viernes, 25 de abril de 2014

ENTREVISTA A: ALEXANDRA MCDÊRB, TRANSFORMISTA


Hoy entrevisto a un artista autodidacta. Ha contado con infinidad de personajes en sus múltiples performances a través de sus 19 años en los escenarios, aunque entre esos años, hayan existido momentos de parón por diversas circunstancias.  Actualmente se está abriendo camino con el nombre de Alexandra McDêrb. Así que en esta entrevista conoceremos la trayectoria de Alex y finalizaremos con su alter ego: Alexandra.
J.S. ¿Cómo se define Alex?

A.D. Como una persona muy perfeccionista. Aventurero, innovador. Me gusta jugar con el día y la noche y lo que me pueda ofrecer.

J.S. Observando tu piel, es como un gran mural tatuado. Muchos de esos tatuajes, tienen un significado especial, según me has comentado, por ejemplo en tu espalda tienes representados los Chakras. ¿Qué importancia le das al misticismo y la energía?

A.D. Sí, mi cuerpo está cubierto casi de tatuajes y cada uno de los tatuajes son partes de mi vida. Creo mucho en el Karma de las personas, en las energías. No sólo creo en el destino trazado en mi vida, sino que pienso que yo forjo  parte de ese destino. Lo físico y lo místico está al 50% y dependiendo de las situaciones y los momentos, le doy más importancia a uno u otro lado. Mi cuerpo me da señales y mi ángel de la guarda me dice cuando debo ir o no a algunos sitios, y te aseguro que he tenido experiencias al respecto.

J.S. Dos preguntas habituales en mis entrevistas son sobre el amor y la amistad. Hablemos primero de la amistad. ¿Qué significa para ti la amistad y cómo crees que te ven tus amigos?

A.D. La amistad es la forma de conocerse entre las personas, recíprocamente, dar y recibir  y donde cuando precisas de un amigo esté ahí y no te falle. Porque con los años descubres, sobre todo viviendo la noche, que es muy complicado tener amigos reales. Por eso, creo que  no se trata de firmar  “un contrato de permanencia” con nadie, porque nunca se sabe hasta dónde se puede desarrollar esa amistad.  Y mis amigos pienso, que me ven como una persona real, sincera. Y desde hace un tiempo para acá, mucho más. Abrazo más, soy más cercano que antes.

J.S. ¿Qué importancia le das al amor?

A.D. Mucha. Tal vez demasiado. En exceso. Descomunal… Creo que soy muy dependiente del amor y pienso que es algo negativo. Por amor, cuando era más joven, he dejado trabajos (Ahora, al madurar, priorizo el trabajo. No está la cosa para tontear), por amor he estado a punto de irme a vivir a Berlín. Por amor… Y el problema es que nunca doy con la persona adecuada. La mayoría de las veces complicadas, tanto o más que yo. Y por  si todo esto fuera poco, soy de pareja cerrada y fiel, aunque el “aquí y ahora”, que llevo tatuado en mi pecho, cada día sea más mí lema.

J.S. ¿Qué lugar ocupa la familia en tu vida?
A.D. La familia lo es todo.  Soy el tercero de tres hermanos. Para mí, mi familia es mi padre y mi madre, todo lo demás queda fuera. Es muy bestia, pero el que me conozca como Alex, sabe los motivos para decir esto. Como sabes, soy muy sincero y por tanto soy así lo quiero ser contigo. Mis padres me lo han dado todo, hasta lo que no tenían, y el resto me lo he currado día a día. Hoy por hoy cuido de ellos, porque ellos cuidaron de mí cuando era un niño. No es una obligación, es la necesidad de hacerlo y verles sonreír.
J.S. Vamos a entrar en materia. Antes de nacer Alexandra, Alex llevaba ya una larga trayectoria artística. ¿De dónde surge el deseo de subirte a un escenario?
A.D. La culpa la tiene un amigo que se llama Lisardo, y esto comienza en los 90, cuando todavía se veían a mariquitas en Black and White con los abanicos de Locomía. Como muchos, comencé a trabaja como Gogó a cambio de refrescos.
J.S. Todos o casi todos los artistas de la noche toman referentes, ¿Tuviste tú alguno para crear tus personajes?
A.D. Desde que empecé hasta ahora han pasado unos 19 años. He tenido muchos personajes, muchas mutaciones. Pero la primera persona en la que me fijé fue: Antoñita Glamour, me inspiraba en su trabajo. Sería cuando ella en Ibiza alcanzó un gran éxito y se cambió el nombre a Glamour Tokill, volviéndose Ciber Drag  con su  grupo de performance, cuando yo adopté mi primer nombre artístico que fue: Coma White que es una canción de Marilyn Manson (Otro de mis referentes)
J.S. ¿Cómo evoluciona Coma White?
A.D. Evoluciona viendo lo que tiene a su alrededor. Tuve la oportunidad de trabajar en  Ibiza, gracias a un gran amigo: Jorge (Dakota) que es el dueño de la tienda de pelucas Burlesque, un referente muy importante en Madrid. Ibiza tiene una magia especial, una energía muy fuerte, que te adopta o te echa. Afortunadamente a mí me adoptó. Cree mi grupo de performance llamado  Plasma y pasé de bailar en un pódium a actuar en un escenario. Un paso muy importante en mi carrera.
J.S.  Abandonas Ibiza y regresas a Madrid. ¿Por qué ese cambio?
A.D. En realidad a Ibiza fui a trabajar tres años, pero mi residencia es Madrid. Simplemente por ese motivo.
J.S. Cuando llegas a Madrid, ¿cómo aprovechas todo lo vivido en Ibiza?
A.D. Se te abren muchas puertas. En Ibiza trabajé en Privilege, la discoteca más importante de Ibiza, el segundo año en el Divino y el tercero en Pachá.  Y a parte para algunas sesiones de Space. Eso para un currículum en la península es muy importante para trabajar en la noche. Seguí empapándome de artistas y de diseñadores a los que tuve el gusto de conocer como: Jean Paul Gaultier Y Alexander McQueen.
J.S. ¿Cuáles fueron los primeros proyectos al llegar a Madrid?
 
A.D. Me dediqué 100% al performance y al grupo que había creado: Plasma. Intenté recrear nuevos espectáculos donde por una parte existía una visión futurista y plástica, sin llegar nunca a ofender a nadie, y por la otra parte empecé a fijarme mucho en el trabajo de la Fura del Baus. La barrera del escenario – púbico, me coartaba mucho, con lo que busqué el mayor acercamiento con el público y la interacción.

J.S. Eres de esos artistas que le gusta ir de pueblo en pueblo, como los actores de antaño. Cuéntanos un poco tus experiencias en las diferentes regiones o ciudades que has visitado y actuado.

A.D. Más que ser, era. Ahora ya no tanto. Como sabes  España es muy variada y existe una España y otra España más profunda. Yo he tenido la suerte que por el personaje que llevaba, tan parecido a Marilyn Manson, los más macarras del pueblo me protegían – Risas – Luego comencé a trabajar en sitios más grandes y reconocidos como en Barcelona en Space, Metropol y la Sala Arena y en Valencia en Venial.

J.S. Has tenido un parón de unos años. ¿Qué lo ha motivado?

A.D. Básicamente lo motivó que un trabajo como este, es pan para hoy y hambre para mañana. Entonces pensé en que debía tener  un trabajo más fijo y lo conseguí. En aquel entonces pensé que todos mis objetivos se habían conseguido en el mundo del performance y sería en mi 26 cumpleaños, en el 2002, cuando decido matar a mi personaje: Coma y que renaciera Alejandro.

J.S. ¿En qué consistió este espectáculo?

A.D. Fue el enterramiento de Coma y consistía en un tubo de ensayo donde un Alien estaba conectado a una serie de cables. El argumento se centraba en  que Coma pasada de ser alienígena a humano. Se trasmutaba delante del espectador, despojándose de su vestuario, de su piel de escamas, de su cresta, de su maquillaje… Mostrándose ante el público como chico, tal como soy.

J.S. ¿Qué sucede en esos años en la vida de Alex?

A.D. Me doy cuenta que el mundo de la noche, cuando dejas de trabajar en ese medio, los supuestamente amigos, se esfuman. Por eso te hablaba antes del “contrato de permanencia” de los amigos,  pues en ese tiempo mi concepto de la amistad estaba idealizado.
Me dedico más a aprender a salir a divertirme sin pensar en trabajar. Me costó mucho, porque  estaba acostumbrado a trabajar todos los fines de semana.  Aprendo a valorar la amistad y el amor. Me sorprendía que tuviera que pagar por entrar en una discoteca cuando antes todo era gratis. Me había convertido en un ser normal. Empecé a trabajar en un horario diurno, viajar por placer y no por trabajo. He llegado a pensar que tal vez sería ahora cuando toda aquella experiencia vivida, la tendría que estar experimentando.
Debo confesarte que el personaje no lo maté del todo, porque el mono es el mono por actuar y algunos fines de semana lo sacaba. Tuve una intentona de resucitarlo para la fiesta “En plan travesti” pero fue misión abortada, por motivos de Ego. En esa intentona el personaje cambio de nombre llamándose: Coma Proyect.
 
J.S. ¿Quién es y porqué nace Coma Proyect?

A.D. Coma Proyect es el hijo que nunca tuvieron Alex y Rubén Besametonto. “La culpa” de que naciera el personaje la tuvo Rubén, aunque la idea de llevarlo a en plan travesti”, fuera mía.
Coma Proyect tenía una imagen muy andrógina. No se podría definir como una travesti, sino un Ser distinto, muy fotográfico. Más fotográfico que escénico. En realidad actuó en pocas ocasiones.
Coma Proyect evoluciona a Lekitsch  al moverse por otros ambientes y llega a su madurez  cuando llega a Coma Killer, cuando el prefijo ex, aparece.

J.S. ¿Por qué tanto cambio de nombre, no consideras que eso despistaba a tus seguidores?

A.D. En esa época el que estaba despistado era yo. El cambio de nombre viene definido por el cambio de estado emocional. El paso de llamarme Lekitsch a llamarme Coma Killer, fue un salto de la normalidad a la agresividad.

J.S. Y llegamos al Alter Ego de ahora: Alexandra. Después de tanto ir y venir, de tantos parones artísticos, de buscar, como me has dicho en algunos momentos, tu sitio en la sociedad, etc, decides, como artista que eres y lo llevas en las venas, volver con un nuevo personaje, muy distinto a todos los anteriores y nace: Alexandra McDêrb ¿Por qué este nombre femenino y quién es Alexandra?

A.D. Muy bien utilizada la palabra Alter Ego, porque en mis 39 años de edad y 19 de profesión, es la primera vez que lo he encontrado. Alexandra es lo que ya se está viendo desde Enero. Mi padrino he tenido la suerte, de nuevo, de que fuera Rubén en su fiesta anual de cumpleaños de los Awards 2014. Fue todo  un lujo en todos los sentidos. Contar con Rubén, ser presentado una gran artista como es Supremme y actuar para el público.  Y el nombre tiene significado, me remito a mi primer ídolo, Antoñita. En aquel entonces todas las grandes transformaban su nombre masculino en femenino, por ese motivo el mío pasa de Alejandro a Alexandra y el apellido viene por mi amor a Alemania: Dêrb  significa en alemán “Recio, tosco, bruto, soez” – se ríe al mencionar estas palabras – Que es la imagen que puedo dar en un primer momento y el Mc es un gran homenaje a Alexander McQueen.

J.S. ¿Cómo se ve Alexandra?

A.D. Alexandra tiene las ideas muy claras. Es transgresora, culta y preparada. Una mujer sincera, muy directa. Si tiene que decirte algo te lo va a decir, pero siempre de una forma que sorprenda dentro de este círculo. No le gusta ser grosera y nunca utiliza la grosería ni como medio, ni como arma para nada. Por fuera es moderna, rompedora, de belleza natural, es muy modelo y muy empresaria. Y luego, todo lo que tú quieras – Entre risas – El ser así como me veis, no es un disfraz, ni es algo puntual ni estético. Es una actitud.

J.S.  y con esa actitud ¿Qué deseas proyectar?

A. D. Con la imagen (por ejemplo la barba) es una “copia” de Conchita Wurst. Intento llevar su palabra más lejos, es el intentar que todo el mundo sea más comprensivo y tolerante. No todo el mundo es igual y no tiene porqué serlo (Menudo aburrimiento sería) Pero tampoco se trata de desprestigiar al más débil  o al que es diferente.  Particularmente, no me visto así, por sentirme más mujer. Yo soy hombre y me siento orgulloso de serlo, se trata de que la gente, al igual que si eres rubio o pelirrojo, te acepte siendo: Homosexual, bisexual,  transexual o de cualquier otra etnia.

J.S.  ¿Dónde ha actuado hasta la fecha Alexandra?

A.D. En este corto periodo, he tenido la suerte de conocer a mi ídolo: Conchita. He tenido más proyección que trabajo, que lo considero muy importante. He trabajado recientemente en Berlín en la sala: Berghain a donde vuelvo de nuevo en el puente de Mayo. Tengo cerradas varias fechas y por darte una exclusiva el día 28 de mayo en Viena en el festival Boylesque donde coincido con Conchita de nuevo, tras conocernos  en la fiesta Euroschlagher, y he actuado el pasado domingo en la gran fiesta de “Qué trabaje Rita”.

J.S.  Llegamos al final de la entrevista. Pero como siempre hago con todos los entrevistados, ¿hay algo te gustaría decir?

A.D. La entrevista me ha gustado mucho, porque has tocado todos los palos de mi vida y además te llevas cosas que no conoce casi nadie de mí. Me gustaría dejar algunos puntos de vista de mi personalidad como Alejandro y como Alexandra.
Yo no me considero original. Está todo inventado. Solo hay que tener la información adecuada y el valor para usarla.
No me defino como travesti, soy un transformista. Mi logro personal es transformarme en la persona a la que idolatro, y así poder demostrar “el amor” que tengo hacia ese artista, con toda la humildad del mundo y todo mi respeto.
Creo también que la gente que trabajamos en este medio, debemos tener en cuenta no confundir nunca la letra A con la letra U. Te pueden decir lo fantástica y maravillosa que vas, y tú agradecerlo e incluso, oye por qué no, una sabe que va bien divina; pero no se le sube a la cabeza. Hay que recordar de donde viene cada uno y que nadie se vuelve VIP porque sí.
 
 

 

miércoles, 23 de abril de 2014

SAN JORGE, O SAN JORDI: DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO Y DEL DERECHO DE AUTOR


San Jorge y el dragón, o San Jordi.
El caso es que esta leyenda se ha convertido en una fiesta tradicional en muchos países y pueblos de nuestro planeta. Considerado patrón de países como: Bulgaria, Etiopía, Georgia, Inglaterra o Portugal, de ciudades como Tombuctú y en nuestro país lo es de las comunidades de: Aragón, Cataluña e Islas Baleares, así como de las poblaciones de Alcoy, Cáceres y Golosalvo (en la provincia de Albacete) y en la República Argentina es el patrón de la ciudad de Pichanal (Salta) La fecha en que data esta celebración es el 23 de abril de 303.

En Cataluña se celebra desde el año 1094, denominándose la Diada de Sant Jordi. Para los catalanes es el protector que venció al dragón y salvó a la princesa, símbolo de la victoria sobre el mal.

Resumiendo, la leyenda dice que en un pueblo (dependiendo en la zona en que se relate la historia, en Cataluña se refiere a la capital de la Conca de Barberà) existía un dragón que tenía atemorizada a la población. Para paliar su ira y hambre, se le entregaba en sacrificio a una doncella escogida por sorteo. Un buen día la elegida fue la hija del rey y éste para salvar a su hija ofreció todas sus riquezas si algún valiente mataba al dragón. Entonces apareció Jorge y se batió en lucha con el dragón, clavándole la espada en el corazón. La sangre del dragón derramada se convirtió en un rosal, pues Jorge no deseaba riquezas, sino el amor de la princesa que también era correspondido. Jorge la entregó una rosa de aquel rosal y desde entonces surgió la tradición que cada 23 de abril, los enamorados regalen rosas a sus amadas.

Hay que decir que como toda leyenda tiene su controversia y más a la hora de la santidad, pues algunas iglesias no lo aceptan como tal y la propia Iglesia Católica hizo su culto opcional hace medio siglo. Esto es debido a que se duda muchísimo de que San Jorge fuera un personaje que existiera realmente, pues se considera que lo más probable es que su vida fuera una mera leyenda, al igual que la lucha con el dragón, y además ni siquiera se considera una leyenda original, ya que surgió en la Edad Media.
 También y pasados los años, la Unesco declara en 1996 que cada 23 de abril se celebre el Día Internacional del Libro, aludiendo a que coincide con el fallecimiento de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega, en la misma fecha en el año 1616. Pero la historia nos demuestra que no son reales estos datos, pues Cervantes falleció el 22 y fue enterrado el 23. Por otra parte Shakespeare murió el 23 de abril por el calendario juliano, que corresponde al 3 de mayo del calendario gregoriano. Pero la Unión Internacional de Editores propuso esta fecha a la Unesco, con el objetivo de fomentar la cultura y la protección de la propiedad intelectual por medio del derecho de autor. Sería en París el 15 de noviembre de 1995 donde la Unesco aprobó que a partir de esa fecha se declarase el “Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor”.

lunes, 21 de abril de 2014

SINCERAMENTE, NO SÉ QUÉ OPINAR.

Sinceramente no sé qué opinar del último anuncio de Coca-Cola. Tal vez su idea sea que gente como yo nos hagamos eco y les publicitemos aún más, para ganar en ventas,  las ventas que están perdiendo últimamente sobre todo en España y concretamente en ciudades como Madrid, por su política de despidos o cierres.
Tal vez en publicidad todo valga, pero ¿hasta qué punto?
Siempre he admirado a esta compañía por su buen gusto en cuanto a la creación de un anuncio y sobre todo a su originalidad. En las últimas campañas hemos visto hasta acercarse aún más a la ciudadanía y sus problemas, y entre retazos, que para algunos pueden pasar desapercibidos, criticar las políticas e incluso apoyar la lucha ciudadana. Todavía resuena en mi cabeza la frase: “¿Y si todos nos levantamos?" O el apoyo a los bares no sólo de las grandes ciudades sino también de los barrios y pueblos. Pero señores creo que todo tiene un límite.
Que un cura se bañe en el mar, me parece más que natural. Que una chica se fije en él sin saber que es un cura, lo más normal si el chico es atractivo, pero que ese cura tras vestirse y en plan altanero se dirija a la chica, tome unas gotas de la bebida en cuestión (como si fuera agua bendita) y le haga la señal de la cruz en la frente, en plan: yo te absuelvo por desearme,  me parece más que irreverente. Y todos sabéis que yo no soy precisamente de los que comulgo con la iglesia y que tantas veces  por diversos motivos he criticado. Pero no lo veo lógico. No sé cuánto tiempo durará ese anuncio en las televisiones, pero a mi juicio, la compañía y los publicistas, esta vez han metido más que la pata. Con todos mis respetos para todos, pero también que ellos guarden respeto a las ideologías y creencias, sean cuales sean, y no jueguen con ellas.

domingo, 20 de abril de 2014

REINAS DE LA PRIMAVERA (TEATRO)


Tres renombrados transformistas madrileños se unen para crear la primera obra de teatro en torno a sus vidas, recuerdos, frustraciones, sueños…  "Reinas de la primavera"
 
Andonegy, Angelo y Sunflower dan vida a tres divas retiradas, y tras un largo tiempo sin verse, deciden vivir juntas esa llamada tercera edad, hasta que en un  momento determinado, una de ellas decide regresar a escena.

Entre el drama y la comedia, estos tres grandes artistas nos envolverán entre las sonrisas y las lágrimas del mundo rosa.

Obra escrita por Juanjo Amador, y que se estrenará en teatro Prosperidad, del día 2 al 6 de Julio, ambos inclusive, con motivo del orgullo gay 2014

Os mantendré informados.

miércoles, 16 de abril de 2014

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPÍTULO XVIII


            CAPÍTULO XVIII

       EL  FINAL… ¿EL FINAL?

            Llevo ya 15 días en casa, y aquel temor a no poderme valer por mí mismo cuando no hubiese nadie en casa o no tuviera compañía, ha quedado olvidado. Es cierto, que algunas veces me han faltado las fuerzas, que otras no quería ni siquiera salir de la cama y que otras tantas, veía pasar el día por la ventana, sin saber en realidad que estaba pasando, si estaba mejorando o no. Pero por otra parte, las visitas, los amigos que me han obligado a levantarme de la cama y salir a dar una vuelta y con ello distraerme y tomar el aire. El que poco a poco se me pasara el problema estomacal, con lo que al comer de nuevo sólidos, me ha hecho sentir más fuerte; aunque todavía mi estómago no esté a la altura de cuando lo llenaba hasta que me decía basta. Debo de ir poco a poco, y no forzar situaciones. Situaciones que también en ocasiones me limitan los dolores y el andar con lentitud y sobre todo no alejarme de la zona en la que vivo, no coger el metro o el bus, por miedo a algún golpe no deseado. Ya conocemos la Ley de Murphy, lo que nunca ha sucedido, cuando no tiene que suceder, ocurre. Por lo tanto, en esta ocasión, mejor no retar ni a dicha ley ni al destino.

            Cuando comencé a contaros esta historia, no sabía cómo titularla y sin pensar mucho, porque en esos días el pensar me estaba dejando bloqueado, le puse: Un tiempo para meditar, sufrir y luchar.

            He meditado mucho, aunque en realidad he podido compartir poco con vosotros, he sido muy escueto en algunas de mis entradas. Pero meditar, sí que lo he hecho, sobre todo y principalmente sobre la vida. ¿El porqué de las enfermedades? ¿El por qué el destino varía sus cartas cuando creemos  estar bien, y en realidad no precisamos de mucho más? ¿El por qué nosotros en un momento determinado debemos pasar por determinada prueba? Muchas preguntas, donde la mayoría de ellas si han tenido respuesta y en algunas de esas respuestas sentirse frustrado, por no saber cómo acometer con más fuerza ese destino.

            He sufrido mucho, sí, ¡UF! Os aseguro que esta vez he vivido la prueba más dura de toda mi existencia. Dolores que no sabía controlar, y en muchas ocasiones, cuando podía dormir, que ha sido muy poco lo que he dormido en este tiempo, el dolor, las fantasías y la realidad juntarse y crear unas pesadillas oscuras que al despertar, mi cuerpo se encontraba bañado en sudor. Las fiebres han sido altas en algunas ocasiones y en otras los dolores me han trasladado más allá de lo concebible, os lo aseguro.

            He luchado. Dicen algunos amigos que soy un luchador nato. Quienes me conocen de siempre, que lo he hecho toda mi vida. Esta vez la lucha ha sido dura, muy dura, hasta el punto en que en más de una ocasión la toalla estaba a punto de caer al suelo, pero  no, no he dejado que tocara el asfalto.

            Aunque éste es el último post, por ahora, aún me queda mucho por meditar, espero que poco que sufrir y la lucha seguirá siendo una constante. Pero es mejor dejarlo aquí, aunque aún tenga dolores, aunque tenga la visita el día 25 con el especialista y donde me darán los resultados y el estado en que estoy ahora mismo. Queda en un futuro, creo que no muy lejano, aunque preferiría que así fuera, la otra operación, y entre tanto, espero que estas nuevas cartas que el destino me ha ido mostrando y aunque las primeras no han sido muy halagüeñas, creo, confío y deseo, que en las próximas, en su propio rostro se esbozará una sonrisa y en sus ojos se mostrará un camino más llano, más feliz y con grandes sorpresas, con las que pueda disfrutar.

            Seguimos en contacto, y por supuesto, si en algún momento creo que debo añadir algo a este apartado, lo haré. Mientras tanto, a todos vosotros os deseo mucha felicidad.

martes, 15 de abril de 2014

FELICES VACACIONES DE SEMANA SANTA


Se acercan esas fechas que para muchos son las primeras y más deseadas  vacaciones del año. La Semana Santa. Muchos ya han salido y otros lo harán durante estos días. Los destinos son múltiples, tanto fuera como dentro de nuestro país y además, como novedad este año, parece que las predicciones meteorológicas auguran buen tiempo en toda la geografía española.

Unas vacaciones que se dividen entre el ocio y la cultura, entre lo profano y lo religioso, pues no todos las viven estos días, de la misma manera, y aprovechando esa diversidad, las diferentes comunidades ponen toda la carne en el asador para atraer la mayor cantidad de turistas, con lo que en sus lugares de origen, pueden ofrecer. Y es que sin duda, nuestra geografía ofrece al turista de todo, desde una gastronomía muy diversa, una riqueza cultural envidiable, una naturaleza sin igual, con sus montañas, valles, mares, playas, ríos… Y en estas fechas además, las múltiples procesiones con sus pasos. Grandes esculturas, de grandes maestros, que desfilan por las calles de casi todas las ciudades de España, con el esfuerzo de costaleros que se han estado preparando durante meses, para que nada falle, en dicho desfile.

Pero estos días, una vez más, ante todo servirán para el descanso, para eliminar el estrés de la ciudad y del trabajo, para acercarse más a sus seres queridos, para disfrutar de detalles que omitimos en el día a día. A todos los lectores del blog, y a todos aquellos que hagan sus maletas estos días, os deseo unas felices vacaciones y recordad, si cogéis el coche, cuidado. Lo importante es llegar, disfrutar y sobre todo, regresar.

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR


                         CAPÍTULO XVII
                ANTES DE LO ESPERADO.

            El cuarto día de estancia en el hospital y tras la visita del especialista, nos comunican que posiblemente el domingo o el lunes nos darían el alta. Sinceramente, ante aquellas palabas me sentí bastante vulnerable. No me veía con fuerzas para  en un par de días abandonar las instalaciones, y valerme por mí mismo. Me sentía débil, dolorido y aún tenía los tubos de drenaje. No dije nada, para qué, dejaría que llegara el momento y ver la evolución.

Lo que estaba aprendiendo en aquellos días, o debería decir, en aquellos meses, era que no debía precipitarme, no debía pensar más allá del presente que estaba viviendo. Muchos eran los amigos que me estaban dando ese consejo y que a mí me estaba costando asimilar. Siempre he pensado en pasado, presente y futuro como si todo estuviera unido en uno mismo, y es cierto, como algunas veces dicen algunos de mis personajes de ficción: "Cada instante tiene su momento". Por lo tanto, dejaría que pasaran las horas y comprobar como mi cuerpo evolucionaba, aunque en aquellos instantes me sintiera tan perdido.

Sería ese mismo día, cuando me quitaron el primer tubo de drenaje y cortaran el segundo de la maleta, aún sin quitármelo del costado, cuando percibí un estado de evolución positivo. Sí, el poder levantarme con libertad de la cama, caminar por los pasillos, sentarme sin la contrariedad de los dichosos tubos… Todo confirió a mi mente un estado de bienestar y con libertad de moverme, aunque me marease por no poder comer lo que deseaba, pues mi estómago, como ayer os conté, me estaba jugando una mala pasada. El domingo me quitaron el último tuvo de drenaje y una nueva puerta de fortaleza se alzó. Sí, estaba preparado para salir el lunes si así lo requerían.  Ese mismo domingo me bajaron a rayos para hacerme unas placas de tórax y el lunes, pasadas las 10 de la mañana, mi especialista me comunica que tengo el alta, que me puedo ir después de comer. ¿Comer? Soñaba con esa palabra. Deseaba volver a comer como lo hacía siempre. Le comuniqué a mi especialista el problema estomacal que tenía y me dijo que si en unos días no se me pasaba, me realizarían alguna prueba, que tal vez, en algún instante, se hubiera provocado una hernia de hiato. Lo que me faltaba. Tras la noticia, llamé a mi amiga Rosa y le dije que en cualquier momento podía irme, y así fue, en cuanto ella salió de su trabajo, allí estaba yo, con la maleta, con las cosillas que me habían regalado y con el deseo de abandonar la habitación, y es que en realidad, como en casa, no se está en ningún lado, aunque se esté solo prácticamente todo el día.

Atrás quedaban todos los recuerdos, los del primer día, impaciente para que la operación se realizara y salir de ella. Los instantes vividos en la UCI donde una paz especial me hizo sentir relajado y protegido.  Los momentos duros de dolores que no los podía controlar y tampoco quería abusar de calmantes. Las distintas situaciones experimentadas con las visitas, aunque en alguna de las ocasiones no pude atender por estar decaído. El recuerdo de la familia de Marcelo. Caminando por aquel pasillo, una sonrisa se reflejó en mi rostro y di las gracias a todas y cada una de las personas que me habían estado atendiendo en aquellos días. Habían sido días duros, algunos instantes muy duros, pero ya habían pasado, ahora quedaba recuperarme poco a poco y con mucha paciencia, como todo el mundo me sugería.

Sí, un par de días antes no me creía en posición de salir del hospital, y ahora, ahora estaba deseando ver la luz, sentir el viento en mi rostro y acomodarme de nuevo en mi hogar.

lunes, 14 de abril de 2014

NUBETIA PRESENTA SU PRIMER SINGLE "VIP BITCH"


Hace ya un tiempo pregunté a Nubetía por qué no regresaba a los escenarios,  cuando cada día surgían nuevos transformistas. Su contestación fue porque no era el momento oportuno, pero que si en alguna ocasión regresaba, sería para entrar por la puerta grande.

Hace unos meses Nubetía volvió a peinar su peluca, sacó su maletín de maquillaje, desempolvó sus vestidos y nos dijo que regresaba.

Ahora nos ofrece su primer single, que seguramente será el primero de muchos éxitos que nos irá ofreciendo Nubetía. Este trabajo se pone a la venta en todas las plataformas digitales “VIP BITCH” estrenándose el 13 de Mayo

VIP BITCH, está producido por Jake Boncutiu. La promoción fotográfica está realizada por el prestigioso fotógrafo Salva Musté.
Esperamos verte pronto en los escenarios.
Single Snipet: https://www.youtube.com/watch?v=TD0A7NO0fxQ&feature=youtu.be 

 

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPÍTULO XVI


                   CAPÍTULO XVI

         Y MI ESTÓMAGO DIJO: NO

Sí, mi estómago se reveló, posiblemente ante tanta medicación distribuida por vena, como en pastillas. Y es que para mantener a una persona sin dolores, con una operación como la mía, hace falta de muchos calmantes, sobre todo, a mi juicio, para paliar el dolor de los tubos que van introducidos entre las costillas y que sirven de drenaje. Son una verdadera tortura, que no deseo a nadie. Además también hay que pensar en los antibióticos. En fin, que mi estómago, que es un poco delicado, dijo un día NO.

Ya os he comentado que una noche, tras haber pasado un día muy malo, lancé todo lo que había digerido por la boca; pues bien, al día siguiente, cuando intenté meter algo en el estómago, resultó como una bomba de relojería. No era una molestia, no. Ardía literalmente, os lo aseguro. Era como si se encendiera dentro de mí una estufa de leña.

Yo que soy de buen comer y aquellos días atrás lo había demostrado no dejando nada en la bandeja, ahora pasaba ante mí la comida y sin poder catarla, tan sólo un yogur y un caldo. Y este acontecimiento, no esperado, sí que me desesperó. Podía soportar los dolores, podía aguantar los mareos, el caminar con dificultad, el agotarme más de lo esperado… Pero no poder comer, aquello significaba debilidad y cuando uno está enfermo, precisa de todas sus fuerzas. Me dijeron que si pasaba unos días así, me realizarían algunas pruebas, y entonces me dije a mí mismo, no, esa prueba no la quiero pasar precisamente ahora: La endoscopia. Y puede parecer ridículo que me negara y cerrara mentalmente a tal prueba, pero os aseguro, que tras todo lo pasado los meses anteriores y durante el proceso de después de la operación, no me quedaban ganas, fuerzas, ni motivación para subirme a una camilla y dejarme introducir otro tubo por la boca con todo lo que aquello suponía. Soy muy buen enfermo, siempre me lo han dicho, pero amigos, hasta los buenos enfermos nos podemos volver por unos instantes rebeldes cuando creemos estar bajo mínimos. Claro está, que luego, cuando llega el momento, de una forma sorprendente, nuestra mente se pone firme y nos demuestra que podemos un poco más.

Hace dos días he conseguido volver a comer, de momento poco a poco. He sido paciente, y con mis yogures, los magníficos caldos y comidas especiales que me han ofrecido: Rosa, Sofía y Andrés. Los productos nutritivos que me trajo Raúl, y el deseo siempre de mejorar, de recuperarme, de volver a estar bien.

Y es que siempre lo he dicho, cualquier tipo de enfermedad nos hace caer, pues pocas veces o ninguna estamos preparados para ello; pero somos nosotros, con nuestra entereza y fortaleza, aunque en esos momentos no las sintamos, quienes podemos crear en nuestro interior el mayor fármaco para curarnos: El optimismo, la paciencia, las ganas de luchar, el deseo de dejar atrás todo lo que nos está pasando. Los antibióticos, calmantes, etc, son nuestros aliados. Los médicos nuestros consejeros, pero nosotros, nosotros amigos, somos los guerreros que debemos luchar para que nuestro cuerpo siempre esté sano, o ayudarlo a sanar, cuando no lo está.

Así que si alguien lee este texto, está pensando que no, que él no tiene fuerzas, o ya ha perdido las esperanzas, que interiorice en él y verá que siempre está esa luz, esa chispa de energía que le espera para sacar fuerzas y seguir adelante. Yo lo he vivido, yo lo he sentido, yo lo he experimentado, por tanto tú, también puedes.

domingo, 13 de abril de 2014

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPÍTULO XV


                       CAPÍTULO XV
                         LOS AMIGOS          

Me habréis oído hablar muchas veces de la gran importancia de los amigos y de que ellos van formando parte de la nueva familia, en la sociedad que nos toca vivir. Y es que en ocasiones, la familia de sangre, por las circunstancias que sean, no está cerca de nosotros o la hemos ido perdiendo en el camino.

Siempre dicen que los amigos de verdad están cuando uno los necesita, y aunque este dicho sea muy cierto, yo nunca he precisado de una circunstancia determinada para saber que cuento con un gran grupo de amigos y amistades, que forman parte de mi vida.

Los pormenores que han rodeado esta operación han sido muchos y muy variados, y desde el primer momento, al igual que he compartido con todos mis amigos mis alegrías, también me vi en la necesidad de hacerlo, con lo que me estaba desolando, El apoyo desde el primer instante fue absoluto, 
El día antes de operarme lancé una nota en Facebook anunciando que estaría alejado del medio por unos días debido a mi intervención, la respuesta fue masiva, tanto en ese post, como en privados, Whasap, llamadas, etc. Y la asistencia al hospital fue diaria: a cualquier hora tenía amigos visitándome y ofreciéndome todo su apoyo. Al igual que está sucediendo en casa, desde que me dieron el alta.

Desde estas palabras, si algunos leen estos textos, quiero pedirles también disculpas si en algún momento no estaba en mi mejor estado, pues pasé horas e incluso algún día, bastante chungo; y aunque las visitas me llenaban de vida y energía, el simple hecho de hablar, suponía todo un reto, y un agotamiento absoluto.

Tengo que dar las gracias a amigos como Cristóbal o Raúl que estuvieron esperando pacientes a que saliera de la operación. Amigos que aún sin conocer, pero con un gran trato por Facebook me ofrecieron su protección como fue, entre otros, Carmela Gila. A mis amigos escritores: Isabel Montes y su mujer, a Diego Manuel Bejar, Joakin C., Rubén Besametonto, Mónica y Raquel, o Paz Quintero y su chica, entre otros. Andrés Burguera, que se pasó unas horas antes de emprender su viaje a San Paulo.  Enric, Miguel, Carlos Corbacho y familia, Magdalena, Gemma Pindado, compañeras de mi anterior trabajo. Ray, (el director de la serie Radiografías de Espanta)… En fin, espero que nadie se ofenda si no ve su nombre, pero habéis sido muchos y a todos os agradezco esos instantes que compartisteis conmigo.

Sí, mi familia de sangre se encontraba lejos y la mayoría tenían otras responsabilidades que atender, pero mi otra gran familia, a la que llevo en mi corazón, siempre estuvo allí presente, demostrándome, apoyándome y con sus palabras decirme que contara con ellos para todo. No quiero olvidarme de dos grandes amigas: Rosa y Sofía, que a la vuelta a casa, me han estado ayudando en todo: Acudir a las curas, proporcionarme alimentos que pudiera digerir, pues el estómago no me admitía más que líquidos y algunos purés, y pendientes durante muchas horas del día. Gracias chicas.

Gracias en definitiva a todos. No sabéis lo que se agradece una palabra, una mirada, una sonrisa, un abrazo, un beso y el aliento del calor que desprende la amistad de verdad. Gracias por estar ahí todos y por todos aquellos que desde la lejanía no pudieron estar físicamente, pero día a día por las redes sociales preguntaban sobre mi evolución. Mil gracias, os llevo, como bien sabéis, siempre en mi corazón.

sábado, 12 de abril de 2014

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPÍTULO XIV


CAPÍTULO XIV     
       MI COMPAÑERO DE HABITACIÓN

             Creo que a nadie le gusta pasar unos días en un hospital, por muy bien atendido que uno esté y sepa que es necesario para ser curado, pero si hay que pasar por ese trance, todos buscamos que esa estancia sea lo más agradable posible, y siempre, entre otras cuestiones,  pensamos en nuestro compañero de habitación. Porque la estancia en un hospital se limita al espacio reducido que comprende ese habitáculo con dos camas.

            Pero Marcelo resultó ser un tipo interesante, bastante silencioso, con un toque de “gruñón” que me hacía sonreír, muy futbolero y con una familia… Una familia, que por lo que pude detectar en esos días, era increíble, unida, respetuosa, tranquila, hogareña... Desde las hijas, el hijo, la mujer e incluso el yerno y los nietos, que por cierto, un niño y una niña encantadores y tranquilos. Sí, me encantó conocerlos a todos ellos. Además me ayudaron en determinados momentos en que estuve solo, y se preocupaban en los instantes de bajón que tenía, en algunas de aquellas tardes.

            La mujer de Marcelo me trataba casi como un hijo, me decía que no debía hablar mucho, que eso me fatigaba y no era bueno para mi recuperación y más para pasar una noche tranquila; como ella sabía que a mí me encantaba atender a todas mis visitas y lo de hablar no lo podía controlar, me llegó a proponer que si me veía fatigado, podría decirles a mis visitas que intentaran no agotarme, que no era bueno que hablase mucho. Acepté sonriendo. Un momento tenso y desagradable en el que me vi arropado por aquella mujer, fue una noche, cuando ya habíamos cenado. Había pasado un día malo, muy mareado, con el estómago revuelto y nauseas. Fue en el instante en que acomodé la cama para disponernos a ver un poco la tele antes de dormir, cuando de repente sentí que algo se movía dentro de mí y en un segundo arrojé por la boca todo lo que llevaba en el interior. Os podéis imaginar cómo quedó la cama. Automáticamente ella, al ver que además yo estaba desorientado, se acercó, me trajo una toalla y la palangana y me estuvo tranquilizando y limpiando hasta que llegaron las enfermeras. Aquel momento y la forma en que me estuvo cuidando, no lo olvidaré jamás.

            Otro momento que recuerdo, aunque esta vez con una sonrisa, fue el día que a Marcelo y a mí nos quitaron las sondas y que debíamos de orinar en las bacinillas, que ese día no lo habíamos hecho. Nos "amenazaron" que si no orinábamos determinada cantidad, nos volverían a poner la sonda. A Marcelo y a mí no nos gustó esa idea, así que comenzamos a beber agua como locos. Como estábamos en cama, fue su hijo quien iba y venía trayendo agua en nuestros botellines y animándonos a que orinásemos. Él mismos nos retiraba las bacinillas e introducía el contenido en los botes correspondientes. Sin duda, otro día para no olvidar, y cómo aquel joven con total sencillez y sonriendo, no sólo atendió a su padre, sino a mí, animándonos y diciendo quien iba ganando. “Marcelo, no nos vuelven a poner la sonda” le comenté en un momento determinado. “Desde luego que a mí no” fue su respuesta entre un esbozo de sonrisa.

            Sí, todos resultaron encantadores, extraordinarios, divertidos cuando lo creyeron oportuno, conversadores cuando la situación lo requiso, respetuosos en todas las ocasiones, y familiares, hasta el punto que creí necesario dedicarles estas palabras, aunque seguramente son pocas, por todo lo que ellos se merecen. Mil gracias por ser como sois y deseo lo mejor para vosotros y toda vuestra familia.

viernes, 11 de abril de 2014

ENTREVISTA: DAVID SILVESTRE VALOR: ESCRITOR


Hoy entrevistamos a un nuevo escritor, su nombre: David Silvestre Valor, nació en Alcoy (Alicante) en 1983 y en la actualidad reside en Alicante.

J.S. David, como sabrás por mis entrevistas, las primeras preguntas siempre son de índole personal, para que los lectores te puedan conocer un poco más. ¿Cómo se considera David?

D.S. Me considero una buena persona, agradable, echado para adelante y apasionado con aquello que me motiva. Los defectos os dejo que los averigüéis vosotros – Sonrisas.

J.S. ¿Qué es lo que más añora de su infancia, si es que añoras algo?

D.S. No suelo mirar al pasado a menudo, pero de mi infancia destacaría la inocencia y la falta de preocupaciones, así como los momentos en casa en compañía de mis padres y de mi hermano.

J.S. Como joven que aún eres. ¿Cómo ves la sociedad tal y como hoy en día la vivimos?

D.S. Percibo una sociedad global, más abierta y crítica, conectada especialmente gracias  a las redes sociales, pero que desgraciadamente muestra signos de desesperanza y desmotivación.

J.S. ¿Qué representa la familia en tu vida?

D.S. He tenido la suerte de contar siempre con el apoyo de mis padres y ambos constituyen un pilar fundamental en mi vida.

J.S. ¿Qué lugar ocupa la amistad en el vivir cotidiano de David?

D.S. Generalmente mantengo un contacto “virtual” con mis amistades. En otras ocasiones, principalmente los fines de semana, pasamos buenos momentos de copas por el ambiente alicantino, asistiendo a conciertos, etc.

J.S. ¿Y el amor?

D.S. Sin ninguna duda, el amor ocupa el puesto de honor. Tuve la suerte de encontrarlo hace casi diez años e intuyo que por él lo dejaría todo.

J.S. Has estado trabajando en el Reino Unido durante dos años ¿Qué te llevó a dicho país?

D.S. Trabajé en ese país como camarero de hotel con la idea de mejorar mi inglés, aunque mi motivación oculta era salir de Alcoy, mi ciudad, y descubrir mundo. Reino Unido me permitió vivir con naturalidad mi orientación sexual y la docencia de su idioma se ha convertido en mi actual profesión, así que no puedo estar más agradecido con la experiencia.

J.S. Eres licenciado en ADE (Administración y Dirección de Empresas) y durante varios años has estado trabajando como Auditor para una empresa internacional ¿Qué nos puedes contar de dicha experiencia?

D.S. Aquella experiencia simbolizó para mí el verdadero paso a la edad adulta. Todas mis expectativas profesionales se derrumbaron con aquel primer contacto serio con el mundo laboral. El elevado estrés y la desmotivación que sentía me llevaron a dejar, de forma bastante precipitada, aquel trabajo fijo cuando la crisis ya se intuía en el horizonte.

J.S. Abandonas este trabajo por considerarlo estresante y  porque tú verdadera pasión son los idiomas. Preparas las oposiciones a profesor de Inglés para Instituto de secundaria, profesión que desempeñas en la actualidad ¿Qué te aporta la enseñanza?

D.S. Preparar la oposición para profesor ha sido una de las mejores decisiones de mi vida. Me llena de satisfacción estar con los chavales en el instituto y transmitirles no solo conocimientos de la lengua inglesa, sino valores y experiencias para ayudarles en su presente y en su posterior vida adulta. Considero que éste sí es el trabajo de mi vida.

J.S. Como hablábamos, eres un apasionado de los idiomas. ¿Qué otros idiomas estudias en la actualidad y por qué?

D.S. Este año cursaré 7º de francés en la EOI de Alicante. Desde siempre me ha gustado su acento. El año pasado comencé además mis estudios de árabe, idioma que siempre me ha llamado la atención, puesto que su dificultad me supone un reto y porque sus hablantes me parecen atractivos por norma general - Risas - Asimismo, conocer dicha lengua me aproxima a los países árabes. Sinceramente, me siento español, pero también europeo e incluso mundial. Aprender idiomas me ayuda a concebir el mundo desde más arriba, de manera más agregada.

J.S. La música es una de tus aficiones. En tu infancia  estudiaste solfeo y clarinete ¿Qué te llevó a abandonar el mundo de la música?

D.S. La carrera para llegar a ser un músico profesional se me antojaba demasiado larga. Continué componiendo música (podéis descubrir mis pinitos a la edad de 18 años en este link de YouTube y partiros de la risa:
http://www.youtube.com/watch?v=vmQmCkoNTWE —mi inglés ha mejorado mucho desde entonces, ¡que conste!) y hoy en día me gusta mezclar canciones en mis ratos libres y, sobre todo, disfrutar de la música como oyente.

J.S. Recientemente, y como muchos autores, has auto publicado tu primera novela “Agregados a la otra realidad” con Amazon ¿Por qué la auto publicación? 

D.S.  Cuando finalicé y revisé mi manuscrito, lo envié ilusionado a varias editoriales (las principales de temática LGTB y alguna más), pero apenas obtuve respuesta por su parte, o fueron negativas, por lo que opté por autopublicarme. Estoy muy contento con el resultado. He controlado todo el proceso de la publicación aunque, lógicamente, la promoción es más compleja. De hecho, me he encontrado con algunas librerías y publicaciones LGTB que no están por la labor de hacer hueco a autores que se autoeditan, lo cual es una pena. Afortunadamente, Internet sin censura es el instrumento más democrático que existe en este siglo, y nos permite hacer llegar nuestra voz libremente a todas partes.

J.S. La novela va planteando diversas situaciones, todas relacionadas con lo social y emotivo ¿Qué deseabas transmitir a los lectores con dichas historias?

D.S. Mi deseo era transmitir diversas emociones que me atormentaban a través de las vivencias de los personajes. El miedo y cómo enfrentarse a él, la búsqueda del amor verdadero huyendo de los convencionalismos, los mecanismos de supervivencia de una pareja al cabo de varios años de relación o la decepción que suponen las altas expectativas depositadas en el mundo profesional son algunos de los temas que he desarrollado en este libro.

J.S. Agregados a otra realidad, presenta a tres jóvenes veinteañeros que buscan vías de escape a la realidad que se les presenta diariamente en una ciudad como Alicante (España) ¿Piensas que en una ciudad pequeña es más difícil ser uno mismo?

D.S. En Alicante contamos con una escena gay más que aceptable, con pubs y locales donde movernos libremente. Sus playas acogen numerosos turistas y, al menos desde mi experiencia, respiro un aire de libertad en la ciudad. Sin ir más lejos, recientemente celebramos por sus calles el tercer Orgullo Gay. Seguramente en ciudades de menor tamaño (como Alcoy, mi ciudad natal) es más difícil vivir la orientación sexual y, en general, ser uno mismo, pero poco a poco, confío que esta situación cambie a mejor

J.S. Los personajes se funden en el mundo de la noche, donde los excesos de alcohol están presentes en muchos momentos. ¿Sigue siendo el alcohol una vía de escape en los jóvenes para evadirse de los problemas que les rodean?

D.S. El alcohol y cualquier otra adicción —la droga, el sexo, Internet o el trabajo— están a la vuelta de la esquina tentándonos, a jóvenes y no tan jóvenes, especialmente en los malos momentos. Una buena educación emocional y el entorno cercano ayudan a evitar que nos atrapen. La otra realidad que nos creemos para evadirnos de los problemas no tiene porqué ser siempre nociva.

J.S. En la novela está presente la infidelidad pactada, como tú la llamas, o como otros matizan: pareja abierta. ¿Cuál es tú opinión sobre las parejas que toman esta decisión? ¿Crees que es beneficioso para consolidar una relación de futuro?

D.S. Suscribo las palabras del personaje de Miguel en la novela: «Una pareja es un conjunto de dos personas que mantienen alguna relación entre sí y, por tanto, es obvio pensar que esta relación debiera ser definida únicamente por sus dos componentes.» Lo que decidan hacer dos personas en su intimidad es cosa suya. No es más que otra posibilidad a considerar libremente. Y parafraseando a Luz Casal: “Y que el amor es un misterio y que importa solo a dos” (Besaré el suelo).

J.S. Las redes sociales, otro de los temas claves en tu novela. Mucha gente está enganchada a ellas, como se puede comprobar en el día a día. Vayas en el metro, en el autobús, caminando o incluso sentados en terrazas; una gran mayoría está pegada al móvil o al ordenador en su casa durante muchas horas. ¿Crees que se está haciendo un uso adecuado de ellas?

D.S. La novela es en parte un homenaje a los medios que tenemos para comunicarnos y cada capítulo es iniciado con un ejemplo característico: desde los más tradicionales —la carta o un mensaje escrito en un papel— hasta los más contemporáneos —Twitter, Facebook o Whatsapp.
Efectivamente observo un cierto abuso de las redes sociales. Yo mismo me considero bastante enganchado. Más que disfrutar del momento, nos centramos en dar constancia de todos nuestros actos, ansiando esa notificación o comentario en Facebook, ese esperado me gusta”. De ello me hago eco en la novela.

J.S. Vivimos en una época que el tener un trabajo se ha convertido en todo un lujo. El conservarlo ha llevado a muchas personas al estrés continuo, a traicionar a sus compañeros de trabajo o incluso a trabajar por una miseria con tal de no perder su puesto o conseguir uno… ¿Crees que se está deshumanizando la sociedad?

D.S. Mi visión de la sociedad es bastante positiva a la vez que realista. Tengo claro que desgraciadamente el dinero nos mueve y corrompe, pero algo positivo hay que sacar de la crisis: estamos aprendiendo a vivir con menos. Contemplar un arco iris o un amanecer, intercambiar un beso o disfrutar de una bella canción, siempre serán placeres al alcance de todos. 

J.S. Me comentabas que la historia cuenta con momentos autobiográficos y de vivencias de personas cercanas a ti. ¿Te identificas con alguno de los personajes o como sucede en algunas ocasiones, hay un poco de ti en todos ellos?

D.S. Creo que efectivamente hay un poco de mí en todos ellos. Sin particularizar en ninguno de ellos para evitar desvelar detalles, diré que me seduce su espíritu de lucha y superación, así como su búsqueda del amor verdadero huyendo de los convencionalismos que en absoluto garantizan la felicidad. Me identifico con la decepción que pueden provocar las altas expectativas depositadas en el mundo profesional y con la necesidad de establecer mecanismos de control y supervivencia al cabo de varios años de mantener una relación, sea amistosa u amorosa.

J.S. No desvelaremos más de la novela, pues considero que es una historia más que interesante para ser leída. ¿Cuáles son los nuevos proyectos de David?

D.S. En primer lugar, el nuevo curso escolar que comienza constituye mi máxima prioridad.
Espero continuar con los idiomas y la formación docente —tengo pensado realizar un máster. En el ámbito literario, mi idea es continuar promocionando #Agregados a la otra realidad, a la vez que tomo notas e ideas en mi Word para un futuro proyecto, que no empezaría hasta el próximo verano. En todo proceso de escritura, se necesita estar muy absorto y, por supuesto, sentir la necesidad de querer expresar algo. Ahora mismo digamos que me encuentro en un período de estabilidad, sin conflictos internos destacados.

J.S. Y va la última pregunta antes de dejar un resumen de cómo se puede adquirir tu obra. ¿Qué te hubiera gustado que te preguntara que no he hecho?

D.S. Creo que ha sido una entrevista muy completa y solo me queda agradecerte que me des la oportunidad de presentaros mi proyecto y desear que os entretenga y haga reflexionar a partes iguales. Os espero #agregados a otra realidad. – Sonrisas.

Agregados a otra realidad, se puede adquirir en formato: Libro de papel y  E-Book en:

Amazón (Createspace), a través de su blog:

 http://agregadosalaotrarealidad.blogspot.com.es/ donde os la enviará dedicada y también a través de la editorial: Lulu.

 

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPÍTULO XIII


    CAPÍTULO XIII
                LA HABITACIÓN.

            Salir por las puertas de la UCI, me provocó varias sensaciones. La primera de frío, pues aun estando arropado por la sábana, por aquellos pasillos hacía fresquito. La segunda la de escuchar sonidos y palabras, que habían estado ausentes durante todo la noche en aquella sala y la tercera la de volver a la realidad, pues en la UCI, aunque no lo os lo he contado, entre los ratos que estuve despierto y por la atmósfera que se vivía allí dentro, por supuesto, teniendo en cuenta también la anestesia y otros fármacos que me mantenían libre de dolores y en un estado de bienestar total, podría semejarse a la salida del vientre materno (Calentito, arropado, cuidado) a la vida tal cual. Tardé unos segundos en reaccionar, pero claro, como todo animal de costumbres, enseguida nos adaptamos a lo malo, también.

Comprobé, cuando la cama la instalaron en el ascensor, que estaba en la tercera plata y mi lugar de destino sería la quinta. Llegamos a ella y por aquel largo pasillo, donde el día anterior había estado viendo caminar y pasear a pacientes y acompañantes de los mismos, empecé a ver sus rostros. Rostros que me observaban y seguramente pensaban “Otro más operado” “Pues no tiene mala cara” Última curva y dentro de la habitación. Estaba completamente vacía. Colocaron mi cama al lado del ventanal y tras despedirse el camillero, me quedé allí. Miré hacia el lado donde debería estar la otra cama, y me extrañó que no hubiera nadie, pues el día anterior, sí bien sabía que estaba ocupada, porque una señora entró, me saludó, sacó algo del armario y se fue, aún la cama faltaba en su espacio. No me dio tiempo a pensar mucho, un pequeño ejército de enfermeras entró. Me saludaron y comenzaron con todo el ritual: tomarme la tensión, la temperatura, mirar los aparatos que tenía detrás de mi cama por si alguno necesitara ser usado, comprobaron la percha de metal donde reposaban las bosas de: Suero y otros productos. Comprobaron las sábanas y tras ver que estaban cambiadas, se despidieron. Entró un enfermero y le solicité agua, me sonrió y me dijo que sí, pero que a sorbos muy pequeños. Pasado todo este tiempo, escuché el sonido de unas ruedas y una camilla se acercó a la puerta introduciéndose en el interior. Corrieron la cortina que separaba ambas camas, pues el ritual que habían llevado conmigo, seguramente lo ejecutarían con él. Luego sabría su nombre: Marcelo.

Aquella habitación, como si se tratara de mi casa, donde uno se siente más protegido, serviría aquel primer día para dormir, comer, dormir, comer, dormir… Sé que en aquel primer día recibí visitas, pero sinceramente,  ahora no recuerdo quienes fueron. Al caer la noche y tras la cena, di las buenas noches y me dormí.

No, no he omitido por dejadez hablar de mi compañero de habitación, es que tanto él, como su familia, merecen un capítulo completo.

jueves, 10 de abril de 2014

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR CAPITULO XII


                 CAPITULO XII

        LAS HORAS EN LA  UCI

            Como nos sucede a todos los que somos operados, sí recordamos el momento en que entramos en el quirófano, pero jamás cuando salimos, pues lo hacemos aún en el estado de dormidos, bajo la anestesia.

            La sala a la que normalmente te trasladan tras la intervención, es la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) Y sí, afirmo, confirmo y doy fe, que llevan a gala el nombre de la sala.

            El cuidado ya no es perfecto, sino exquisito. Lo primero que recuerdo, mientras despertaba, era el total silencio, la casi ausencia de luz y gente alrededor de mí. Me preguntaron el nombre y tras decírselo, comenzaron a hablarme entre susurros. Me comentaron que todo había salido bien y que me encontraba en cuidados intensivos. Recuerdo que pregunté si pasaría allí la noche y una voz femenina me respondió que sí, que en realidad ya era tarde, que había sido una de las últimas intervenciones del día. Una chica me ayudó a incorporarme. Sentí que me mareaba, y tras avisar, descargué el vómito. Estaban preparados para ello, eso estaba claro. En esos instantes escuché palabras relajantes, mientras pedía disculpas: “Tranquilo, tranquilo, estás soltando la anestesia” “No te preocupes, tú sólo expulsa, nosotros nos encargamos del resto”… Tras esos  breves minutos, percibí el alivio total. Ataron una venda elástica al final de la cama y me la acercaron a las manos: “Intenta incorporarte tú sólo”, obedecí y con la ayuda de una mano en la espalda quedé sentado, asistido siempre por los laterales para sujetarme. Me asearon, me secaron, me cambiaron la ropa de toda la cama y me quedé de nuevo tumbado y feliz.

            Al cabo de unos minutos una chica se acercó: “Javier, fuera hay unos familiares que llevan toda la tarde esperando. ¿Quieres ver a alguno de ellos un par de minutos?” Sí. La sonreí. Sabía que familiares directos no estaban, pues todos viven en Cantabria y les había dicho que no se preocuparan, que estaría bien atendido por los grandes amigos con los que cuento en Madrid. Y en efecto, durante aquella tarde muchos se habían acercado hasta el hospital. Algunos por sus trabajos se tuvieron que ir, como mi compañero de piso, Cristóbal, que había pedido incluso unas horas a su jefe para estar el mayor tiempo posible cerca de la zona de operación. Ya pasaban de las 12 de la noche, cuando por aquel pasillo, semi oscuro, vi caminar a Raúl. Llegó hasta mí, la enfermera le dijo que tenía unos minutos y tras mirar a mi amigo, le pedí que me diera la mano. Él me comentó que el cirujano les había hablado de la operación y que estaba muy satisfecho. Que todo estaba bien. Hablamos algo más, que no recuerdo,  y se fue.

            Mientras le veía irse, sentía junto a él la presencia de tantos y tantos amigos que a través de las redes sociales, correos, Whasap, llamadas telefónicas que Raúl me había dicho estaba recibiendo en mi móvil… Presentía la energía de esa buena gente, que buscaba que me recuperase pronto. Y sé, al día de hoy, que todos esos grandes deseos de personas a las considero mi familia particular, que son los amigos, hicieron que aquel día estuviera cargado de energía y vida, y que a día de hoy, sigo recibiendo sus mensajes, visitas a casa, etc. Gracias a todos por formar parte de mi vida, así como a los familiares que se ha puesto en contacto, y me preguntan casi a diario, como estoy. Os quiero.

            Para terminar sobre mis horas en la UCI, decir simplemente que cuando a las 10 de la mañana del día 26 me llevaban de la sala hacia la habitación, una sola palabra, repetitivamente, brotaba de mi garganta: GRACIAS. Durante toda la noche la atención fue perfecta. Presentía como estaban alrededor de mi persona, mirando monitores, observando las bolsas con los diversos productos que entraban a través de la vía en la mano, a mi organismo, el aseo de la mañana, la primera cura. Todo con la máxima delicadeza, la máxima precisión, la máxima simpatía. Y donde desde el primero al último, te hacían sentir bien y arropado por su trabajo y conocimientos.

            Mi más sincero agradecimiento a todo el personal de la UCI. En vuestro anonimato, pues nosotros no somos capaces de recordar vuestros rostros, debido a los momentos que estamos viviendo, nos entregáis lo mejor. Os llevo en mi corazón.

 

miércoles, 9 de abril de 2014

UN TIEMPO PARA MEDITAR, SUFRIR Y LUCHAR (CAPÍTULO XI)


                     CAPITULO XI

  LA OPERACIÓN

          Sí, se terminaron los capítulos que tenía programados y en el deseo que cuando llegara el momento, estuviera en disposición de continuar con la historia, pero no ha sido así. La operación ha resultado ser más dura de lo que yo pensé y sobre todo los dolores… Pero vayamos por partes. Nos habíamos quedado en el día 24, la víspera de ingreso para la operación.

El día 25 se despertó fresquito pero muy luminoso y allá me encaminé, a la Fundación Jiménez Díaz, muy pronto, pues debía estar sobre las 8 de la mañana en admisión. Emprendí la aventura con una pequeña maleta que contenía ropa interior, una bata, unas zapatillas y un neceser.  Sí, me fui sólo, no desee molestar a nadie. ¿Para qué? En aquella primera mañana simplemente acudiría a admisión, me acompañarían a la habitación y luego la espera hasta ser intervino. No tenía razón de ser que nadie perdiese el tiempo en algo que no era necesario.

La espera fue lo peor. Me habían informado que me relajara y que sobre las 12 del medio día me bajarían a quirófano, luego sobre las 9:30 de la mañana un nuevo comunicado me alentaba a que sería sobre las 11 de la mañana la intervención. Pues no, ni a las 11, ni a las 12 y es que ese día debían de tener mucho trabajo, sería aproximadamente a las 16:30 cuando me trasladan a la zona de preparación a la operación y tras los preparativos (Poner vías, sueros, otros productos desconocidos para mí. Coger la arteria para el proceso de la intervención (control respiratorio y cardiaco). Ponerme una epidural para que tras la operación, pudieran administrarme determinado calmante, tomarme la tensión…) me quedé allí hasta que, creo que serían las 17:30 horas, me introdujeron en quirófano y… De esa aventura nada puedo contar, pues al poco de que mi cuerpo tocara la mesa de operaciones, me saludaran los dos cirujanos y el personal,  y tras decirme el anestesista: “Piensa en algo alegre” me quedé completamente dormido. La  visión que más recuerdo de aquellos instantes, es la de los gorros de la mayoría de quienes estarían en aquella sala durante la intervención: Eran de colores, de rayas, de topos. Sinceramente alegraban la vista, en un lugar tan frio como es un quirófano.

Como ya os había comentado, la operación tuvo una duración de unas cuatro horas y en ese tiempo los cirujanos no tuvieron ninguna duda: Existía un enfisema y un nódulo, el cual no había podido ser analizado previamente, por la zona en que se encontraba; así que determinaron por eliminar la parte superior del pulmón. Una tercera parte del total, y de esa forma dejar completamente limpia toda la zona y el pulmón en cuestión. El único “temor” que les quedaba, era si al realizar tal intervención y siendo la parte superior del pulmón, pudiera tener alguna “fuga aérea”, algo muy habitual, por lo que mis tubos de drenaje estaban deparados dos maletas, una para cada tubo y uno de ellos midiendo la posible fuga o no del pulmón intervenido.

Mañana os contaré los momentos vividos en la UCI, pero ya desde aquí, y aunque mañana me repita, no me cansaré de felicitar a todo el equipo de la Unidad de Cuidados Intensivos. Personal, no, no quiero llamarles personal, sino personas encantadoras y trabajadoras infatigables. Mil gracias a todo ese maravilloso equipo, al igual que al que participó en quirófano.