Hubo un tiempo en que el anuncio de La Lotería de Navidad pasaba
desapercibido, hasta que se atrevió a jugar y coquetear con otros ya clásicos
de nuestra televisión, como el del “Vuelve a casa por navidad de Turrones el Almendro” o el más
que mítico de todos ellos “las chicas burbuja de oro de Freixenet” y funcionó.
La originalidad con la que cada año se presentaba ante los
telespectadores, llegó a convertirle en la ante sala de la Navidad. Cuántos
hemos sido los que al ver el anuncio por primera vez en la televisión hemos
dicho… ¡“Ya comienza la navidad”! Pero los años pasan factura y el buscar cada año presentar un anuncio más
original que el anterior, y el anterior
al anterior y el anterior, al anterior del anterior y así hasta llegar al
primero de ellos, sucede que si no se
controla bien el producto, el resultado cae en picado.
Este año me apetece, además de dar mi opinión sobre el nuevo anuncio, hacer historia y para ello nos tenemos que
remontar al año 1998, cuando por primera vez este anuncio cobra una gran
popularidad entre los telespectadores, llega el
carismático “Calvo de la Lotería” que no era otro que el actor inglés
Clive Arrindell. Nos cautivó en un anuncio en blanco y negro, con reminiscencias
de otros tiempos, con estampas clásicas y con hadas o sin ellas, pero siempre
terminaba soplando su mano ante la cámara y apareciendo los números mágicos;
fue tal el éxito que nuestro querido calvo, nos acompañó hasta el año 2005.
En el 2006 comenzaba con una pregunta “¿Qué es lo que toca en
Navidad?” El narrador nos respondía todo lo que tocaba hacer en esas
fechas, por ejemplo: viajar, reencontrarse, recordar, regalar… así continuaba
hasta que al final decía “Y toca jugar a
la lotería”
En el 2007 “La suerte era de
todos”: De los pequeños y de los grandes. De los que están cerca y
de los que vienen de lejos. De los que aman la tierra y los que piden la luna…
Para rematar con “De los que juegan todo el año y de los que juegan por
Navidad”
2008 “En Navidad todos somos más humanos”, hasta los más fríos… Hasta
los de cartón piedra… Nos animamos a salir del cuadro… A saludar al de
enfrente… Finalizaba este spot con “Lotería
de Navidad, el toque humano de la suerte”
En el 2009 Nos proponían que había muchas navidades:
La familiar, la moderna, la nevada, la soleada, la afortunada, la ilusionada…
Dejando la coletilla final de “Hay mucha
navidades, pero todas están aquí” refiriéndose al boleto de la lotería de
Navidad. Cuatro anuncios sin grandes
pretensiones, familiares, sencillos y que funcionaban muy bien, porque el que
más o menos, se identificaba con las escenas mostradas y el eslogan.
En el 2010 da un nuevo giro a la fantasía y aparece la Diosa de la fortuna coqueteando con los
personajes de cuentos célebres: Alicia en el País de las maravillas, Peter
Pan, La Cenicienta… para llegar a la
conclusión de que en Navidad todo es
posible, incluso de que un buen día nos visite la Diosa Fortuna, sólo hace
falta jugar.
La fantasía continuará dos años más, en el 2011 y 2012 con “La Fábrica de Sueños” una idea
original de la agencia Grey España. Algo que me sorprendió y creo que a muchos
espectadores, es que La Diosa Fortuna no estuviera otros años presente. Podría
haber sido el relevo perfecto a nuestro querido calvo y a despertar mucho más
la imaginación, pero la fábrica de sueños hizo acto de presencia y arrasó.
Aquellos niños recorriendo las calles en la noche, capturando los sueños de
todos los que poseían un décimo y depositándolos en el gran bombo de la lotería,
nos emocionó y al año siguiente los niños fueron reemplazados por adolescentes,
donde esos sueños eran capturados con sus flechas terminadas en ventosas, al
final los sueños los lanzaban al espacio cerciorándose de que todos los números
estuvieran allí, luego, una vez más caerían al bombo. A mi juicio el más emotivo
y espectacular de todos.
Y llega el 2013 y toda la magia, todo el espectáculo, todas las escenas
familiares que habían pasado durante esos años anteriores, todos los
maravillosos eslogans; se desploman, nos dejan con la boca abierta y por
primera vez surgen las grandes críticas
porque nadie entiende la tomadura de pelo del anuncio: “Pon tus sueños a
jugar” será la canción que interpretarán delante de un gran árbol de
la lotería frente a los habitantes de un pueblo: Montserrat Caballé, David
Bustamante, Rafael, Marta Sánchez y Niña Pastori. Una canción ñoña. Una puesta
en escena que nos dejó a todos sin palabras. Unos planos que más que provocar
emotividad, daban ganas de estrellar un vaso contra la pantalla de la
televisión. Unos gestos grotescos en los personajes. Un anuncio para olvidar
que fue lo que gracias a dios sucedió el pasado año 2014. Ese café que cuesta
21€ no se olvidará tan pronto, porque ese café, ese sobre granate con el nombre
del cliente, esos dos personajes mirándose el uno al otro, en unos tiempos en
los que todos estamos pasando la maldita crisis, nos representaba a todos, a
todos soñando de verdad que la Diosa Fortuna tocara nuestra puerta.
Llegamos al 2015. Sois unos
valientes si me habéis leído todo lo que he escrito, pero este año me apetecía
hacer este recordatorio. En este 2015, como decía, nos vuelven a sorprender, no
sé si para bien o para mal, pero desde luego que no considero acertado
presentar el anuncio a través de una animación, de este estilo. No hubiera
visto mal jugar con animación y realidad, pero dibujos animados solos…
La calidad de la animación me
parece fantástica. El guión un tanto manido, volver a pensar en la
soledad, volver a pensar en el despiste, volver a pensar en la persona que
nadie ve, porque trabaja a unas horas donde todos están durmiendo; me suena a
más de lo mismo y creo que esa ha podido ser la idea. No profundizar en la originalidad del texto e intentar descargar todo
el peso, en los dibujos animados.
A mi gusto le falta garra, le falta emoción porque en realidad de lo que carece el anuncio, es la empatía.
Que quede claro que no le quito la gran calidad a la animación, pero que consiga que el espectador en unos segundos
sienta empatía con el personaje, es muy complicado, porque la mente nos está
mostrando un dibujo animado y no a una persona de carne y hueso. A mí, que soy
un amante de la animación y que voy a ver películas de este género al cine y
que incluso algunas me han hecho llorar, este anuncio me ha dejado frío.