Sabéis que siempre que algo me inquieta, me molesta o me emociona, lo intento exponer en este blog, ya que es una forma de acercarme con mis pensamientos y manera de ser a todos vosotros/as. Sé que no es el blog más actualizado de los que existen, pero escribo o cuelgo algo, cuando lo creo conveniente y no por el hecho de cubrir un día o un espacio.
Una de mis grandes aficiones desde muy niño, como bien sabéis, ha sido siempre escribir y lo he hecho por placer, porque me gustaba exponer y además deshogarme en momentos que mi mente lo precisaba, con la escritura.
Nunca pensé, hasta hace poco más de dos años, que alguna de mis novelas fueran publicadas y menos aún, estar en contacto con el mundo editorial, y otros escritores, con los que me siento a gusto conversando y leyendo sus obras.
En mis cajones, había ya 4 novelas cuando un buen amigo me animó a que lanzara la quinta, la que muchos/as de vosotros/as habéis leído. Y no os podéis ni imaginar, la ilusión que me causó cuando desde la editorial Odisea, se me dijo que se publicaba: Tras las puertas del corazón, luego han sido otras las que la han seguido y me he nutrido de una sola cosa: los mensajes que por diversos medios, me han llegado de quienes las han leído, pero ante todo, continuando y deseando, proyectando en cada una de las siguientes obras, lo mejor que se hacer o exponer, para no defraudar a mis lectores.
Desde entonces ha llovido mucho y también, afortunadamente, el sol nos ha dado todo su calor, y como suele suceder en esta vida, no todo es oro lo que reluce.
Últimamente y con la creación de una nueva editorial de temática LGTB, se han disparado los comentarios, las críticas y los mal entendidos e incluso, frases de muy mal gusto. Lanzados como dardos envenenados por aquellas personas, que guardaban en su interior un malestar que tocaba su ego; y es que amigos/as el ego, es el peor de los consejeros que podemos tener.
He descubierto, por los comentarios leídos en foros y redes sociales, criticas de personas que mejor se hubieran quedado calladitas, pues en este mundo de escritores noveles, y qué nadie pretenda ir de Cervantes, Unamuno, Shakespeare… los primeros que se me han venido a la cabeza, ya que para llegar a la suela de sus zapatos o incluso de sus huellas, les quedaría dos vidas por vivir.
Pero hablar es fácil y criticar aún más, es nuestro deporte favorito. Señores y señoras, escritores y escritoras noveles (algunos/as, no todos/as), por favor, no critiquéis a la ligera, no habléis cuando algunos habéis estado tan directamente vinculados a otras editoriales y les habéis dorado la píldora hasta límites insospechados. No critiquéis fallos de otros compañeros, porque antes de hacerlo, lo mejor es revisar y mirarse a uno mismo y darse cuenta, que las criticas de pescadería que algunos/as lleváis a cabo, son producto de vuestra falta de ética y de no reconocer vuestros propios errores (Que se den por aludidos, los que se tienen que dar, que bien lo saben)
Si una editorial rechaza un trabajo, porque no lo considera oportuno publicar, no insultéis a la editorial cuando otra lo hace, porque entonces estaríais insultando a todas las editoriales del mundo. Y por si alguien dice que se escogen mal las obras, os diré, que todas las editoriales, sin excepción, tienen obras buenas y malas.
Si las ideas han dejado de fluir en vuestras cabezas o no os apetece escribir más, por cansancio o por cualquier otro motivo, no insultéis a otros escritores por seguir publicando. Porque no hay nada más maravillo, que un autor/a lance sus obras y las disfruten los demás.
Si existen faltas en la maquetación de un libro, no critiquéis a los maquetadotes, revisores, etc., que llevan a cabo su trabajo, porque todas las editoriales, desde la más grande a la más pequeña, cometen esos errores, en mayor o menor medida.
Hagamos por tanto, todos/as un examen de conciencia y llevemos a cabo esa maravillosa frase de: Vive y deja vivir.
Que aparezcan nuevos escritores/as en el mercado, es lo mejor que puede suceder, pues la lectura debería ser un acto voluntario y obligado en todos/as, como sucede con el comer o el dormir, entre otros ejemplos.
Que surjan nuevas editoriales, es de agradecer, porque así, el mercado será más amplio en obras y autores.
Sé que es una exposición larga, pero necesitaba decirlo y por favor, que nadie se dé por ofendido/a
Todos/as estamos en el mismo barco, hagamos que navegue con orgullo y valentía.
Javier Sedano
