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| SERENA MARTÍNEZ DAI |
Hoy hasta nuestro blog llega una
nueva escritora que nació un 22 de abril de 1975 en Madrid. Viendo sus estudios
y especialidades, deja claro que la dedicación por los demás es una de sus
prioridades.
Hoy hablo con Serena Martínez
Dai.
Serena, para ir entrando en materia, siempre hago
algunas preguntas personales, que no íntimas, para que los lectores os vayan
conociendo.
J.S.- ¿Cómo era Serena de niña?
S.M.-
Pues…una niña con un mundo
interior muy vulnerable, rico en imaginación y creatividad pero poco entendido
en el entorno escolar, creo que siempre me sentí más mayor de la edad que
tenía, con unas inquietudes distintas e incompatibles con el sistema educativo
de aquel entonces. El bulling no es algo nuevo y yo lo viví en primera persona…
J.S.- Familia, amor, amistad.
¿Cuál sería el orden para ti y por qué?
S.M.- Familia, amor, amistad, aunque para mí no
existe orden, todas se encuentran en el mismo nivel ocupando su espacio.
J.S.- ¿Cuáles eran los sueños de
Serena en su adolescencia?
S.M.- Dedicarme a algo creativo o
relacionado con el campo social. Lo que soy hoy por hoy y lo que hago es un
sueño cumplido, como lo fue también ser madre.
J.S.- Licenciada en
Psicopedagogía y Diplomada en Educación Social. ¿Qué te llevó a adentrarte en
esta profesión?
S.M.- Realmente la “ayuda” a los
demás. En realidad mi orientación eran las bellas artes y la enfermería, para
enfermería exigían (por aquel entonces) una nota de selectividad muy alta y
decidí irme al campo social y humanista, que también me gustaba mucho.
J.S.- Pero ahí no termina tu
experiencia académica: Máster en Psicopedagogía Clínica. Especialista en
Psicoterapia y psicopatología y especialista en Inteligencia Emocional. ¿Eres
de las que piensas que en algunas profesiones, nunca se debe dejar de
investigar?
S.M.- Para mí es vital seguir
aprendiendo, no es algo que decida, es sólo una necesidad vital, el aprendizaje
no tiene límites, los límites los pone nuestra mente que cohíbe y limita por
desmotivación .Uno no se puede parar en ningún ámbito laboral, no puedes decir
ya tengo un título y eso me hace creer que lo sé todo. La inquietud para seguir
aprendiendo tiene que ver con la nutrición psico-emocional y la falta de ego
para reconocer que hagas lo que hagas, todos somos eternos aprendices de cualquier
materia: siempre principiantes.
J.S.- ¿En qué
consiste un trabajo psicoterapéutico?
S.M.- El trabajo
psicoterapéutico, es un acompañamiento con la persona “el cliente” (paciente)
para el autoconocimiento y el equilibrado de sus emociones. La psicoterapia
desenreda la madeja de la persona (que por diferentes circunstancias) no
encuentra la forma de desliarse, y tampoco sabe cómo, o qué le ocurre. La
psicoterapia es una escucha, sin juicios donde uno libera, se reconoce y actúa.
J.S.- En tu página web comentas
que una de tus vocaciones son las artes, las letras y todo aquello que tenga
que ver con la creatividad y la ayuda a los demás. Curiosamente al leer este
texto, me ha recordado a otra persona a la que tuve la suerte de entrevistar
hace un tiempo y que aunque nos hemos visto pocas veces, se ha convertido en un
amigo. Hablo de tu hermano Yofer, quien desprende una gran energía cuando se
está junto a él. Él es cantante y productor y tú ahora te inicias en el mundo de la
literatura, y ambos tenéis como profesiones, la dedicación a los demás. ¿Es una
casualidad o es herencia familiar?
S.M.- Creo que portamos de serie una gran
sensibilidad, y que han sido potenciadas por
las vivencias de la infancia, junto a una familia orientada a lo
artístico. Mi madre nos ha aportado unos grandes valores y mi padre esa vena independiente y bohemia.
J.S.- Actualmente realizas
consultas en gabinete y online. Me gustaría que nos hablases de la diferencia
entre atender a un paciente/cliente de forma personal o a través de internet, y
para ti cuál resulta más estimulante.
S.M.- No encuentro grandes
diferencias, la diferencia mayor es el contacto presencial de la terapia, pero
el grado de intimidad de la consulta se mantiene igualmente a través de la vídeo
conferencia; para el cliente es más cómodo. Me gustan las dos, internet da pié
a que estés donde estés, puedes tener a tu psicoterapeuta a solo un clic. No
hay que tener miedo a incorporar nuevas formas de comunicación, ni para el
cliente ni tampoco para el psicoterapeuta, se trata de adaptarse a la vida y a las nuevas formas de comunicación.
J.S.-
Continuando con algunos temas de los que hablas en tu Web, haces mención a las
Escuelas, donde consideras que es preciso un cambio coherente. ¿Nos puedes
hablar de esta necesidad por focalizar la atención en el entrenamiento de los
valores?
S.M.- La escuela que tenemos en España es una
escuela obsoleta, mal organizada y desvinculada de lo que significa motivación
y aprendizaje. Me da la sensación que este tipo de escuela esta creada para no
enseñar lo que realmente importa y no es otra cosa que prepararse para la vida.
La educación en valores es eso. Esta escuela no es vanguardista, no es
emocionante, ni estimulante, es una escuela dormida, acomodada, fomentadora de
las diferencias por su estructura y evaluación final vertical. La educación es
horizontal donde todos estamos en la misma línea unidos por la motivación de
aprender
y el entusiasmo
por crecer y compartir, no competir.
J.S.- ¿En qué
tipo de tratamientos Psicoterapéuticos estás especializada?
S.M.- Me especialicé
en clínica, pero en realidad en la
práctica aúno y adapto muchos enfoques en beneficio del cliente. En especial practico
psicoterapia orientada al cliente, (que no paciente) se le denomina cliente, porque éste es un término mayormente activo que el que implica
paciente que asume mayor pasividad en la terapia. Si me preguntas ¿qué enfoque aprecio más?, sin
duda el enfoque humanista.
J.S.- ¿Qué
trastorno del ser humano, consideras que es el más preocupante en la sociedad
en que vivimos?
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SERENA MARTÍNEZ DAI y SU PRIMERA
OBRA ESCRITA |
S.M.- Los más preocupantes son la depresión y la ansiedad, fruto de una sociedad a mi parecer
muy enferma. La base de todos los males está relacionada con lo que hablábamos
antes de las escuelas: no somos educados desde pequeños para afrontar la vida y
la impermanencia de la misma. Y la presión social incide en que potencia la superficialidad, la vía rápida
y la insatisfacción constante y como he dicho antes la competencia desleal en
todos los ámbitos. La falta de valores en los medios de comunicación y el culto
al consumismo resquebrajan y desequilibran el mundo psicológico de las
personas. En mi libro dedico un espacio especial a este tema psicosocial.
J.S.- Muchos son
los temas que vas tratando en tu página y cada uno de ellos más interesante,
pero dejaremos para aquellos que se sientan interesados, la web al final de
esta entrevista. Ahora vayamos al libro
que has escrito “Cinco Pétalos” con la Editorial Círculo Rojo. ¿Por qué
escribir este libro y qué consideras que aporta a los ya publicados sobre este
tema?
S.M.- Éste libro
ha sido creado para difundir de una manera sencilla, práctica y personal el
mundo de las emociones y la psicología social. Se ha escrito mucho sobre la materia,
pero mi libro es ligero en todos los sentidos, es directo, sin recovecos y muy
entendible para los que desconocen la materia e interesante para los que la conocen,
es un libro personal cuyo objetivo es que conecte con los demás y sea
entendible para todos .
J.S.-
El Coaching es un tema del cual se está
escuchando hablar mucho últimamente, donde incluso cada año surgen cursos
enfocados a dicha disciplina. ¿Consideras, como algunos opinan, que hay gente
no preparada, que está impartiendo este tipo de cursos y por tanto más que
ayudar, pueden desestabilizar a la persona?
S.M.- El
coaching es una herramienta más para descubrirnos, considero que debería ser un
complemento o especialidad de las personas que aportan una trayectoria
educativa y laboral en relación a la psicología. Por si sola pienso que es una
práctica peligrosa. Hay muchos profesionales que han acomodado esta práctica, pero
me temo que hay mucho más marketing y “venta de producto” que de contenido real.
Ninguna técnica me parece mal, todo depende de lo que haya detrás para que se
sustente.
J.S.- Incluyes
el subtítulo de “La esencia de la inteligencia emocional y social. ¿Nos puedes
ofrecer un pequeño detalle, del significado de esta frase?
S.M.- La esencia
siempre es (a mí parecer) lo básico, lo que desprende cada persona o
circunstancia al final, con lo que nos quedamos… el aroma real .Con ello hago
relación a lo importante de la inteligencia emocional y social partiendo de lo
más básico para reconocerlo y ponerlo en práctica.
J.S.- Me ha
llamado la atención la frase con la que defines el equilibrio de la autoestima
“Ni verte como un gato, ni tampoco como un tigre” Muchas personas son las que
confunden autoestima con el ego. Aquí va una doble pregunta. ¿Qué importancia
tiene la autoestima en el ser humano? y ¿qué problemas origina un ego mal
controlado?
S.M.- En la vida
lo más complicado es encontrar el equilibrio. Solemos ir bandeándonos entre los
extremos. La autoestima es el pilar fundamental para que aun golpeados, sigamos en pie. Sin autoestima no puede ir bien ningún campo,
puesto que todo
lo demás se construye bajo los pies de la expresión: "me amo –me acepto", y sin
ello nada funciona bien.
El ego es un mal
enfoque de lo que significa querernos. Ego y autoestima no van de la mano. El
ego tiene una actitud de desconsideración hacia los otros y siente un cariño superficial hacia
uno
mismo.
La autoestima (en cambio) reconoce a los otros
porque el individuo que la porta es capaz de reconocer en sí mismo el amor y la
compasión conectado con los demás. Autoestima es profundidad, ego es superficialidad.
J.S.- Son muchos
los temas que podríamos abordar en esta entrevista, pero también considero que
deben de ser las personas interesadas, las que se acerquen a tu página y a tu
primera obra.
Me quedaré con
otra frase “Ningún copo de nieve es igual a otro, aunque externamente lo
parezca” Y como siempre, mi última pregunta es. ¿Qué te hubiera gustado que te
preguntara y no he hecho?
S.M.- ¿Dónde podemos encontrar
tu libro y tus servicios?
Destacaría por encima de todos a Eusebio Poncela y a la gran Irene Escolar. Rodolfo Sancho correctísimo en su papel de Fernando al
igual que Fernando Guillen Cuervo como Fuensalida; y entre las nuevas incorporaciones a esta película, me ha sorprendido la corta por elegante interpretación de José Coronado en el papel de Maximiliano de Habsburgo. 
