones, queremos eso. Ver cocinar, no un reality de como humillar a la gente. Para eso ya existen otro programas en otras cadenas.

NO TODO VALE EN EL ESPECTÁCULO Y MÁS CUANDO SE HACE DAÑO A UNA PERSONA.