Hoy me siento feliz. Al llegar a casa he abierto el correo y me he encontrado con la portada de la próxima novela, que saldrá dentro de una semana más o menos. Se trata de la tercera parte de la trilogía de Tras las puertas del corazón, que lleva como título: Rozando las estrellas.
Dicha portada ha corrido a cargo del gran ilustrador: Ismael Álvarez, como sucediera en la segunda entrega. Y me he quedado sin palabras, por la sutileza, la delicadeza y el buen hacer de este gran dibujante. Por fin un caballo blanco en una de mis portadas, ya que ellos, los caballos blancos, como bien sabéis los lectores de las dos anteriores partes, son también protagonistas, y en esta tercera y última entrega, no iban a ser menos.
Muchas gracias Ismael, por ser como eres, por tu arte y por este trabajo tan exquisito.
Para todos los seguidores de la saga, deciros que en breve saldrá la novela a la venta y deseo sea de vuestro agrado.
Es el final de la trilogía y como tal, no podían dejar de faltar todos los personajes de las anteriores, de una forma u otra.
- Nos reencontraremos de nuevo con esos personajes tan amados por vosotros: Alex y Ray
- Viviremos nuevas aventuras junto a Jaime, esta vez acompañado de Daniel, un personaje muy especial, en busca de un objeto por un motivo extra ordinario.
- Descubriremos como piensa, como vive y como sueña, Alejandro Ray, un encantador, divertido y deportista joven, que ama la vida y a su chico Daniel.
- Nos sumergiremos entre dos mundos, el terrenal y el espiritual, como ya he ido adelantando en las entregas anteriores.
En definitiva, os presento una novela cargada de amistad, amor, sentimientos, sueños, aventura y esa dosis equilibrada sobre la energía de la que también todos estamos compuestos.
Os avisaré cuando esté a la venta.
Gracias por los mensajes que me habéis enviado muchos de vosotros/as deseando saber cuando estaría a la venta esta tercera parte. Como vosotros, yo también sueño con ese día y tenerla entre las manos.
Javier, te deseo mucha suerte. Estoy esperando a tenerla para empezar a leerla. Seguro que disfruto. No me cabe duda.
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