LOS OJOS DE TAMMY FAYE: CRÍTICA DE CINE

Los ojos de Tammy Faye, está dirigida por Michael Showalter y guionizada por Abe Sylvia. “Chastain camina por la senda del Oscar”

La joven Tammy Faye Bakker (Chandler Head), se crió en el seno de una familia de predicadores evangélicos, donde su madre, Rachel (Cherry Jones), tocaba el piano en la iglesia, mientras su padre predicaba. Pronto nacerá su devoción y el deseo de ser predicadora.

Tammy (Jessica Chastain) se casó con Jim Bakker (Andrew Garfield), su amigo y compañero de estudios. Comenzaron a predicar desde muy jóvenes y crearían su propio Show, un programa de televisión cristiano, conocido como The PTL Club, que les llevaría a la fama durante los años 70 y 80.

El comediante, actor, guionista, productor y director, Michael Showalter, estudió en la Universidad de Nueva York,  uniéndose al grupo de sketches cómicos “The New Group”. Se graduó en la Universidad de Brown. Tras finalizar sus estudios, el grupo al que pertenecía cambió de nombre a “The State”, creando videos cortos para un programa de MTV llamado “You Wrote It, You Watch It”, presentado por Jon Stewart. Ha trabajado como actor en series, telefilmes y películas, guionista de televisión y debutando en la dirección junto a otros compañeros con la serie “Stella Shorts”  1998/2002 y en solitario con “Baxter”. Prosiguió con “Hola, mi nombre es Doris”2015, “La gran enfermedad del amor” 2017, “Ray Romano: Right Here, Around The Corner” 2019,  “los tortolitos” 2020 y el pasado año estrenó “Los ojos de Tammy Faye” 2021. Para televisión ha participado en series como “Stella” en 2005, “Michael &Michael Have Issues”2009, “Michael Showalter´s the Making of…” 2010, “You´re Whole” 2012/13, “Wet Hot American Summer: First Day of Camp” y “Grace and Frankie” en 2015, “Search Party” y “Love” en 2016, “Wet Hot American Summer: 10 años después” 2017 e “In the Sark” 2019, “The Shrink Next Door” 2021 y “The Dropout” 2022.

El filme, basado en el documental homónimo del año 2000, nos ofrece la historia de estos dos televangelistas, que crearon el Club PTL en 1974, aportando un aire fresco, desenfadado y divertido; muy diferente al de otros telepredicadores de la época. Un programa en el que incluían entrevistas y marionetas, las cuales les servían para debatir sobre temas de actualidad y en ocasiones un tanto escabrosos para la televisión de aquellos tiempos, como la sexualidad, los adelantos científicos para la disfunción eréctil o el apoyo, principalmente de Tammy, al colectivo LGTBIQ+, llegando a entrevistar en directo a enfermos de sida y activistas, como al cristiano gay Steve Pieters (Randall P. Havens). Tammy y Jim buscaban contenidos que generaran dinero rápido y fácil. Mientras hablaban al público, las líneas telefónicas no dejaban de sonar, recibiendo cuantiosos donativos. Levantaron un gran imperio hasta contar con su propio satélite, “PTL Satellite Network”, con el fin de que su programa llegara a millones de telespectadores o la creación de un gran parque temático en California del Sur, destinado a los cristianos evangelistas en el cual, según la pareja, los niños se sentirían totalmente seguro y abrazos por el amor. Pero todo aquel mundo de opulencia que les rodeaba, era humo, un castillo de naipes que se derrumbó ante los escándalos y los fraudes, siendo otros televangelistas quienes saltaron como vampiros a sus cuellos, pues habían alcanzado el poder que ellos soñaban y nunca lograron. El ascenso a los cielos y la caída a los infiernos, que tantos personajes han vivido y sufrido a lo largo de la historia, por la ambición u otros vicios humanos, les tocó a ellos de lleno.

Un drama con pinceladas de comedia o una comedia con tintes dramáticos, según se quiera ver, basándose en hechos reales entre las décadas de los 70 y 80. Un nuevo biopic, entretenido y crítico, que mostrándonos una historia del siglo pasado, hoy en día sigue presente en los Estados Unidos, en esa América profunda, en la que los televangelistas continúan predicando y enriqueciéndose a costa de la ignorancia y las buenas gentes, que les ven como los salvadores, tocados por la mano de Dios. Cuesta creer que aun haya gente que caiga en estas trampas, pero mirando un poco a nuestro alrededor, no podemos olvidar que los trileros, nunca han dejado de existir.

Toca hablar de ellos. Por un lado, ella, una estrella en la tierra. Recuerdo, sino me equivoco, que la vi por primera vez en la gran pantalla en “Criadas y señoras” 2011 de Tate Taylor, atrapándome con su magnetismo innato y tras otros trabajos maravillosos, me enamoró en “El caso Sloane” 2016 de John Madden. La diva, Jessica Chastain, cuyo poder radica en  someter y llevar a los personajes al terreno que les corresponde, haciéndolos totalmente creíbles, como en este último trabajo, merecedor de todos los premios. Totalmente irreconocible bajo el espectacular maquillaje y el vestuario que luce. Como partner, cuenta con un actor de excepción. Un actor por el que siento una gran admiración y que como tantos, lo vimos por primera vez, enfundado en las mallas de Spider-Man en “The Amazing Spider-Man” 2012 de Marc Webb,  Andrew Garfield. Tras otros trabajos, llegó el año 2016 y nos asombró con dos personajes muy diferentes: El objetor de conciencia Desmond T. Doss, en la magnífica “Hasta el último hombre” de Mel Gibson y el Fraile Sebastião Rodrigues en “Silencio” de Martin Scorsese”. En los ojos de Tammy Faye, da vida a un personaje con cierto trastorno de la personalidad, adicto al poder, al dinero y dependiente de su mujer, aunque no lo quisiera reconocer. Extraordinarias interpretaciones que están muy bien arropadas por el cuidado elenco actoral, con que cuenta el filme.

Mi nota es: 8

ESTRENO EN ESPAÑA: 4 de febrero.

REPARTO: Jessica Chastain, Andrew Garfield, Vincent D´Onofrio, Cherry Jones, Sam Jaeger, Fredric Lehne, Gabriel Olds, Chandler Head, Mark Wystrach, Lindsay Ayliffe, Dan Johnson, Louis Cancelmi y Randy Havens.

PRODUCTORA: Searchlight Pictures// Freckle Films// Odd Lot Entertainment// Semi-Formal Productions.

DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Searchlight Pictures y The Walt Disney Studios.